Pedí que me lo dieran y cuando lo tuve en brazos le di besos en su cabecita, lloré, no pude evitarlo y luego me lo quitaron para vestirlo además de sacarlo y que los demás lo vieran.Me pasaron a la sala de recuperación y luego las chicas entraron con muchos regalos, ellas me felicitaron al ver el precioso niño que había tenido.— ¡Mami! — Luke entró corriendo — ya miré a mi hermanito y es el más guapo de todos los bebés que hay en esa sala, hiciste un buen trabajo.— Hola mamá — llegó Amy y me sonrió — el niño es precioso, ¿Te sientes bien?— Hola mis amores — les sonreí a ambos y después miré a Amy — me encuentro bien cariño así que no te preocupes demasiado por mí, los dos me hacen muy felices al ver que quieren a su hermano.— ¿Cómo no quererlo si es algo que viene de ti y de papá? — Amy sonreía dulcemente — además su amor no cambió en absoluto hacía nosotros así que es algo muy bueno.— Tenemos mucho amor que dar — dijo Adriel — así que no te preocupes cariño porque siempre los v
— Lu amor apresúrate — me gritó Adriel — si llegamos tarde a la inauguración del restaurante de Dánae nos va a crucificar.— ¡Ya voy espérame un momento! ¡Me encuentro preparando a Ian!Hoy era la inauguración del restaurante de Dánae pero ayer los niños se habían puesto tan energéticos que nos dormimos pasado de la media noche y por lo tanto nos despertamos tarde y para esto fue el llanto de Ian pidiendo leche que fue nuestro despertador.Ian mi último hijo ya tenía ocho meses y era hermoso, las chicas lo adoraban y vivían haciéndole las miles de muecas para que les sonriera inclusive Marien y Lía que eran las menos cariñosas se rendían ante el encanto de mi pequeñín.— Estas hermosa amor — me dijo besándome — ya vámonos.Nos habíamos visto forzados a comprar una camioneta ya que con el último integrante había sido imposible que todos viajáramos juntos tanto en el Jeep como en el auto de Adriel. Las salidas familiares eran ideales con este carro.— ¡Bruno ven!Bruno salió corriendo y
En la casa reinaba todo el ruido que podría tener una propiedad con tres niños. La hermosa familia conformada por cinco personas estaba reunida en la piscina mientras los pequeños nadaban. — Cariño — Adriel fue a ver a Lucía — hay alguien afuera que desea ver a tu tía. — ¿Quién es? — ella lo miró con duda — que yo sepa pues la chaparrita no esperaba a nadie de visita. Lucía se salió de la piscina mientras cargaba a su último hijo, el pequeño Ian ya estaba grande e incluso comenzaba a gatear. Fue a las afueras de la casa en donde supuestamente estaba la visita de su tía y ahí miró a Carlos acompañado de una mujer que sostenía un bebé. — Carlos — ella lo ḿiró sorprendida — ¿Qué haces aquí? Pensé que nunca ibas a venir de visita. Lucía Adriel se puso detrás de mí y colocó sus manos en mis hombros, le entregué a nuestro hijo entonces fui a abrir la puerta de mi casa para hacer que los tres pasarán a la casa. — La chaparrita va a estar contenta de verte, pero no se queden ahí y pasen
Hola mis amores, esta es la primera historia de una saga titulada Almas Heridas, cada una de las chicas tendrán sus historias mostrándolas en sus diferentes facetas. Aquí les dejo el orden en el que siguen: 1- Rea: La esposa de mi amante. 2- Marien: Espinas en el corazón. 3- Dánae: Con las alas rotas 4- Lía: Título aún no definido. 5- Briseida: Mi reina sin corona 6- Thiago Fernández: Título aún no definido. Las historias en comparación con Vendida al mejor postor van a ser más cortas, trataré de que cumplan sus expectativas aunque no prometo nada, muchas gracias por todo el apoyo que le han venido dando, nos seguimos leyendo en mis otros escritos.
¿Qué tanto daño te pueden hacer las personas que se supone que te deben proteger? Aquellas por las cuales pisaste este mundo sin siquiera pedirlo, pero que tienes que agradecerles por haber hecho el “Sacrificio” de simplemente ponerte aquí e incluso también por darte educación, techo, salud, entre otras cosas.¿Qué los padres son una mierda? Si, puede ser, pero la mayoría de los chiquillos que dicen tal cosa solamente saben argumentar el hecho de que papá o mamá les prohíben, manejar si toman, tomar, que lleven buenas calificaciones, no drogarse, mantener su habitación ordenada y esas cosas que son normales. ¿Quieren ver lo que es una mierda de padres? Vengan y conozcan a los míos.Hola, soy Lucía, soy la hija menor de Lina, una mujer que no sirve ni como mamá ni como hija, ¿Mi padre? Simplemente desapareció un día como la neblina desaparece ante los primeros rayos del sol pero por lo que tenía entendido se trataba un hombre irresponsable que solamente vivía tirado en el sillón espera
Años atrás de los acontecimientos— Bien — habló Lina sentada — ¿Cuándo piensas encontrar trabajo? No pienso seguir manteniendo una buena para nada, querías ser enfermera ¿No? Pues entonces ahí tienes tu carrera busca como ejercer porque ya no eres una niña.— Estoy buscando empleo pero por favor dame un poco de tiempo — suplicó Lucía — es un poco difícil ya que no tengo experiencia.— Escucha muy bien, suficiente con estar apoyando a Carlitos con su carrera para que todavía tenga que mantenerte a ti, o buscas trabajo cuanto antes o simplemente te largas de la casa.— Lina — habló una señora — deja a Lucía tranquila, ella se está esforzando lo más que puede sin embargo la situación no es fácil.— ¡No te metas! Este asunto es con Lucía — ella miró a la chica — si tan solo te hubieras conseguido un hombre las cosas serían diferentes, aunque viendo tu físico pues es difícil que consigas algo bueno.Las manos de la chica se volvieron puños, ella respiró profundamente para no
— Así es, ¿Aceptas el trabajo?Fui feliz, no lo pude negar, finalmente podía trabajar y ya no tendría que estar escuchando la misma cantaleta de Lina sobre esto. Llegué a la casa y en el momento que anuncié que obtuve el trabajo solamente fui felicitada por mi nani y la chaparrita.— ¿Acaso no piensas felicitarme? — le pregunté a Lina — pensé que te ibas a alegrar.— No veo porque felicitarte por algo que simplemente es tu responsabilidad, ahora deja de hacer tanto alboroto por un simple trabajo de enfermera y déjame ver las redes sociales.— Por cierto Lina — habló Carlos — necesito unas cosas para la universidad, dame dinero.— Lucía — habló Lina — dale dinero a tu hermano.— ¡¿Qué?! ¿Acaso es una maldita broma lo que estás diciendo? Apenas hoy fue que conseguí trabajo, no tengo dinero para darle a Carlos además eso no es mi responsabilidad.— Yo no tengo dinero tampoco, mañana mismo pides un adelanto y le das a Carlitos la plata que necesita para su universidad.Me mol
— Solamente serán necesarias las cosas de limpieza, en el psiquiátrico se le pone uniforme.— Muy bien.La niña Anayanci trataba de mantenerse fuerte y el joven Jorge igual pero cuando la sacaron ella estaba consciente.— ¿Me llevan a pasear? — preguntó ilusionada — ¿Adónde vamos?Al escucharla no pude contener las lágrimas entonces me acerqué a ella y le di un beso en su cabeza blanca.— La quiero mucho señora Amalia.— Yo también mi niña y perdóname por lo que te hiceElla me abrazó pero de repente cambió y me estaba ahorcando, los muchachos la sostuvieron fuertemente y ahí fue cuando el joven Jorge se desmoronó.— Joven…Él me abrazó fuertemente mientras sus lágrimas caían por mi cuello, yo correspondí el abrazo y no pude evitar llorar.— Shhh todo va a estar bien, joven.— No quiero que se vaya.— Es lo mejor para ustedes, créame.Una vez que se la llevaron mire como la niña Anayanci se puso peor que el joven Jorge, sin embargo logró reponerse.— Tenemos que ser fuerte