Íbamos camino a mi casa, no le dije nada, solo la subí a la camioneta. Ella tampoco volvió a hablar, estaba empapada y tenía frío. Puse la calefacción, aunque yo no sentía frío en lo absoluto. Al llegar a la mansión me bajé y le pedí que no bajara, que se mantuviera agachada. Sé muy bien que si se enteraban de que tres rogues me atacaron por meterla al bosque, mis padres no se callarían y empezarían a hablar de mi conducta salvaje y despreocupada, poniendo en peligro a lass.Tomé los rogues y los lance al patio. Varios de los lobos que cuidaban de la entrada fueron hasta donde mi papá y este salió con rapidez. —¿Vael qué pasó?— Mamá y mis hermanos venían con él. Con toda mi calma hablé. —estaba en el bosque y estás asquerosidades me atacaron—Papá me mira y frunce el ceño es raro que los rogues ataquen a un alfa por así decirlo huelen cuando un lobo es más fuerte que ellos y para mi mala suerte un lobo vino a mi padre con un teléfono en la mano papá miraba los rogues con preocupac
Con una de mis garras hice un corte no profundo en su brazo izquierdo, del cual empezó a sangrar mucho.Una de la linterna cayó al suelo, quiso ver que era eso que corría por su brazo y al ver la sangre se asustó cuando volvió a mirar hacia delante. Estaba yo sentado, tenía la cabeza de lado mirándola, mis ojos brillaban en la oscuridad.—va-Vael— solté un gruñido.—y-yo-no-no te tengo miedo— soltó un respingo por lo rápido que me levanté y le susurré al oído.—¿Por qué estás temblando?—Mi voz era varonil, aguda y áspera, lamí su mejilla con mi lengua espinosa y temblaba.—Mataste a esos lobos, ¿por qué?—preguntó. Estaba tan nerviosa que la voz no le salía del todo bien, alimentando aún más mi ego.—No mato inútiles, princesa, pero a ti te voy a matar ahora— la tomé por un brazo y la llevé hasta la silla, amarré sus brazos detrás de su espalda y tapé su boca con un pedazo de tela de su vestido. Sus piernas la abrí a cada lado, apagué la luz, todo era oscuro, solo yo podía ver. Ella es
~Te has vuelto débil, sentiste culpa.~~Déjame en paz.~ ~No pudiste soportar lo que le hiciste a lass ¿recuerdas lo que significa ella en tu vida, verdad?~Lo sé, pero tampoco la puedo alejar del todo y lo sabes, ¿qué querías? ¿Qué la dejará morir desangrada? Lo que le hice fue horrible por tu enojo. Joder, VELKAN prácticamente violé a Lass. Soy una puta mierda, eso no me hace sentir nada cómodo. Ciertamente, no puedo estar como ella quiere, pero tampoco puedo actuar así. Pagué toda mi ira con ella, o más bien toda tu ira.~ ~Nunca le has tratado con amabilidad, no me culpes a mí por tus reacciones.~~¿En serio velkan? A veces olvidas quién eres.~~Pues, ve y pídele perdón y deja de lloriquearme si sabes cómo soy que te hace creer que le tendré pena.~~¿Dime velkan? ¿Eres el mate de Lass o no?~Una semana después… Vael tuvo que sostenerse de los bordes de su escritorio, algo golpeó su cabeza desde adentro aturdiéndolo, cerró sus ojos y los apretó velkan su lobo había parado de hablar
Lass mueve la cabeza de un lado a otro, mientras él conduce, le da una mirada al escuchar que gime y se toca la cabeza —despertaste— Ella lo observa con la mirada un poco borrosa y los recuerdos vuelven a su cabeza de golpe.—¿Por qué hiciste eso?—Le pregunta, mirándolo fijamente, sin entender en absoluto hasta dónde él pretendía llegar con todo ese juego.—¿Qué hice? ¿Salvarte de acostarte con ese estúpido? Por favor, desde lejos se le nota que solo quiere acostarse contigo. No entiendo cómo puedes ser tan ingenua, te dejé en casa...-- —ME DEJASTE EN CASA DESPUÉS DE QUE ME VIOLASTE, VAEL—le gritó enojada a punto de llorar. Estaba tan cansada de él, llevaba años viviendo esa pesadilla. Es el amor de su vida, pero simplemente su amor por él la, lástima.—Yo no te violé, solo tuvimos sexo un poco duro, pero no fue una violación— —¿y qué faltaba para que lo fuera? ¿Que me pegaras? ¿Que gritara como loca? ¿Dime Vael? DIME QUE MÁS FALTABA HIJO DE PUTA— Le dio varios puñetazos y él frenó
Me despierto al escuchar a lass gritar, se mueve de un lado a otro, la veo desesperada, está sudando y hace gestos de dolor con su rostro, velkan me habla, ~Lass tiene una pesadilla.~ ~Lo sé, ya había escuchado a Akira hablar de esto, pero no le di importancia, no sabía que era tan severo.~ ~Debes saber cada detalle de lass y lo sabes bien.~~¿Y qué quieres que hagas? ¿Qué me meta en sus sueños?~~Esas pesadillas muchas veces son revelaciones de futuros.~~Lass, es humana, estás siendo dramático.~~Cállate, no has aprendido nada en el tiempo que llevamos juntos.~ ~He aprendido bastante, pero sueles ser insoportable. VELKAN~~Casi lloraste al escuchar a lass pedirte que la dejes libre, aún eres débil, muchacho.~ ~¿Qué pretendes? ¿Que actúe todo el tiempo como que no me duele escucharla? ¡Maldición VELKAN!, me duele verla mal, estoy enamorado de Lass de una manera enferma~~Pues muérdela, únanse y convierte en uno más de tu linaje.~~No dije que quiero eso, deja de malinterpretarme.
—No tienes por qué darme explicaciones, sé que tu primo es un completo estúpido— —lo sé, pero no estuvo bien, fui contigo a la fiesta y debí volver a casa contigo, creo que era lo más correcto— Lass y sander hablan en una banca, la mayoría estaban estirándose para empezar el entrenamiento, lass vestía de un top y pantalones en chándal no le quedaban muy ajustados así que podía moverse con agilidad también usaba zapatos cómodos y dos trenzas un poco despeinadas. Vael había llegado y a su lado Lucía, quien mostraba cara de superioridad al llegar con él sosteniendo su brazo. Lass al verlos, sintió una punzada en su estómago, pero estaba acostumbrada. Era imposible que él no llamara la atención, sus rasgos fáciles tan duros y toda su mandíbula marcada, su porte de alfa que enloquecía a las lobas sin olvidar su aroma único en su clase. Su estatura y lo grande de su cuerpo, pecho, espalda, brazos, piernas, manos, pies y otras partes que lass conocía muy bien. Sus ojos, los cuales estaban
Naím y Kevin mandaron a recoger el cuerpo desmayado de sander mandándolo con el doctor. Había mucha sangre sobre la tierra, él no dijo nada, hubo mucho silencio de repente. Caminó fuera del círculo de lobos que los rodeaba y le abrieron paso. Sus ropas estaban machadas de sangre y destruidas por los zarpazos de sander.—Estarás bien— le dijo ella mientras acariciaba su cara con tristeza. Naím se acercó junto a Kevin, no habían visto la herida de lass, sus ojos estaban llenos de lágrimas, no sentía nada por sander, pero le tenía aprecio como un gran amigo para ella. Al sentir la mano de su padre sobre sus hombros, se volteó enojada y le gritó —déjame, podías evitar esto, pero… — —Hija, somos lobos, no importa quién sea tu rival en las guerras, entiendo que te duela esta situación, tú no tienes idea de lo que es una guerra y espero por la diosa que nunca tengas que vivir una— dejando que las lágrimas corran y sin pestañear, le respondió a su padre.—Yo vivo mi propia guerra cada vez qu
Arturo le da la carta a Naím, él la lee con tranquilidad, habían sido a invitados a una celebración.—pues como te decía, tu debilidad es tu corazón, si quieres permanecer entre los lobos tienes que tratar de olvidar tu parte humana y eso implica dejar de sentir pena, dolor y tristeza cualquier sentimiento excepto el de amar a tu mitad, cuando mamá vino a este mundo para ella fue una total frustración, pero pudo adaptarse con el paso del tiempo papá la ayudó, pero tú no, dime algo Lass ¿te gustaría irte a vivir al mundo de los humanos?-Naím gruñe molesto y golpea la mesa negando, cómo Arturo le hacía esa pregunta tan descabellada a su hija, tenía intenciones de alejarla de ellos o qué rayos, con enojo visible se levanta de la mesa mirando de mala gana a Arturo —¿qué rayos estás diciendo? ¿Dime que es una puta broma? Lass no sabe nada de los humanos, deja de meterle ideas tontas en la cabeza, ¿qué hará allá? No sabe lo que es vivir con personas de su mismo tipo—Lass sorprendida por l