— ¡Mmmmm, que divino despertar! — dijo ella. — Cuando hablamos no quise decirte que se había solucionado todo, esa fue la llamada que recibí— dijo Hafid— quise darte la sorpresa y venir a estar con ustedes acá. — Gracias, es un hermoso detalle de tu parte— dijo Sylvia— y con respecto a lo de la adopción; ¿ya lo pensaste? — No tengo nada que pensar mi cielo bello, solo está con que ustedes lo deseen y vamos y empecemos con todo el papeleo para que Melanie sea nuestra hija— dijo él. — ¡Eres tan maravilloso mi amor!, gracias, gracias, los niños estarán felices también de saber que tendrán una nueva hermana— dijo ella llena de emoción. — Traje desayuno para todos, así que vamos a levantar a los niños, para que nos sentemos a la mesa a desayunar— dijo él. Salieron con una gran sonrisa, también quería ver la cara de los niños, cuando lo vieran allí despertandolos en su habitación. La primera habitación era la de la niña, Hafid, solamente asomo su cabeza y la vio allí, durmiendo plá
Con lo de la adopción de Melanie, tuvieron que quedarse un tiempo más de lo previsto mientras salían los papeles legales de la adopción, una semana se convirtió en varias semanas. Estando allí Hafid recibió un sobre cerrado en unos de los días que estaban allí, lo abrió y vió que se trataba de la investigación sobre el nacimiento de su Sylvia. Después de leer la información, decidió compartirla con ella, allí había una muy buena recopilación de documentos acerca de donde estaba la familia de su esposa.— Amor, ¿puedes, venir un momento por favor? — dijo Hafid llamando al cuarto de labores de ella. — ¿Qué sucede?— preguntó ella intrigada. Hafid le mostró un sobre y dijo:— Acaba de llegar ésta correspondencia con información de interés para tí. — ¿De qué se trata?— preguntó con ansiedad. — El detective ha hecho un muy buen trabajo— dijo Hafid. Le entregó el sobre y ella con los dedos temblorosos empezó tomar cada documento que contenía, los leyó con grandes expectativas. — Está
— Eres mi hija con Daphne, me siento mal por conocerte en éstas circunstancias— dijo él— te ves muy sofisticada, no parece que hayas crecido en un orfanato. — Ryan, ya es tarde para lamentar lo que ya sucedió, ahora lo importante es que ya no estoy sola y tú tampoco lo estarás— dijo ella— me gustaría saber si los padres de mi madre aún viven. — La verdad solo sé que él padre de Daphne trabajaba en el ferrocarril, que su madre estaba siempre en casa, pero nunca le pregunté por los nombres— dijo él. — Es un avance— dijo Hafid— por allí podríamos averiguar. — Eran de un pueblo vecino, — dijo Ryan— pero tampoco sé exactamente cuál, solo sé que cada mañana Daphne Montgomery venía a vender flores. — Esa información es valiosa Ryan— dijo Sylvia— tenemos un punto por donde empezar a averiguar. — Lamento que te hayas criado en un orfanato— dijo él— perdí demasiado tiempo en empezar a buscar a tú madre. — A veces las cosas pasan y hay que aceptarlas— dijo Sylvia. Estuvieron hablando po
Sí, su bebé ya pronto estaría en casa, ella quería que llegara el momento por si sólo, su doctor le había informado que se estaba desarrollando perfecto. Tendría un varoncito, compañero de juego para Farid, ya quería escoger el nombre para él, esa tarde allí su madre, Abir, Ryan su padre reunidos con ella y los niños. — ¿Qué nombre te gustaría ponerle? — dijo Halima— ¿Quieres uno de origen británico o de las raíces del padre? — Realmente me gustaría hacer como un concurso y colocar en una funda varios nombres y escoger— dijo ella. — Esa idea es buena— dijo Abir— me gusta Omar. — Anoten los de su preferencia y los colocamos acá y luego escogemos— dijo Sylvia.Empezaron a sugerir varios nombres y cada uno lo colocó dentro de la funda, los niños vieron llegar a su padre, él al ver la reunión preguntó:— ¿Qué están haciendo? — ¡Escogiendo el nombre de nuestro hermano, — dijo Farid— faltas tú papá.— Sí, y la sugerencia del papá no puede faltar— dijo Halima. Hafid tomó un pedazo de
Sylvia se sentía a éstas alturas privilegiada al ser una persona que se había criado en un orfanato, comprendiendo que al morir su madre todo lo sucedido en su vida había tenido el propósito de vivir las experiencias más maravillosas jamás imaginadas. Tenía más de lo que había soñado, un esposo maravilloso a quien amaba, hijos, sabía quien era su padre y ahora lo tenía con ella aprovechando cada momento de esa maravillosa bendición. Además tenía abundancia financiera, algo que nunca pasó por sus pensamientos, pero allí estaba viviendo holgadamente, podía ayudar a muchos niños sin hogar a través de fundaciones sin fines de lucro. Se sentía muy útil, de alguna manera era un instrumento productivo para impulsar a otros a colaborar en éstas hermosas causas, también había averiguado sobre sus abuelos maternos. La tarea no había sido fácil, pero tenía información, tenía sus nombres, era un avance gigantesco para ella, solo faltaba la dirección exacta, pronto iría a Europa para conoc
La mujer que estaba adentro de la casa lanzó una exclamación y se apresuró a saber quienes eran aquellas personas que traían noticia de su única hija, a quien no veía desde hacía más de veinte años. — Buenas tardes— saludó la mujer— ¿Que saben de Daphne? La voz de la mujer estaba llena de ansiedad por querer saber. — ¿Podemos pasar?— dijo Hafid. — ¡Oh sí! ¡Qué descortesía! ¡Adelante y siéntense!— dijo la mujer. Se sentaron con rostros ansiosos por saber de su hija. — ¿Quienes son ustedes?— dijo la mujer— ¿Que saben de mi Daphne? — Señora Abigail, Soy Sylvia, hija de su hija Daphne Montgomery, lamentablemente mi madre falleció cuando nací y no pudo verme crecer.— la voz de ella estaba llena de emoción. — ¿Eres nuestra nieta?—dijo el hombre llamado Larry— nunca supimos más de Daphne, ahora sabemos porque. — La información que tengo es que al embarazarse huyó de casa y luego al momento del parto se complicó su salud y falleció— dijo Sylvia. La mujer empezó a llorar con un llant
Todo estaba marchando como Sylvia lo esperaba, sus abuelos decidieron quedarse a vivir en Londres, mientras que Ryan vivía en América con su hija. Sylvia se dedicaba a su esposo e hijos, le encantaba su vida familiar, Hafid viajaba cuando se. Le era requerido, pero generalmente manejaba sus negocios desde casa. Los niños en la escuela, por lo menos tres; Amira, Farid que pronto cumplirían sus diez años y Melanie que se iniciaba en su educación escolar. Cada día eran recogidos en el colegio por un transporte privado, era mucho el cuidado que se tenía por ser niños de un hombre influyente en los negocios como lo era Hafid Aziz. Deborah la prima resentida de Hafid no se había quedado nada contenta al ser ignorada por su primo de quien siempre estuvo enamorada. Ella tenía un secreto bajo la manga para arruinar la felicidad de su adorado primo y su odiosa esposa Sylvia, se decía Deborah constantemente para alimentar su odio. Consideró que era el momento perfecto para introducir de n
Hafid y Sylvia se encerraron con Amira y Farid, no era fácil ésta conversación, aunque sabían que un día sucedería, no esperaban que pasara de ésta manera. Los niños tenían sus caras llenas de expectativas, no sabían qué era lo que estaba pasando, pero sus padres se veían preocupados y eso significaba que algo grave estaba pasando. Hafid se aclaró la garganta y empezó diciendo:— Esa mujer que se les acercó, quién dijo llamarse Deborah, es nuestra prima, pero no es una buena persona. — Lo sabemos papá— dijo Amira— ¿Quién es Rachel? — Ésta conversación no debió suceder de ésta manera, pero Deborah con su mala intención la adelantó— dijo Hafid— antes de estar casado con Sylvia, estuve casado con Rachel. — ¿Y dónde está ella?— preguntó Farid. — Rachel falleció cuando ustedes eran unos bebés— dijo Hafid. — ¿Entonces ella es nuestra mamá?— preguntó Amira. — No hermana, nuestra mamá es Sylvia— dijo Farid. Hafid los miró y ellos se miraron entre sí, sin comprender la mirada de su pa