Curthwulf sabía que Charlotte tenía razón. Aunque había estado al tanto se las necesidades de su manada y sus negocios, apenas habían llegado después de tantas complicaciones. Pero, el desespero de enamorar a Charlotte, le hacía olvidar ello.— Es verdad lo que dices, pero, solo serán unos días.— Si sigues faltando tanto en tu trabajo, tendrás problemas.— Soy el presidente y dueño de la empresa, ¿Quién sería tan osado de decirme algo al respecto? — pregunta Curthwulf sonriente.— No voy a salir. Apenas he conseguido trabajo y quiero mantenerlo.— ¿Cuánto te pagan? Si es por eso, podría contratarte en una de mis empresas y trabajar desde la distancia. Aunque te parezca increíble lo que te voy a decir, mis empleados son los mejores pagados del mercado y tienen una flexibilidad acorde a su rendimiento. >> Así que, si haces las cosas bien, podrías estar trabajando en un crucero por las Bahamas o algo mejor. Sin mencionar que vamos a tener momentos muy agradables en familia, como debe s
Dos días despuésLos dos niños corrían emocionados en el gran parque temático, mientras Charlotte negaba al dejarse convencer por unas miradas tiernas. Curthwulf, quien había querido tanto este viaje, seguía preocupado por los nuevos problemas, sin embargo, fingía que todo estaba bien.Ojalá no me este equivocando — dice Curthwulf al ver que no hay muchas personas que le generen confianza y menos, con tantas personas.“¿Cómo está la seguridad en el parque temático? — pregunta Curthwulf mentalmente”“El parque es bastante grande, señor. — dice Rolf” “Creí que serían lo suficientemente inteligentes para apartar todo el parque para nosotros — dice Curthwulf enojado mentalmente”“Ese era el pensamiento, señor. Pero, con tan poco tiempo, nos fue imposible hacerlo. — dice Retmus en el lado norte del parque temático”“¿Quién se negaría a hacerme un favor a mí? — pregunta Curthwulf molesto”— ¡Curthwulf! — llaman desde la distancia, causando que él y Charlotte giren sus rostros hacia el homb
Charlotte se dejó llevar por el ambiente que ambos habían creado al Curthwulf mirarla con mucho amor. Fue por lo que, ignorando que estaban en un lugar público, se acercaron lentamente para besarse.— Pero que hermosa coincidencia volverlos a ver — dice Carlos interrumpiendo a la pareja que estaba por besarse. — ¿Qué demonios haces aquí? — pregunta Curthwulf molesto.— Bueno, te lo dije, traje a mi gente a disfrutar del parque temático.— Es un ambiente familiar y tú no tienes familia. Así que, no entiendo porque estás aquí.— También se vale pasar un rato agradable sin necesidad de tener familia — dice Carlos sonriente y los dos suspiran profundo.— ¡Mamá, esto es increíble! – grita Lowell emocionado y Charlotte sonríe ignorando que todos miran a la mujer joven con dos niños con edades parecidas, pero, sin compartir algún rasgo.— Me alegra que te diviertas — dice Charlotte cuando el niño cae al gran tobogán en forma de robot.Los dos niños celebran cuando llegan a la piscina, mient
El juego parecía un enfrentamiento en el que se debatían la vida. Pero, básicamente era eso. Quien perdía, debía perder el orgullo al servirle a su enemigo y por ello, Carlos llamó a sus mejores hombres para jugar.Todos se convirtieron en lobos o gatos y comenzaron a jugar con tanta violencia que muchos gatos salieron volando con el balón. Todo parecía doloroso, pero, no se escuchaba un solo quejido, ni siquiera, de los gatos que caían al suelo después de salir volando.Todos estaban preocupados por lo que sucedía, cada bando, deseaba ganar, mientras los niños aplaudían y apoyaban a los lobos, siendo los únicos que básicamente se divertían. Porque Charlotte, solo miraba con horror, como un juego solo para divertirse, terminaba en un campo de batalla.“Y otro gato que sale volando con el balón — se burla Curthwulf, mientras Carlos observa con enojo al lobo de mirada roja y pelaje negro”“Puedes jugar todo lo rudo que quieras, no me interesa. Lo que, si debes tener claro, es que es
Era algo sorprendente de ver, los hombres enemigos intentaban terminar su tarea como fuera, pero, los hombres que también deseaban hacer su trabajo, respondían con rapidez, convirtiendo eso en un fuego cruzado angustiante.Charlotte, siente como su cuerpo duele y sus oídos duelen mientras emiten un sonido que causa demasiado dolor, lo mismo, sucede con los niños e incluso Curthwulf, quién se queja, mientras con mareo, busca a los miembros de su familia, que levemente se mueven.— Mi familia… ellos deben estar bien — dice Curthwulf en un hilo de voz.Los sonidos del disparos, aturden más a todos, mientras Charlotte, con dolor, intenta levantarse y proteger a los niños que se quejan sin parar por el dolor que sienten. La cabeza de todos duele, mientras buscan a su familia. Con la piel expuesta en varias partes del cuerpo, Charlotte logra sentarse, mientras los lobos alrededor, cubren con su cuerpo a ellos. Desesperada, ve a los niños con las manos entrelazadas y con dolor, se acerca a
Curthwulf se sentía impotente. Estaba demasiado enojado consigo mismo por haber expuesto a su familia de tal forma, solo por haber propuesto tener una cita familiar que había terminado en una desgracia total.Sabía que se había equivocado, pero, ver a la mujer que ama, observarlo con odio, era un golpe doblemente doloroso. Uno del que no podría recuperarse.En ese lugar, con un calor impresionante por la explosión, el humo despertándose en el aire y muchos cuerpos sin vida en el suelo, lo que más le preocupaba era la salud de los pequeños y el odio que ahora había aparecido en el corazón y mirada de Charlotte.He cometido un grave error — susurra Curthwulf mentalmente.Charlotte estaba molesta. Aunque culpaba a Curthwulf por esto, también se culpaba así misma por no ser lo suficientemente fuerte para proteger a los niños. Por ello, se sentía impotente y solo podía débilmente desquitar con otro la frustración que sentía.Curthwulf suspiró profundo e ignorando su
Era sorprende como todos esquivaban encontrarse con Curthwulf en el hospital, no había necesidad de anunciar en los parlantes lo que había ordenado Curthwulf, porque con los grupos de trabajo, habían dejado en claro la petición de uno de los hombres más adinerados de Inglaterra.Curthwulf Holftmann era en pocas palabras, el hombre más adinerado después de la familia real. Por lo que, solo la reina o rey de Inglaterra podrían impedir que él quisiera algo y estos, ni siquiera se atrevían a tenerlo de enemigo, mucho menos el pueblo que solo quería tener su favor y no su odio.El aura que por meses había ocultado de Charlotte, como el perro que se lanza a morder al enemigo y es tan dócil con su dueño, muestra Curthwulf su poder y frialdad con cada paso, negándose a que su propio dolor lo doblegue.— ¿Dónde está mi familia? — pregu
Cada clan, tenía su manera de dirigir su manada. De la única manera que un clan se metiera con otro, era solamente para doblegarlo y/o hacerlo caer. En este caso, el gran señor del clan suizo, había tomado a personal la muerte de su hijo e ignorando las normas propias, había ido a vengarlo.Todos sabían que las muertes de alfas que lucharan por amor, era algo de lo que no debían meterse, después de todo, cada uno había aceptado su destino al presentarse delante del otro alfa y luchar por dicha mujer, pero él no lo entendía y por eso, ahora estaba corriendo por no ser alcanzado por el monstruo que había regresado al cuerpo de Curthwulf.— Señor… — dice Retmus acercándose al hombre que ve a los dos niños y Charlotte, profundamente dormidos.— Si no tienes algo importante que reportar de esto, largo. No quiero escuchar tonterías. — dice Curthwulf y Retmus traga duro. Era consciente que un paso en falso, podría acabar con su vida.— Hemos encontrado una pista importante para saber quién h