Charlotte, estaba angustiada, su hermana gemela estaba al borde de la muerte y además de ello, tenía que enfrentarse a un niño que había quedado huérfano esta noche. Teniendo tantas cosas en mente, entró al apartamento con el pequeño lobo en las manos.
Buenas noches — saluda Charlotte y el pequeño niño que lloraba a su madre. Levanta la mirada afligido.
¿Mamá?
Charlotte y Gabriela, eran gemelas idénticas. Muchas gemelas, se diferencian de algo, pero entre ellas no había el más mínimo detalle que las diferenciará. Ni siquiera los granos de la pubertad o marcas de caídas, podían marcar la diferencia, porque ellas estaban tan conectadas que cuando una tenía un grano en la frente, el mismo día la segunda lo tenía del mismo tamaño y lugar.
Lo mismo sucedía con las caídas, como amaban hacer lo mismo, aunque no quisieran, terminaban con las mismas heridas. Era por eso, que estaban acostumbradas a ser confundidas, como ahora. Charlotte respiro profundo y asintió, sabiendo que no podía corregir a su sobrino y decirle que su madre está luchando en la delgada línea de la vida y la muerte. Por ello, dejó que su sobrino corriera y la viera como su madreQué bueno que llegó, señora Gabriela. El niño Zaid se despertó llamando a sus padres y no había poder humano para calmarlo
¡Mamá, tuve una pesadilla!
¿Qué soñaste, cariño?
Soñé que un gran perro se atravesaba en el carro de papá y tuyo, y todos moríamos — dice el pequeño Zaid que Charlotte abraza.
Estoy bien, cariño. Aquí estoy.
¿Y papá? — Charlotte tragón duro y como si estuviera añorando una salida a esa conversación, el pequeño lobo le lamio el dedo índice y fue allí que lo recordó
Cariño, ¿has visto lo que traje? — pregunta Charlotte mostrando el pequeño peludo.
¿Un perro? — pregunta Zaid y Charlotte asiente.
Lo encontré luchando con la lluvia y pensé que ti serias un buen dueño, ¿te gusta?
Es hermoso. Blanco como la leche — dice Zaid tomando al pequeño animal con tanto entusiasmo que se olvidó de su padre — ¿tiene nombre?
No, aun no, ¿quieres darle alguno? — pregunta Charlotte
Niebla o leche.
Dejémosle Niebla. Es bonito — dice Charlotte y el niño se marcha emocionado con su nueva y única mascota.
Cuando se marcha, Charlotte despide a la niñera y se queda con el pequeño que con emoción, se acuesta con el pequeño llamado Niebla. Pensativa sobre la salud de su hermana y muerte de su cuñado, comienza a analizar como desde ahora, va a tener que ser la madre de su sobrino y cuidadora de su hermana.
¿Cómo fue que todo se complicó de un momento a otro? — se pregunta acariciando a su sobrino, mientras contiene las lágrimas.Por otra parte, el alfa, acababa de llegar a su manada. La búsqueda, no le había dado buenos resultados y por ello, regresaba a la manada en busca de su hijo, mismo que había causado un caso en la manada, al haber desaparecido.Buenas noches— dice el alfa y ello alerta a la loba de color gris que angustiada lleva más de una hora buscando al pequeño lobo — he venido por mi hijo.
Señor…
¿Dónde está mi hijo?
Señor…
Creta, ¿Dónde está Lowell?
Señor…
No tengo tiempo, ni humor para repetir las cosas, Creta.
Ha desaparecido. — confiesa Creta haciéndose pequeña.
Que un lobo pequeño se pierda, no es tan problemático porque tienen como comunicarse y la verdad, en esta parte de la región, solo había una sola manada. La más cercana de ellos, estaba a más de cinco mil kilómetros.
Por lo que, no era peligroso que un cachorro estuviera lejos de su manada. Pero, en la situación en la que se encuentran, donde un asesino misterioso está matando, perderse era un problema y más, si era el hijo del alfa y Creta, lo sabía¿Qué acabas de decir?
Lo siento, señor. Lo he estado buscando y también le he preguntado a los chicos, pero, nadie lo ha visto y su olor… es difícil de seguirlo cuando la lluvia esta tan fuerte.
¡Me importa poco el clima! ¡Busquen a mi hijo! ¡Él no puede perderse! — gritó el alfa asustando a todos, quienes corrieron a buscarlo
Pero, por más que lo hicieron, no había rastro de él. La lluvia torrencial, había borrado toda pequeña huella que había dado y eso, estaba enojado al alfa, al punto de hacer un profundo interrogatorio del que los implicados, solo imploraban salir con vida.
¡¿Dónde rayos estabas cuando mi hijo desapareció?! ¡¿No se supone que lo deje bajo tu cuidado porque todos estábamos ocupados buscando al asesino que mató a mi esposa?!
>> ¡Se supone que deje que todos los cachorros y jóvenes lobos se quedarán en mi casa porque era la más segura y aquí podías cuidarlos mejor! Pero, ¿por qué mi hijo ha desaparecido? Miles de cámaras y ninguna captó algo, ¿Qué sucedió? ¿Un fantasma se lo llevó?
Lo siento, señor.
¿Eso es todo lo que van a decirme? ¿Lo siento? ¡Mi hijo ha desaparecido y no tengo idea si corrió con la misma suerte que su madre!
Él sabe que su madre murió — dice el pequeño lobo con nerviosismo.
¿Qué dices? ¿Cómo es que sabe?
Lo aullaron.
Lowell no sabe muy bien lo que decimos con los aullidos. Así que, si sabe, fue que alguien le dijo. — dice Cuthwulf.
Él preguntó— dice el pequeño lobo.
¿Qué le dijiste?
Solo le dije lo que decía los aullidos; su madre murió. — doce el pequeño cachorro y de inmediato, Cuthwulf se vuelve humano y comienza a lanzar todo a su paso, asustando a los lobos que no necesitaban leer su mente para saber que estaba por matar a alguien!
¡Busquen ahora mismo a Lowell! ¡Si no aparece, lo pagaran caro, se los juro! — grita Curtwulf causando que todos corran a buscar al pequeño.
Por otra parte, el pequeño lobo se acurrucaba en el pecho de Charlotte, después de haber dejado dormido a Zaid. Lowell, temblaba y lloraba por la muerte de su madre. Su llanto, escasamente era camuflado por los rayos y truenos que caían del suelo.
Charlotte, que escuchaba los gemidos del pequeño animal, lo llevó a su pecho y acurrucó, el olor de Charlotte, había calmado al pequeño Lowell que se sentía perdido y solo. Con cuidado, acarició al pequeño animal que poco a poco se quedó dormido.
Mamá, ¿me enviaste una nueva madre para que me cuidara? Su olor es agradable— dice mentalmente Lowell mientras sueña con su madre.
Al día siguienteEl pequeño Lowell, despierta cuando Charlotte lo baja de su pecho y corre a alistarse. El aroma de la mujer que lo había calmado, estaba demasiado leve, por lo que, el pequeño lobo de color blanco, como pudo, se bajó de la cama y corrió hasta el baño donde esperaba a Charlotte.El lugar donde se encontraba, era más pequeño del que acostumbraba a vivir con sus padres. Pero de algún modo, se sentía cálido y agradable. Por ello, no pensó en regresar a la manada y quedarse allí todo el tiempo posible.Mi padre trabaja demasiado y mi madre no está. Me quedaré en esta casa, no necesito a papá, mi nueva madre y hermano estarán para mí — dice Lowell decidido.Por otras parte, mientras Charlotte se preparaba para ir a ver a su hermana antes de marcharse al trabajo, Curthwulf estaba al borde de la locura. Su hijo, había desaparecido y la lluvia que aún no terminaba, complicaba la búsqueda que se había extendido a tres manadas el norte y dos al sur.Nadie sabía lo que sucedía, e
El magnate Curthwulf, se marchó del edificio con su hijo, mientras Zaid salía del baño, llamando a Niebla. Angustiado por no verlo, se cambió rápido y con desespero, comenzó a buscar a Niebla por todo el apartamento.¿Dónde está Niebla? Él no puede perderse— dice Zaid, angustiado por n encontrarlo.Seguramente se quedó dormido en algún pequeño lugar, mejor vamos a la clase de piano. Cuando vengas, Niebla va a estar aquí.Pero… quiero llevarlo a la clase— dice Zaid gimoteando.Él estará bien, no necesitas preocuparte—dice la cuidadora mientras salen de la casa.Zaid, camina con tristeza, mientras piensa en su nuevo mejor amigo. Cuando salen del ascensor, la gente de Curthwulf todavía está buscando la información de Charlotte, por lo que se encuentran en el vestíbulo de este comiendo algo, mientras saben a dónde dirigirse.¿Qué estará pasando? — pregunta la chica que lleva a Zaid.Está lloviendo, a Niebla no le gustan los truenos, ¿Por qué no me quedo en casa a buscarlo? ¿Y si le pasó a
Todo el mundo sabía que Charlotte se estaba condenando, se rumoreaba que el señor Hartmann era muy quisquilloso. Todas las personas debían caminar a un metro de distancia de él. Así que, el ataque de un perro sería catastrófico. Nadie sabía lo que podía suceder, pero sabían que no era algo agradable de ver.Entonces, este feo animal es tu mascota — dice Curthwulf con una sonrisa maliciosa.Señor, soy consciente que debe estar bastante molesto por lo que le ha hecho el pequeño cachorro, pero me gustaría que intentara ser razonable. Él es solo un pequeño perro que no sabe quién es.Esta loca — susurran todos sorprendidos,¿Debo ser razonable? — pregunta Curthwulf sorprendido por su osadía.Es solo un pequeño cachorro no debería ser tan duro con alguien que no entiende lo que ha hecho — dice Charlotte, para después arrepentirse por recordar con quien estaba hablando.La que debería ser razonable eres tú — dice el mánager, golpeando a Charlotte en el brazo, al punto de lanzar al suelo a C
Narra Charlotte Aunque soy consciente que no es muy racional de mi parte irme con una persona que es desconocida para mí, la culpa de que Niebla este herido y no tener dinero para su atención médica, termina convenciéndome de su ayuda desinteresada.Apenas entramos, el desconocido habla con la chica de la recepción y al poco tiempo un hombre de edad avanzada, sale corriendo, saludando a quien hasta ahora sé se llama Retmus.¿Necesita algo, señor?Sí, que se haga a un lado y deje que los profesionales trabajen — responde el hombre tecleando algo en su teléfono.Entiendo, ya oyeron al señor, no estorben. — ordena el señor de avanzada edad ignorando la actitud del tal Retmus.Confundida, me quedo quieta en una de las sillas, mientras acaricio al pequeño cachorro. Es después de media hora que el ruido de un helicóptero y como el aire es excesivo, que el tal Retmus levanta su mirada del teléfono y sale a recibir a una persona tan egocéntrica y seria como el tal Retmus.¿Dónde está el jove
Narrador omnipresenteLa magia que sentía Curthwulf, se sentía con más fuerza. Si hubiese tenido alguna duda de lo anteriormente experimentado en la empresa, ahora comprobaría que no se había equivocado.La atracción magnética era tan fuerte que su esposa fallecida, se hubiese sorprendido y burlado de ello. Después de todo, el lobo que nunca había hecho esa conexión y se burlaba de ella, diciendo que era un mito, estaba conectándose con nada menos que una humana. Y eso, además de ser extraño, lo más sorprendente era que el gran Alpha, le parecía perfecto.Señor Holftmann, ¿Qué quiere decir con esa pregunta? — pregunta Charlotte con nerviosismo.Se ve tan bonita así. Parece un pequeño cachorro buscando ser calentado y protegido. Quiero protegerla — piensa Curthwulf.Solo quiero saber sus gustos. Quiero conversar un poco mientras dependiendo de su amabilidad, calculo la cifra de la indemnización — responde Curthwulf sonriendo y de inmediato, Charlotte se sienta mostrándose amable.No te
Narra CharlotteAlgo me decía que me estaba metiendo en un gran problema, pero, no sabía porqué o cuándo comencé a hacer más grande el problema en el que ya estaba. Pero, lo pero era que no sabía como salir de todo este caos.¿A qué se refieres, señor? ¿Ve que me estoy sentando mal? Mi mamá siempre me decía que debía mejorar mi postura o me vería con jorobas, ¿estoy sentándome mal? — pregunto y el señor Holftmann me observa fijamente.Al poco tiempo, el señor Retmus sale corriendo de la habitación de donde se llevaron a Niebla, con un rostro horrorizado. Angustiada, me levanto y corro hacia él en busca de respuestas.¿Ha pasado algo con Niebla?¿Qué?Niebla, el perro que se llevaron a curar.Ah, así se llama. Él está bien, si quiere, puede entrar a verlo — dice el señor Retmus angustiado para después mirar al señor Holftmann — señor, considere eso. No es buena idea si desea comenzar algo.¿Ustedes se conocen? — pregunto confundida¿Eh? — me mira el señor Retmus confundido.Hablo si se
Narrador Omnipresente El miedo invade a Curthwulf cuando escucha el quejido de Charlotte, su vista viaja directamente a la mordida en la palma de la mano y el miedo lo invade tanto que solo grita Charlotte, antes que ella se desplome en sus brazos. Lowell, al saber el grave error que cometió, da un salto de las manos que pierden fuerza de Charlotte y se transforma en humano, para acercarse a la pareja con angustia, mientras su padre toma a Charlotte en brazos y sale con ella de la veterinaria. ¿Señor, ¿Qué sucede? — pregunta Retmus. Lowell la ha mordido. Atiéndela, Loki — dice Curthwulf asustando a los dos hombres lobos. Aquí no podemos hacerlo. Vayamos a casa. Ordena que el helicóptero este aquí en menos de cinco minutos, si en diez no estoy en la mansión, rodaran cabezas — dice Curthwulf corriendo con Charlotte en brazos hasta su auto, seguido de su hijo y el doctor Loki. No creo que tengamos todo ese tiempo. Además, el antídoto tardaría horas en reaccionar en ella y saber que
Era increíble lo que acababa de su ceder. Una de las tres especies de lobos que se habían prácticamente extinguidos y habían dejado a su paso a los Alphas, Omega y Beta, había reaparecido y eso, si de por si era sorpréndete, lo era más al haber aparecido la esencia en una humana. Loki, tenías razón, era demasiado marcarla, estoy alucinando — dice Curthwulf para después desmayarse. ¡Señor! — grita Loki y de inmediato, tres de los guardaespaldas corren hacia el auto, mientras el helicóptero busca un lugar donde aterrizar. ¡¿Qué pasó?! — pregunta Retmus. Las consecuencias de marcas a una Sigma con doble veneno en el cuerpo. Eso fue lo que sucedió — susurra Loki causando que la mirada angustiada de él se mostrara en Retmus. No puede ser. ¡Rápido, debemos llevarlos a la mansión ahora! — grita Retmus tomando a Curthwulf como lobo sin tanto esfuerzo. Espera que nos acerquemos y que entre varios lo llevemos. Su tamaño no será pasado desapercibido por los humanos si lo sacamos así — dice