Capítulo 4
Pasó un año, Lisa envió de nuevo la solicitud a la universidad y la aceptaron, ese año si partió para otra ciudad a cumplir su sueño de ser una artista, en todo ese tiempo había tenido el apoyo de Matthew por fin estarían juntos; Matt no esperaba la hora en que por fin estaría con Lisa, pues desde aquella vez que se hicieron novios sólo pudieron salir un par de veces ya que, él tuvo que regresar a la universidad a seguir con sus estudios pero ya había planeado todo para cuando aceptaran a Lisa en la universidad, vivirían juntos.
Matthew esperó a Lisal en el aeropuerto, al salir la chica del mismo se encontró con el amor de su vida recostado de un carro, encima del mismo se encontraba un enorme ramo de rosas rojas, la chica a le ver aquella escena se sintió muy feliz, pues por fin la vida le sonreía e iba a estar al lado de la persona que amaba.Matthew volvió su mirada hacia la entrada y pudo observar a Lisa quien venía con una enorme sonrisa, aquella que a élCapítulo 5: Final El embarazo de Lisa transcurría normal, cada mes asistían a los chequeos médicos y el bebé se iba desarrollando bien, Matthew de vez en cuando se tenia que levantar a media noche para prepare algo de comer a Lisa, pues habían ocasiones en que la atacaba el habré y sea la hora que fuera Matt la atendía con mucho amor, al quinto mes del embarazo fue que supieron el sexo. —¡Una niña! —Dice Lisa emocionada— ¡vamos a atener una niña! Matthew era súper atento con Lisa, en todo le ayudaba, no permitía que hiciera trabajos pesados ni que se estresara, al transcurrir los mese Matt decidió que seria bueno volver a su ciudad natal para que a Lisa le ayudara su madre al momento en que se presentara la llegada de la bebé. —Asi que... —dice Elisa, ka hermana de Lisa– si vas a tener este bebé. —Si —responde Lisa con una sonrisa— aunque yo su iba a tener a mi otro bebé, pero no se que fue lo que paso. —Bueno hermanita, me alegro por ti y por Matt —dicho eso se retira. Elisa es
Me llamo Abby, soy una chica mestiza, mi cabello es un poco extraño no es ni liso, ni rizado de color castaño oscuro, ojos color café y mido 1,56cm , soy sencilla, no suelo usar maquillaje y no uso ropa de marcas caras, me gusta ser original y sencilla.Me levanté muy temprano como de costumbre, pues, tenía que ir a trabajar, desde que se volvió muy costoso el estudio en la universidad, con tantos proyectos que realizo en cada semestre decidí que en vacaciones me pondría a trabajar, pues ya era mayor de edad y mis padres me habían ayudado lo suficiente durante toda mi vida y no me parecio justo que al crecer siguieran haciendo lo mismo, ya yo podía buscar un empleo para pagar mis gastos; me dirigí hacia el baño para darme una ducha, salí y me vestí con un pantalon ceñido al cuerpo, una blusa fucsia y unos zapatos converse negros, me tejí una trensa en mi largo cabello, el cual tenia unos reflejos color champán, una vez lista salí hacia la cocina y me preparé un café e hice
A la manana siguiente me desperté en una suave cama, al abrir mis ojos me levanté sobresaltada, pues sabia que no estaba en mi habitación, salí de la cama en un solo salto y escucho ruidos que provenian de la cocina, me fui al baño, me lavé la cara y cepille mis dientes, salí apenada del cuarto y para mi mala suerte la cocina estaba justo bajando las escaleras.—Buenos dias —me dijo Matt con una taza de café en la mano— ¿dormiste bien?—Buenos dias, si gracias —le respondi con mucha vergüenza— ¿en que mometo me quede dormida?—Bueno yo subí a dejar a Luisa en su cuna y cuando regresé ya estabas dormida, no quise despertarte, por eso decidí llevarte hasta la habitación de huespedes para que no tuviras que dormir incómoda en ese sofá.Me ruborice en gran manera que yo creo que tenia las mejillas como un tomate, pues estaba apenada, él me ofreció sentarme para tomar una taza de café y comer un sandwis que ya había preparado, lo comí sin percatarme de que ya era
Llegó el sábado, día del cumpleaños de mi amiga, salí muy temprano a comprarle el regalo, me fui al centro comercial y entré en una tienda donde venden maquillaje y como que se que a Ale le encanta maquillarse le compré una paleta de sombra de todos los colores, una base, una mascarilla para pestañas y un polvo, salí y compré una bolsa de regalo, al llegar la noche me arreglé para irme al club que mi amiga habia alquilado para su fiesta, me puse un vestido azul con unas sandalias no muy altas, me alise el cabello y me maquille solo un poco, me di un ultimo vistazo en el espejo antes de salir, quede satisfecha de como quedé, al salir del edificio, vi a Matt vestido con una camisa blanca maga larga con las mangas enrrolladas hasta los codos y un pantalón negro, tenia a Luisa en brazos vestida con un vestido casualmente el mismo color del mío, me quedé sorprendida al verlo allí parado, el me miró, me sonrió y se acercó hacia mí, me dio un beso en la frente me entregó a la bebé y abrió
Pasaron los días después de la fiesta de mi amiga, íbamos al trabajo y los días eran ajetreados como siempre, >>este restaurante si que es bueno<< —pensé— esos días comencé a notar que mi amiga siempre se sentía mal, se veía enferma, hasta tenía nauseas y se la pasaba en el baño vomitando, un día le dije que tenia que ir al médico, no quería ir, pero por fin me hizo caso y fue, el doctor le mando a hacer varios exámenes para descartar varias enfermedades, y al fin llegó el día en que le dieron el resultado a mi amiga y la verdad es algo que ella no se lo esperaba. Como no había ido a trabajar en esos días porque le habían mandado reposo, el fin de semana decidí ir hasta su casa a visitarla.—Hola amiga —la saludo con un beso y un abarazo— ¿como estas?—Hola Abby, estoy bien físicamente hablando —me dijo Ale algo preocupada— tengo algo que contarte.—¿Si amiga? ¿Que es? Te noto algo preocupada.—Ay amiga —Ale soltó el llanto— estoy embrazada, por eso los sínto
—Hooolaaaa amiga ¿como estas? —Ale me saluda y me da un abrazo— ¿donde estabas? Se me hizo extraño el que no estuvieras en casa.Entramos a mi habitación y nos sentamos en la cama.—Ah... —no sabía si decirle a mi amiga lo que había pasado, ella siempre tiende a armarse películas en su mente— salí con Matt...—¿Es en serio amiga? —me dice Ale muy emocionada— ¿y que hicieron? Cuenta, cuenta...—Bueno, ayer me fue a buscar después del trabajo, yo creí que solo me traería, pero cuando llegamos aquí, se bajó del carro y me dijo que se quedaría un rato, hablamos un largo tiempo, Luisa se quedó dormida y la acosté en mi cama, después vimos películas —se me vino el recuerdo de Mattew cuando me besó y Sonreí, pero no quería decirle nada a mi amiga de eso— y me quede dormida junto a él en el sofá y...—Espera Abby, no me estas contando algo, ¿que es?—No te estoy ocultando nada —me pongo seria para no decirle nada— vimos películas y nos quedamos dormidos, ah es que preparé
Llegó el día, Mattew llego a mi apartamento a las seis en punto —que puntual es— salimos del edificio y subimos un bolso con ropa en la maletera —ya que nos quedaríamos hasta el domingo en la fina— Luisa estaba en la parte de atrás en su asiento para bebés, Alejandra se subió atrás junto con ella mientras yo me subí en el lado de copiloto, salimos de la ciudad, pasamos una hora en carretera hasta que bajamos por una calle la cual llevaba a la finca, como media hora después llegamos, el lugar era muy hermoso, tenía un bello jardín al frente de la casa, habían caballerizas y hasta una piscina, Mattew se estacionó, se bajó y fue a abrirme la puerta, Ale estaba sorprendida, pero no dijo nada, ella tomó a Luisa y bajó, entramos a la gran casa.—Hola sobrino ¿como estas? —se acerco un señor alto algo canoso y saludo a Mattew con una gran sonrisa— tiempo que no te veía, ¿y Luisa?—Allí esta —dice Matt señalando el coche donde estaba luisa.—Pero que grande está —se acercó y la sac
A la mañana siguiente me desperté al escuchar a Luisa, ya se había despertado y estaba acostada entre Ale y yo, me levanto y coloco una almohada para que la bebé no se cayera mientras yo iba al baño, Alejandra y Matt aun estaban dormidos y no los quise despertar, pues esa noche nos habíamos acostado muy tarde. Al salir del baño tomo a Luisa y la cambio, una vez ya lista salgo de la habitación con mucho cuidado para que los chicos no se despierten.Al salir me encuentro en la casa en completo silencio, parecía que todos estaban dormidos, me dirijo a la cocina a preparar el desayuno a Luisa, ya tenia hambre e iba a aprovechar en preparar algo de comer para Mattew, Ale y para mi, pero me detengo en seco al ver que había una señora mayor con una muchacha caminando de aquí para allá preparando comida, cuando me iba a dar vuelta la joven nota mi presencia.—Buenos días señorita —se dirige la muchacha hacia mi— ¿en que la puedo ayudar?—Buenos días —le saludo— ah... Vine a prepara