Matthew Jones.
Mi nana me ve como si tuviera dos cabezas y no la culpo nunca le he presentado a una novia, ella sabe que solo uso a las mujeres para un rato de diversión.
—¿Estas hablado enserio? –Dijo con un rostro de preocupación y su mirada desencajada.
—Claro que si –Lleve una cucharada de comida a la boca, mastique y trague mi bocado para luego hablar –Es la mujer más hermosa que he visto en mi vida, tiene unos ojos que enamoran y un aroma fantástico, pero… —Hice una pausa —Me encargare de que ningún otro hombre mire a mi mujer —Espete serio, de solo imaginar que otros hombres hallan tocado su piel, me dan ganas de matar a alguien, de dañar a esa persona que tocó mi propiedad.
(…)
No pude dormir lo único que pasaba por mi mente era esa larga cabellera negra con esos ojos grises, su imagen me tortura y el querer tenerla a mi lado diciendo que me ama y me necesita con el paso de los minutos se hace más fuerte y más dura mi erección, me masturbo pensando en tenerla en mi cama, brincando sobre mi polla teniendo sus generosos senos rebotando a mi vista, eyaculo imaginando que llene su interior dejando mi descendencia dentro de ella, me limpio y volteo a ver mi reloj de mesa y son las seis de la mañana, ya no aguanto más llamare a Bill para confirmar que tenga mi pedido, tome mi teléfono y le marque, al segundo tono contesto.
—Buenos días señor —Dijo con voz ronca, al aparecer estaba dormido.
—Tienes lo que te pedí ¿Verdad? —Pregunte sin rodeos ni cortesía y no es necesario.
—C-claro mi señor, está todo listo como ordeno —Dijo tartamudo con un notorio nerviosismo.
—Bien, te quiero en hora y media en mi despacho, no llegues tarde por tu bien —No espere a que contestara para colgar, sé que será puntual o ya sabe las consecuencias, y no serán leves está vez.
Fui hasta el baño he hice mis necesidades, me duche, me afeite, me puse unos de mis mejores trajes, uno negro que sé que le gustara a esa mirada gris de esa niña y a su familia, tengo que dar una buna impresión a los padres de mi mujer, esa que será mi mujer, solo mía por el resto de nuestros días.
Ya listo baje a desayunar, mi nana estaba de espalda y la sorprendí por detrás tocando su hombro de forma rápida.
— ¡Por dios Matt no vuelvas a hacer eso! —Se agarra el pecho como si le hubieran dado el susto de su vida, respirando profundo y no puedo evitar decir que me avisa gracia.
Empecé a reír y deposite un beso sonoro en su mejilla de señora de edad.
—¿Por qué tan feliz? —Ella es una de las pocas personas que me han visto reír y sigue conmigo a pesar de todo.
—Ya verás más tarde nana —Le sonreí de forma genuina —Hoy es el día.
Me miró con una mirada interrogante pero no le dije nada y es mejor así o conseguirá muchos pero.
Después de desayunar fui hasta mi despacho, me senté en mi imponente silla tras el escritorio, empecé a arreglar unas cuantas cosas pendientes y minutos más tarde toca mi puerta Bill, al darle entrada, este pasa mientras observo mi reloj viendo en la hora que llego puntual.
-Señor, aquí está todo lo requerido –Me entrego el portafolios con la información, colocándolo sobre mi escritorio con cuidado.
-Bien, espero que hayas hecho un excelente trabajo Bill o sabes la consecuencias —Observo el lugar donde debería ir un dedo meñique que por castigo, hoy está ausente, mire el portafolio que es un poco pesado mientras sonrió de una forma maliciosa.
—N-no le he fallado, mi s-señor —Asintió.
—Eso espero —Saque la otra mitad de su dinero de un cajón de mi escritorio y se lo di —Cierra bien la puerta cuando salgas —Y con esas palabras se marchó sin antes dar una pequeña reverencia, abrí el porfolio y lo primero que vi fue al padre de mi mujer, su progenitor, mi suegro.
Luis Mark de cuarenta y ocho años, trabaja como electricista en la empresa Jones Spart Hotel, tiene tres hijos y está casado con Lucero Turín –Trabaja en una de mis empresas, que pequeño es el mundo, pienso.
Lucero Turín de Mark de treinta nueve años, obtuvo recientemente un trabajo como secretaria, tiene tres hijos, esposa de Luis Mark.
Hija mayor: Emma Mark de diecisiete años, adolescente que estudia en School Morris, mejor alumna del salón, hija primera y legitima del matrimonio Mark-Turín.
Segundo hijo: Luis Miguel de cinco años, infante varón.
Hija menor: Laura de ochos meses de nacida, una bebe.
Me quedo una hora viendo el resto de papeles que son finanzas de la familia, sus amigos historiales médicos etc... Pero de Emma esta todo, sus gustos, sus redes sociales, fotos de ella desde nacida hasta la época actual, sus parejas que por suerte dice “ninguna pareja”, sus amigos y hasta su historial de llamadas y mensajes en el último mes, sonrió satisfecho por el trabajo de Bill.
Es el momento perfecto, iré a darles una visita a mi pequeña Emma y a mis futuros suegros.
Con toda está información es más que suficiente para conquistar a mi pequeño ángel.
En el portafolio está otro sobre que dice en letras negras y grandes "Lo puede usar a su favor", saco el sobre y veo cierta información que me hace reír y con esto conseguiré mi objetivo.
Que ganas de tenerla aquí, que feliz será a mi lado esa pequeña, aunque no tardare en llenarla de mis hijos, la necesito, necesito su aroma, su feminidad.
Llamo a mi personal que usaré para está misión, la más importante que harán en su vida, si fallan el costo será su vida, se me van las horas mientras planificamos con mi personal y equipo de seguridad todas las medidas de seguridad necesarias para mantener a mi pequeño angel a mi lado hasta que acepte su destino a mi lado.
Emma Mark. Hoy amanecí con el pie izquierdo, todo me ha salido mal: la alarma no sonó por lo cual me desperté tarde y ni tiempo de desayunar tengo, no encontraba mi uniforme en mi armario donde se supone debe de estar, llegue tarde a la parada del bus escolar por lo que tuve que esperar uno público, llegue treinta minutos tarde y para el colmo, el profesor me mando a la dirección por obviamente llegar sumamente tarde por lo cual, recibí una reprimenda del director. Después de mi castigo que fue pasar un maravilloso día (nótese el sarcasmo) en la oficina del director, por fin estaba llegando a casa y como mi padre entro a trabajar, los niños los cuida la señora Cuper que es una vecina de mi comunidad que vive unas cuadras más debajo de mi casa, así que tengo que pasar por ellos más tarde, pero antes me dispuse a hacer la limpieza de la casa y ducharme relajada. No sé porque siento una extraña sensación extraña pero si sé, que no me gusta para nada este sentimiento. (…) Toco la pue
Emma Mark.—Solo fue un accidente, solo por eso no tienes que hacerme esto –Sigo con mi mirada baja sintiéndome derrotada, sintiéndome como si mi corazón late pero sin sangre, nada, simplemente un vacío horrible.—No solo es eso, Desde que te vi me hiciste un hechizo, no sé si son tus ojos, tu boca, tu piel o todo de ti, pero me gusto absolutamente todo de ti al instante –Intento colocar una mano en mi muslo y cuando aparte mi pierna de su tacto este me miro con ¿Ternura? Le hizo una seña a unos de los guardianes y este le entrego un trapo, con una mano me acerco a él y me puso el trapo en la boca y nariz, trate de luchar pero fue imposible él es mucho más alto y fuerte que él, trate de no olerlo pero poco a poco empecé a sentirme débil hasta que perdí el conocimiento.(…)Lo que creo que es tiempo después desperté desorientada (No es una pesadilla) pensé… me encuentro en una habitación espaciosa y lujosa, no distingo si es de noche o ya es de día, lagrimas amenazan con salir y aún s
Emma Mark. —Está bien –Asentí triste mientras ella me ayudaba a cambiarme, quitando mi ropa como una madre a una niña de 3 años. (...) Pase el día con ella y bajamos hacia los salones a pasear, comimos juntas y ella me leía historias viejas de libros de fantasía para distraerme lo cual hacia que pareciera que era una nana cuidándome y para nada que estaba secuestrada, ni por poco parecía eso. En breves momentos llegó a distraerme de su voz y pienso. No debí ir al local con Eva esa tarde, nada esto estaría pasando, no estaría con en las garras de este hombre y seguiría con mi vida normal, si mi vida seguiría normal mi mayor preocupación serían los exámenes y no si un loco me matara al final del día. —¡Ya llegue! –Mi alma salió de mi cuerpo al escuchar esa voz, nana se dio cuenta y agarro mi mano dándole un pequeño apretón como queriendo decir se fuerte. —Aquí estamos hijo –Le dijo para informarle nuestra ubicación, soltamos un suspiro y segundos después apareció él, miro a nan
Emma Mark.Me dejo sola al fin...Su ausencia en la habitación se siente como ligera como si el alma me volviera al cuerpo, en efecto mi alma volvió a mi cuerpo pero echa pedazos, me siento sucia y adolorida.Salgo de la ducha donde me dejó y cierro la puerta con seguro, no quiero ver la cara de nana que de seguro me va a ver con cara lastima y tristeza, no quiero escuchar sus "niña por dios ¿Estás bien?" ¿Cómo cree que voy a estar después de lo ese bastardo me hizo? Dios ¿Dónde estás? No te pido la salvación eterna, no te pido riquezas y poder, solo te pido volver a mi vida anterior donde era feliz ¿Que mal hice para que me ocurra esto? ¿Cuál fue el motivo para que me hayas cruzado en el camino de esa bestia?¿Que me ha hecho este hombre? Me duele mucho mi zona baja y vientre, odio el dolor y este es el más fuerte que he sentido en mi vida, mis piernas flaquean y mi vista se nubla por las lágrimas.Me devuelvo a la ducha caminando torpemente, la sangre sigue brotando de mi interior
Emma Mark.No sé cuanto tiempo soporte esto, apenas tengo 2 días en esta casa y han sido un infierno para mi. Volvió a violarme sin compasión alguna, no le importa hacerme daño, no escucha mis súplicas para que me suelte. Estoy en la cama sin moverme y él está a mi lado, estoy debajo de un charco de sangre con un dolor profundo en mi vientre otra vez, menos doloroso que la primera vez, Intenté pararme y sentí bastante dolor, quiero ducharme y quitar su olor de mi cuerpo, quisiera arrancarme la piel para borrar su tacto de mi, quisiera quitar mi interior si pudiera para no tener el recuerdo de que estuvo dentro de mi, vuelvo a intentar pararme y no puedo evitar un quejido que salió de mi boca.—Ven, yo te ayudo -Tocó mi brazo, mi piel se erizo de asco y aleje su tacto de mi.—No me toques, me das asco -Dije comenzando a llorar, no me dijo nada y me limité a seguir intentando levantarme, cuando logré sentarme en la cama me puse de pie y caí al suelo, varios sollozos salieron de mis lab
Emma MarkMe despierto, sigo aquí, otra vez en la terrible pesadilla, dentro de unas sábanas calientes, sobre una cama más que suave y cómoda, estoy encerrada en una jaula de oro.No, no la puedo llamar así si no tengo ni la más mínima libertad para disfrutar de los lujos que según el me ofrece.¡Dios! como quisiera dormir y jamás despertar, ahogarme mientras duermo y quedarme en esos sueños donde soy feliz y libre, miro a mi lado y afortunadamente él no está aquí, gracias a Dios pensé, me levanto y camino hasta el baño a ducharme, de camino paso ojeo por la ventana y veo los pájaros habiendo nidos, sonrió y sigo mi camino.Entro en el baño y me doy una ducha con agua fría para despertarme, ojalá pudiera dormir todo el día pero lo tengo prohibido, ridículamente prohibido, ya lista salgo y lo que veo me deja helada.Salgo con una toalla cubriendo mi cuerpo mojado y otra en mis manos mientras seco mi cabello, al verlo mi paso queda detenido bruscamente y puedo escuchar los latidos de m
Emma Mark.Matthew sigue apretando el volante, en el cuerpo del volante se ve la presión que le aplica, acelera y puedo notar su enojo como venas sobresaliendo de su frente, sus hombres en las motos detrás de nosotros comienzan a acelerar al ver su cambio de velocidad, fue una mala idea preguntar, una jodida mala idea.—Escúchame muy bien Emma, tendrás que acostarte conmigo por placer y es como, cuando y donde yo quiera, harás cada cosa que se te pida sin dar problemas, te tendré vigilada las 24 horas del día y si haces o dices algo de lo que pasa en la casa, te olvidas de la escuela y de tus padres, no hablarás con ningunos de tus amigos, si me informan que estuviste con un chico tendrás problemas y nada de salir a "estudiar" con tus amigos, Dios te salve de que me enteré de un chico porque lo mato en tu cara y no querrás tener eso en tu memoria -Dijo rápidamente todo esto apretando la mandíbula y con sumo trabajo.—Y-yo eemmh.. —Estaba asustada, mi pecho subía de arriba a abajo por
Emma Mark.Seguíamos en camino, me quedé dormida un rato y soñé con la señora que nos atendió en la tienda de zapatos y lo que me dijo.«-Por lo que veo la vida marital a sido amarga -Me dijo mientras veía a Matthew sentado al otro lado de la tienda -Ven, toma esconde está pastilla y tómala antes de salir en público, te mantendra feliz unos momentos.»Me desperté sintiendo un toqueteo en mis muslos, me di cuenta que Matthew me trataba de despertar, me incorpore sin decir nada y él tampoco hablo, por suerte.Habíamos llegado, paramos en un restaurante, el chófer abrió la puerta y Matthew bajo primero, como siempre agarró mi mano para aparentar que somos una "pareja", todos nos miran de arriba hasta abajo y viceversa, algunos solo observan y otros murmuran.Todos aquí están vestidos elegantemente, parecen estar en su elemento y totalmente cómodos, yo... Pues yo estoy vestida normal creo, no me ven como si fuera fascinante más bien me ven extrañados.Matthew pidió una mesa, nos sentamos