Adrien se relamió los labios con rabia, se apretó las manos y respiró profundamente, no le cabía en la cabeza en qué momento había metido a semejante arpía en sus planes, las cosas se habían puesto más complicadas de lo que imaginaba, ahora tenía demasiados problemas, y lo peor era la actitud de su madre ante su relación forzada con Valeria. Pero esta vez lo mejor era callar, y dejar que todo cayera por su propio peso, lo importante era que ya estaba prevenido.Regresó a su recámara, se recostó y abrazó a la almohada pensando en Emely, y su terrible destino, que añoraba tanto cambiar. Ahora había comprendido que la herencia se trataba de propiedades y de mucho dinero, una pista más para llevar a cabo su investigación.Mientras tanto, Emely yacía en la cama de un hospital, siendo observada y cuidada por las lágrimas de Renata, que tras que se durmiera, no pudo evitar llorar recordando su error, y pensando en cuánto daño le había provocado a su hija.Cuando amaneció, Estéfano y Ágata se
Lucrecia dijo esas palabras, y a lo inmediato salió de la oficina, Adrien apenas pudo pronunciar un: — Madre — en tono ahogado de cóleraEso le bastó para saber que ahora más que nunca debía darle prioridad a las cosas, y no estaba dispuesto a que su madre siguiera interviniendo en su camino.— El show no va a realizarse — dijo de golpe tras abrir la puerta donde estaban las modelos con Valeria. Ella lo miró fingiendo normalidad— Cariño, ocurre algo — preguntó con voz dulce— Ocurre que yo no he orientado esto, por lo cual, modelos, les pido que se incorporen a sus oficios diarios en la empresa, y yo les llamaré en cuanto esté todo organizado el evento, para que Emely sea quien las dirija, ella por ahora no se encuentra y no vendrá hasta nuevo aviso — Ordenó dirigiéndose a ellas e ignorando a ValeriaLas modelos, atendiendo las orientaciones de su jefe, también la ignoraron y salieron del lugar. Valeria corrió tras los pasos de Adrien que no se detuvo hasta entrar a la oficina— Qué
Adrien terminó de organizar unos pendientes en la oficina, y salió de prisa hacia el hospital. La angustia lo estaba lastimando, pero eso era lo único que lo mantenía en pie, bajo la certeza de que amaba a Emely, que ella se había convertido en su luz, en su único camino, en la verdadera razón para continuar viviendo. — Adrien — dijo a media voz la triste mujer que cargaba unas ojeras terribles, por las noches de desvelo — Renata, te ves demasiado cansada, lo mejor será que hoy descanses, me quedaré con Emely — advirtió Adrien tras el abrazo — No quisiera, solo deseo estar cerca de ella, no separarme de su lado nunca, pero me siento demasiado agotada, iré al apartamento ahora, dormiré unas horas y regreso — contestó con tristeza — Como lo creas conveniente, aquí te espero — repuso él comprensivo, mientras miraba la puerta del cuarto donde se encontraba Emely — Es lo mejor para ambos, Adrien. Si te quedas aquí tu madre va a preocuparse, luego empezará a buscarte, y no quiero que se
— Aquí estoy — dijo Adrien tras el llamado del médico que buscaba un familiar en medio de la sala— Qué es usted de la paciente Emely Durand — Preguntó el doctor tras reconocerlo— Soy su pareja — afirmó Adrien sin temor— Señor Leroy, disculpe, pero tengo entendido, según la fama que lo rodea, que usted recientemente se casó con la modelo Valeria — dijo indiscretamente el doctor que no pudo evitar reprochárselo, pues necesitaba informar algo muy delicado— Disculpe, doctor, pero creo que no es momento para aclarar eso — repuso él con vergüenza— Disculpe mi indiscreción, Señor, pero necesito a un familiar, pues lo que debo decir es muy grave, por eso le solicito, me hable con la verdad, y me asegure su vínculo con mi paciente — explicó el médico— Le estoy diciendo la verdad, amo a esa mujer con mi vida, sí recientemente me casé con la modelo, pero mi corazón es de Emely, lo que tenga que decir puede hacerlo, créame, no hay nadie más de confianza que yo en su vida— bien, y su madre?
Renata apareció al cabo de un rato, con el mismo cansancio, pero no le importaba, su amor de madre guardado por tantos años, la obligaba a quedarse ahí.— En verdad piensas quedarte? — preguntó Adrien al verla en tan mal estado— No me importa nada, solo quiero estar con ella, y tú mejor ve a casa, que nada bueno te espera— No, no quiero enfrentarme a mi madre, y lo más seguro es que esa mujer aún sigue en mi casa junto con Silvia, en verdad, no quiero ni imaginar lo que dirán, también me quedaré. Las noticias son peores, la trasladaron al Cuidados Intensivos, si no mejora en los próximos días habrá que hacer un trasplante de pulmón — contó Adrien después de un suspiro, Renata solo pudo llevar sus manos a la boca y dejar que las lágrimas salieran— Te das cuenta, por qué debo quedarme. Es triste saber que encontré a mi hija y que quizá pueda perderla — Dijo a media voz, Adrien se acercó a ella para abrazarla y consolarla— Sí, Renata, y para terminar de arruinarme la vida, mi madre y
Adrien sonrió satisfecho, porque solo necesitaba que su madre finalmente creyera en él, y dejara de relacionarse con esas arpías, para poder tener paz nuevamente.— Entonces si es así, demuéstramelo, necesito que se larguen de mi empresa y de nuestra casa, de lo contrario no pretendas que te diga la verdad, y en cuanto a Emely, si le pasa algo en el hospital, será tu culpa por decirle a esas dos, pues sé que son capaz de mandar a hacerle cualquier daño— Basta, Adrien, no quieras culpar a todo el mundo de lo que le pasa a esa mujer — dijo ella molesta— Cuando escuches y creas lo que te diré, lo entenderás, por ahora no tengo más que decir, ah, y en cuanto a lo que pretende mi tío, ve diciéndole que se baje de esa nube, porque no lo tendrá, la empresa es lo único que me queda de mi padre, y por culpa de tus alucinaciones y la avaricia de Valeria, no la voy a perder, si estoy ayudando a Emely es porque la amo, le pese a quien le pese, y si tengo que gastarme toda una fortuna para que s
— Adrien, estoy afuera del hospital, he salido a tomar un poco de aire, y justamente acabo de ver a Valeria junto a Silvia bajarse de un auto de lujo, me he escondido en el baño que está cerca de aquí, pero temo que pidan información sobre el estado de salud de Emely — dijo de golpe Renata con un nudo en la garganta muy notorio— Maldición, sabía que eso iba a pasar, quédate ahí, no permitas que te vean — suplicó Adrien apretándose el puño de la mano izquierda— Adrien, quizá lo mejor sea que enfrentemos esto de una vez por todas — sugirió Renata con tono serio mientras Valeria y Silvia ya entraban al hospital con la única intención de saber si Emely podría morir, era lo único que les interesaba, pues eso les daría tranquilidad en cuanto a la protección de sus bienes mal habidos— No, no, no podemos exponernos ni alertarlas en este momento, es demasiado pronto, ya Estéfano y Ágata se están encargando de los asuntos legales sobre el testamento, en cuanto tengamos eso que posiblemente s
Silvia estaba de espalda, con el cuerpo doblado y su mano directa en el enchufe donde estaba conectado el respirador. Adrien se abalanzó encima de ella y la tiró al piso con rabia, para evitar que quitara el cable.Silvia se quedó en total estado de shock, sin saber qué hacer, solo demostrando que estaba asustada. Cuando el doctor entró a la sala junto a los otros enfermeros, presenciaron el espectáculo— Qué ocurre aquí — gritó— Que esta mujer quería quitar el cable — gritó Adrien— Como es posible eso si es su madre — dudó el médico y Adrien resopló de rabia viendo el cuerpo de Emely inmóvil, sentía tanto dolor por ella— Pues no lo es, debe sacarla inmediatamente de aquí, llévesela — gritó Adrien nuevamente sin poder evitar llorar ante el rostro de Emely, la abrazó con fuerza, pero los enfermeros lo apartaron rápidamente, y a Silvia la recogió el doctor y se la llevó hasta el pasillo.Valeria apareció al mismo tiempo, demostrando asombro — Mi amor, qué sucede — dijo fingiendo al v