Capítulo 23MarinaEl día de hoy habíamos tenido más clientes que nunca y todos los suministros que tenía para hacer dulces se me había acabado, por eso había mandado a mi madre al supermercado por más. Sin embargo; sabía que ella tardaría bastante debido a que siempre se ponía a observar su antigua casa, esa casa donde fuimos felices por muchos años. Los minutos iban pasando y cuando la vi entrando por la puerta con Diego, no pude evitar sorprenderme; puesto que no estaba Davina y se suponía que estos estaban en la escuela. No tarde ni medio segundo en acercarme a ellos y cuando lo hice, mi corazón salto de inmediato. Ya que frente a mí si tenía a mi hijo, pero este era aquel pequeño que yo tuve que entregar hace tantos años ¿Qué por qué lo sé? ¡Fasil! Una madre siempre conoce a sus hijos sean como sean y mi corazón de madre gritaba como loco diciéndome que yo tenía razón en lo que sentía. Siento que mi madre me habla justo a mi lado y lo único que atino a escuchar es que ella cree
Capítulo 24AlejandroNo hubiese querido que las cosas se dieran de este modo, me hubiese gustado que Marina se enterara de la verdad de mi propia boca; no que al escuchar lo que dijo nuestro hijo esta saco sus propias conclusiones y en su mirada vi un odio profundo. Un odio que no sé si en algún momento podre vencer, pero sé que no me daré por vencido.Cuando Marina se desmayó en mis brazos no pude evitar asustarme, afortunadamente la sostuve antes de que su cuerpo llegara al piso y pudiera hacerse daño. Su madre obviamente al ver la situación se sobresaltó sin entender que demonios estaba pasando y las personas a nuestro alrededor estaban pendientes a lo ocurrido. Sin pensarlo dos veces la tomo en mis brazos y camino con ella hacia donde me indica una chica rubia, la cual entra en una pequeña oficina.Rápidamente dejo a Marina sobre un sofá y nuestro hijo se acerca muy asustado al no entender que le paso a su madre. Veo como Dorian trata de calmarlo diciéndole que todo estaba bien y
Capítulo 25Marina Sentía una opresión en el pecho al saber que por más que quisiera no iba a poder estar con mi pequeño Dilan, puesto que hacer eso seria dejar a sus hermanos y lo que es peor, los expondría. Haciendo que este hombre que destruyó mi vida se entere de su existencia, algo que gracias a Dios él desconoce y es que hubo un momento en el que me quede perdida en mis pensamientos buscando descubrir si él sabía o no. Cuando dije aquellas palabras supuse que él se quedaría desconcertado, no obstante; no tenía más opciones y debía mantenerme firme en mi decisión. Era lo mejor para todos, aunque eso volviera a dejarme sin una parte de mi vida ahora que está completa.– Dime que lo que acabo de escuchar es un error – me pido el tal Alejandro mirándome fijamente. – No has escuchado nada que sea incorrecto. Te he pedido que te marches y que te lleves al niño contigo, no pienso irme de aquí y mucho menos a un lugar en donde tenga que verte días y noche. Si tan arrepentido estas po
Capítulo 26AlejandroLuego de haber salido de aquel café, hubo algo que no me dejó tranquilo para nada y como método de seguridad decidí enviar a uno de mis hombres a vigilar a Marina. Sobre todo lo hacía por si ella decidía volver a escapar, no quería que pasaran otros siete años para encontrarla. Ahora volviendo al tema que me preocupaba y me parecía extraño, era el hecho de que Marina haya rechazado el estar con su propio hijo. Tal vez como yo le había preguntado, ella ya tenía otra familia y a un hombre a su lado; uno que no la ha lastimado como lo hice yo. Sin embargo, estaba también el hecho de que la madre de Marina no dejaba de reclamar porque yo me llevaba a su nieto, cosa que no entiendo bien debido a que era la primera vez que veía a Dilan. Comiéndome la cabeza con un millón de preguntas y suposiciones respecto a lo que estaba pasando, subo las escaleras que llevan a la habitación de mi hijo. El cual no ha querido comer nada desde que llegamos y eso me preocupa. – Hola,
Capítulo 27Marina¿Por qué? ¿Por qué me pasa esto a mí? ¿Por qué la vida se empeña en querer poner mi mundo de cabeza? ¿Es que acaso nunca estaré tranquila ni un solo momento? ¿Siempre tendré que vivir en sobresaltos y angustia? Si la vida supiera como me estoy sintiendo en este preciso momento tal vez no me hiciera esto. De qué me sirvió ocultar a mis otros dos hijos por tanto tiempo, si al final; de una manera u otra él se iba a enterar. Cuando mi hijo se lanzó a mis brazos al yo abrir la puerta, mi corazón de madre no pudo rechazar su cariño y de inmediato lo cargué en mis brazos. No obstante; no pude evitar preguntaré a Alejandro el porqué me hacía esto y sabía que en cualquier segundo todo se iba a volver un caos.Cuando sentí la voz de Diego y vi la expresión en el rostro del hombre frente a mí supe que estaba todo perdido, que ahora si mi mundo se volvería uno de completa oscuridad. – ¿Mamá por qué ese niño es igual a mí? – preguntaron mis dos príncipes a la vez y mi corazón
Capítulo 28AlejandroSalí de casa de Marina hecho una completa fiera debido a todos los sentimientos encontrados que tenía ¿Cómo era posible que además de Dilan tuviera dos hijos más y no me lo hayan dicho? ¿Seria esto a lo que se refería Dorian cuando me decía que no debía dejar de buscarla? Pero por supuesto, él sabía de la existencia de mis otros dos hijos y nunca me lo dijo.No puedo creer que la vida me haya dado este regalo tan grande; aunque sé que tal vez no me lo merezca. Sin embargo; cuando vi sus ojos iguales a los míos y en el momento en que ellos me dieron ese abrazo tan cálido, mi corazón se llenó de gozo. Sobre todo al ver a mi princesa, la cual se diferencia de sus hermanos al ser más parecida a su madre, pero igual es hermosa.Llego a la casa en la que me estoy quedando y lo primero que veo al entrar es a Dorian hablando por teléfono y una vez este termina. Se queda mirándome y estoy seguro de que por la expresión de mi rostro, este sabe perfectamente que acabo de de
Capítulo 29MarinaDespués de que Alejandro se fuera de mi casa, me quede totalmente devastada por no saber de qué manera reaccionar ante esta situación y si no llega a ser por mi madre. No sé que hubiera sido de mí.Luego de calmarme lo bastante como para ver a mis hijos jugar, no podía creer como después de tanto tiempo los tenía a los tres bajo el mismo techo. Puesto que si vamos a ver, la última vez que los tuve así fue en mi vientre.No dire que no estaba más que feliz, tanto que me pase todo el tiempo posible cerca de mis hijos hasta que mi prima llego acomoda de mi madre. La verdad me sorprendió bastante el tenerlas en casa tan temprano; sin embargo, mi prima venía según ella dispuesta a ayudarme a escapar con mis hijos y aunque en un principio le dije que no podía hacer eso por lo que había dicho Alejandro. A ella se le ocurrió la brillante idea de que escapara al anochecer por la ventana del baño, mientras le decíamos a los niños que todo era un juego; lástima que ninguna con
Capítulo 30AlejandroNi siquiera la copa de whisky más fuerte puede pasar el mal sabor de las palabras de Marina. Eran como una herida abierta a la que le echaban limón a cada segundo. Después de que se diera aquella discusión entre nosotros en medio de la carretera, Marina vino conmigo directamente hasta la propiedad la que me estoy quedando, cosa que obviamente no le vino para nada en gracia. Ella solo se dedicó a buscar a los niños y cuando la empleada de servicio la llevo con ellos, se encerró en la habitación sin alguna intención de salir por el momento.– Ahogar las penas con el alcohol no borrará el concepto miserable que tiene ella de ustedes – dijo Dorian y por el tono de su voz presiento una pelea – En ocasiones me he preguntado por qué precisamente escogió a esa chica ¿Por qué no a otra? Una a la que exclusivamente le importara el dinero y nos hubiésemos ahorrado todo esto; así usted hubiese cobrado su herencia sin ningún problema. – No pienso discutir contigo mis decisi