Con la llegada de Luciano a la sala de juntas, la incomodidad se apodera de Mateo. Y su incomodidad hace que no termine de revelarme el nombre del accionista, tampoco le termina de contestar a Luciano. En un respiro, Ernesto está de regreso con nosotros argumentando que ya tienen que irse. Con ello
—Noooo. Me refiero a sí… — ahora me susurra como si tuviésemos compañía — ¿ya tuviste sexo en ella con tu esposo? —No Giana. No he tenido sexo en ella con Luciano — exclamo ofendida… y excitada por la idea. —¿Me la prestas a mí para hacerlo con Derek? — pregunta como si nada. —¡No! — alzo mi voz,
6 meses después El sonar de la alarma de mi celular me hace despertar de mi plácido sueño. Extiendo mi mano para detener el sonido y estiro todo mi cuerpo en esta cama gigante en la que estoy sola. El aroma a café recién hecho me llega desde aquí y me tienta a salir de esta con rapidez. Tomo mi bat
—He estado ocupada con trabajo. La expansión de la empresa nos ha mantenido a todos colapsados — me excuso — Incluyendo a Andrew ¿no es así? Debe estar trabajando sin descanso. Amanda hace un gesto de que la agredí con ese comentario. Obviamente le picaba que le hablase de Andrew, no he escuchado b
Narrado por Luciano Brown La rutina me aburre, estar en el mismo sitio me aburre y estar con la misma mujer por más de un mes, es una sentencia de muerte por aburrimiento. Entonces, ¿por qué estoy ansioso de llegar a mi departamento a ver a Marianne? Ni yo mismo me explico lo que ha pasado estos s
Me estiro para tomar con suavidad el celular de Marianne. Ese que está a su lado. Lo tomo e ingreso la clave que ella me dio. Puede que Marianne esté siendo tentada de estar con otro hombre, por eso me está tratando así de bien. Era lo que yo solía hacer, en lo que andaba jugando con más de una muj
Narrado por Luciano Brown Tomo aire con profundidad, concentro mi atención en el rostro de Julia en lugar de sus piernas abiertas y me siento en el sillón frente a esta. Ella no me quita los ojos de encima, su boca muestra una leve sonrisa sensual. —¿Unirme a qué? ¿A otra de tus provocaciones como
—Que te torturarán por una m*****a semana. ¿O es que las palizas y las descargas eléctricas no fueron suficiente? Tuviste suerte de que te encontrásemos en una redada, una hora más y te hubieses quedado sin dedos en la mano izquierda, imbécil. —Qué exageración Julia por Dios. Sólo llegaron a cortar