Él podía esperar, el momento llegaría, es más ir con ella al altar primero, y tener una luna de miel le arrancaba suspiros.Juan Carlos se detuvo para cubrirle con las sábanas, respiraba tranquilo.-Yo puedo esperar Ani, quiero que sea especial para los dos, no hay prisa-.Ella se sonrojaba, sentía vergüenza de su propio impulso.-No… por favor no tienes que sentir vergüenza conmigo, solo que te amo y quiero que te sientas segura, sin dar después lugar a dudas, yo te amo Ani, yo quiero una vida contigo-.-Es lindo escucharlo de ti-.-Bien, me vestiré, para llevarte, así me quedo más tranquilo que entras segura a tu casa-.-Sí, es hora de marcharme, no quiero que se den cuenta, y no es por la abuela-. Ani se colocaba una toalla, y entrando en la sala de baño, sacaba de su bolso su peine, se lo paso rápidamente, se colocó brillo en los labios, colocándose el vestido se miró al espejo, todo en orden…Estaba lista para regresar a la realidad.Una vez que bajaron al garaje Teo ladraba dando
La abuela comprendió el gesto de Naomi.-Bueno creo que la niñera puede también darte una mano, Ani estará muy ocupada estos días, le he pedido que me haga unas compras en Barcelona, además mi amiga Berta me ha extendido una invitación a su casa de veraneo, la verdad es que iremos con Yamila, tu suegra junto a la niñera estará perfectamente bien cariño-.-Abuela, yo solo te advierto que deberías cuidarte, además ¿De dónde piensa sacar dinero Ani? -.-Tiene sus ahorros, es una chica independiente, igual que tú, así que no se diga más, no hagas tantos berrinches Naomi, ella es adulta puede hacer lo que quiera, y tu aprovecha tu viaje-.-Estaremos unos días ocupados, Frank una vez que termine todo, nos tomaremos unos días, quizás nos escapemos a Venecia, está muy optimista con el cierre de este negocio-.-Qué bien, así te tomarás un buen par de vinos con tu marido, además veo que te sobran personas para cuidar de tu hijo, tu suegra es una bella persona, quien mejor que la madre de Frank,
La mañana llegaba con sol y buena ráfaga de brisa, la abuela y Yamila colocaban en el automóvil todo su equipaje más algunas cestas con sus galletas, panecillos, mermeladas, frutas, agua, jugos, en fin, toda una bodega.La caja de pinturas, pinceles y demás utensilios estaban igualmente en orden, se tomaría sus días para recrear un buen cuadro, era una dama apasionada por el arte.-Bien Ani, tómate tus dos semanas, y si por las dudas quieres quedarte un tiempo más, puedes hacerlo-.-Abuela tendré entonces que avisarle a la enfermera que vendría a cuidarte-.-Sencillo querida una llamada y todo estará en orden, encontrará otra enferma, pálida y decrépita abuela que cuidar-.-No eres tan anciana, mucho menos te veo pálida y decrépita, diría que estas sumamente vital este día, creo que salir de casa siempre te viene bien-.-Es admirable como puede cambiar tu semblante, es lo mismo que está sucediendo contigo, salir de casa será renovador, quizá encuentres todo en el camino, todo lo que s
Ani abría la puerta de casa, Juan Carlos se despedía, pasaría por ella a la hora acordada. Se lanzó a su amplia cama cerrando sus ojos se quedó una hora casi durmiendo plácidamente, despertó mirando la pulsera reloj, las cuatro y media, se irguió de un salto, abriendo su closet escogió un pantalón a media pierna azul oscuro, con una blusa a cuadros en tonos naranjas suaves con blanco pastel, una estola naranja hizo el acabado perfecto. Se dio una ducha fresca, quiso lavar su cabello, aunque desistió, se relajó totalmente, cerrando los grifos salió al tocador, mirándose se dio algunos toques suaves de rubor, brillo, cejas, quedó satisfecha, se vistió rápidamente, tenía que dejar todo listo, el tiempo pasaría volando. Juan Carlos entraba en casa, había pasado por la tienda de unos amigos, luego fue al café de la esquina de casa, compró algunas cosas para el camino. Llegando a casa, se fue directo a la ducha, se hundió en la amplia bañera, se sentía libre como si flotara, recordó que
La abuela tomaba la humeante taza de café en el amplio jardincito con Yamila y su amiga Berta, quien ese día había horneado un exquisito pastel de vainilla.-Candelaria, me parece emocionante que Ani tomara la decisión de aceptar ese viaje, es una maravillosa oportunidad, espero que nos llegue con una grata sorpresa-.-Espero lo mismo, la verdad es que Juan Carlos es un chico que apruebo para ella, espero que tome la mejor decisión, no quiero que sienta que debe seguir atada a mí, no es justo-.-Oh querida...-.-Yo estoy perfectamente bien, los achaques de la edad que vienen y van, pero nada más, uno muere el día que ya este asignado, no el día que uno quiere-.-Es cierto mi amiga-.Yamila en ese instante retiraba la bandeja con las tazas dando las buenas noches, ellas se quedarían unos minutos más en el jardín, la noche era grata, Candelaria se cubría con un gran chal al igual que Berta.-Creo que le pedirá matrimonio y sería una verdadera tonta si no lo acepta-.-Estoy contigo Cande
Tosió un poco, sintiéndose algo agotada nada preocupante, nada que alarmara a Yamila o Berta, eran exageradas ante cualquier novedad de su salud, y no quería echar a perder sus vacaciones.Esos días había estado algo débil, pero no quería decirlo, se tomarían tan a pecho todo, que la pobre Ani, jamás hubiese salido de la cocina, cuidar sobrinos, y de paso una anciana. Ani jamás le había hecho sentir como anciana enferma, por el contrario, siempre le había hecho sentir de mil maravillas, le había criado, y la sentía como una hija, no es que la amara más que a sus otros dos nietos, pero Ani era un alma pura, un alma tan transparente, una dulce chica que merecía ser feliz, eso lo tenía claro.La puerta se abría ante los toques suaves de Yamila, al cual solo acertaba decir -Pasa querida mía- el café, la bandeja con sus medicamentos, y el desayuno, su habitación tenía un hermoso balcón donde tomaba el desayuno, mirando el sol brillante, mirando la mañana, escuchando su música favorita.Yam
Juan Carlos le esperaba, no había nadie en la estancia, le besó con cariño, para indicarle que se veía hermosa.-Es un jean bastante desgastado la verdad, con una blusa sencilla a rayas, creo que el sombrero es hermoso-.-Entre más desgastado el jean mucho mejor-.-Tu estas hecho todo un modelo-.-Y… ¿Crees que sea parecido a los de las grandes pasarelas de moda?-Si, afirmativamente-.En ese instante que tomaba las llaves del auto, Bella llegaba para pedirle que le acercara al hotel.-Claro, será todo un gusto-.Bella lo tomaba del brazo, para ir hacia el jardín al auto, el abría la puerta para que ella tomara lugar, se acomodaba en la silla delantera.-Oh, perdón Ani, es que no estoy acostumbrada ir atrás, me da cierto estrés-.-No te preocupes, yo siempre viajo sola, por aquello que en la bici no tengo puesto para nadie más-. Sonreía y tomaba lugar en la parte de atrás del coche. Las miradas de ella y Juan Carlos se cruzaban de tanto en tanto.Bella le preguntó si se reuniría con e
Candelaria tomaba su taza de café negro ligero, mientras tejía, le había rendido bastante, el día lo había pasado entre la habitación y el balcón, Yamila hizo jardinería junto a Berta, las flores que poseía en su casa eran dignas de admiración, Berta entraba en la habitación para dejarse caer desplomada en el cómodo sillón de la terraza.- ¿Cariño que estas tramando?-Estoy haciendo un ajuar para Ani, lo hice para todos mis nietos cuando se casaron, no la dejaré sin uno-.-Candelaria te sientes bien? Ni quiero imaginar que estés sintiéndote mal de salud y me estés ocultando algo tan importante-.-Nada, imaginaciones tuyas, algún día ese instante llegará, no podré detenerle, solo puedo ganar tiempo, para despedirme de los míos-.Berta le miraba ahora con rostro serio y algo triste.-Siempre tuviste esas visiones de cosas, recuerdas cuando falleció la esposa de tu hijo, lo supiste una semana antes, como no lo sé, pero acertadamente envolviste la familia, Ani…quizás no lo tiene tan prese