Como calmarse, como no sentir que lo timaron, que se burlaron de él, cuando la mujer que amaba resulto siendo quien se terminó burlando de él, quien termino tomándolo como un idiota, no se burlaron solo del sino también de su hija de una niña que no tenía la culpa de ser inocente hasta quererla como la quería, no entendió como pudo engañarlo tan, pero tan bien. El lloro al pensar que pudo morir junto con ella, para que luego se entere de que no fue más que pare de su treta.
—Estoy bien oficial, deje pensarlo ahorita tengo algo que hacer.
William salió de ahí incrédulo a todo lo que había pasado, se lamentaba cada acto de cariño que había tenido hacia ella, de cada beso, de cada halago, de cada suspiro que había tenido, pensaba en las palabras de sus amigos del “Espera a que todo se aclare pri
El día anterior William no había venido a vela en ningún momento, por más que quiso no preguntar no aguanto, pero no le dieron noticia de él, por fin había agarrado valor para contarle su verdad para luego decirle que si quería ser su esposa solo si el aún quería que lo fuera, había tomado una pequeña siesta cuando abrió los ojos, al fondo de la habitación pudo ver una imagen extraña, la posición de las manos en sus bolsillos y el cuerpo medio inclinado a un lado de la puerta cerrada, por un momento pensó que era Mateo, pero ira imposible muy adicional que tenía resguardo policial desde que despertó que los vio ahí como custodiándola, pero se llevó una mano al pecho al ver que era William, pero algo no era igual, su mirada oscura, la rigidez de sus facciones, como la miraba, algo en su interior como si de un clic se tratase
La respuesta de Mariam ante la propuesta de William fue sorpresiva, ¿Qué paso por su mente en ese momento? Diana, Diana, y William.A ella no le importaba su propio bienestar aunque sabía que William no era Mateo y no le pondría una mano encima porque si fuera como su ex en este momento estaría en el suelo bañada en sangre y con su vida dependiendo de un hilo, ella aceptó porque necesitaba demostrarle al hombre que amaba, que de verdad no era el tipo de mujer que él pensaba, quería que Diana retrocediera en sus avances, la amaba tanto que no quería verla llorar por las malas decisiones que ella llegó a tomar bajo amenazas, sabía que sería difícil, pero quería recuperar a ese William que la miraba con amor y devoción, ahora era lo contrario, ahora la miraba con odio y rabia, pero esperaba que dentro del muy en el fondo aun hubiera una min&
A la mañana siguiente le dieron el alta, nadie vino a recogerla o ayudarla con los papeles, le dolía el corazón, pero entendía que era parte de su castigo por sus acciones, pero nadie haría que cambie de opinión uniría su vida a la de William bajo la ley del hombre, se despidió de las enfermeras con un suave abrazo, pero era otro tema con el médico que la había salvado de las garras de la muerte, Máximo era especial, no había dejado de visitarla ni un día durante esos diez días que estuvo bajo su cuidado, como le platico Paulina una de sus enfermeras favoritas, cuando un médico salva de la muerte a un paciente este se vuelve aún más especial.—Buenas tardes, doctor Santisteban, venía a despedirme de usted, lo voy a extrañar además de que un día de estos le traería de mis famosas gallet
Todo El camino a casa fue un completo silencio, podía ver como por ratos William apretaba el timo hasta casi dejar sus dedos rojos de tanto que hacía que la sangre no corriera de manera normal, no se atrevía a decir nada, sentía que si lo hacía volverían los ataques, las recriminaciones y no quería, ya bastante era como saber cuándo la odiaba.Cuando llegaron tuvo que hacer una enorme sonrisa y abrir los brazos para Diana que estaba con su cartel hecha por ella misma de BIENVENIDA como no sentir ternura con esa hermosa sonrisa no importada las caras que demostraban cuanto la detestaban de Manuel y Tatiana, sabían que también ellos la creían la peor de las mujeres, pero ahora lo importante era su pequeña Diana que presurosa la tomo de la mano y la sentó en un sillón para que no es agite por como ella decía Mi Mari está enferma no la vayan
Mientras hablaba con Sofía no podía dejar de pensar en la noche anterior donde William no la dejo decirle lo que tenía atravesado en medio del pecho que lo amaba, ese hombre definitivamente se había empeñado en nunca oír su lado de la historia, pero ella con sus actos se encargaría de demostrarle su amor, aunque él no le permitiera decirlo en voz alta.—Hija de la —Sofía estaba molesta, por así decirlo no podía creer que siendo amigas ella jamás le ocultaría algo tan importante.—Sofía, la niña este presente controla tu vocabulario—Sofía la veía seria y cruzando los brazos.—Cómo quieres que me pongo si resulta que, siendo mi amiga, no me contaste que te vas a casar con el guapote de tu jefe Quiero los detalles, hace cuanto están juntos y esas cos
—Amiga no es necesario que hagas esto sola, ¿Quieres ir sola? — Le preocupaba que estuviera presente el desgraciado de su ex, esta vez no se contendría de darle su merecido, eres un imbécil, un hombre sin escrúpulos la mirada que le dio la primera vez que la vio fue suficiente para darse cuenta de que tipo de hombre era.—No quisiera, pero tengo que hacerlo por mí misma, no puedo tener miedo del pasado todo el tiempo, solo iré por mi vestido y regreso, no hay nada más ahí que me interese, quédate con Diana por favor, no sé en qué estado se encuentre el lugar hace un tiempo que no venía.—No sé qué afán el tuyo de llevar ese vestido, si sabes de sobra que puede comprarte uno, así escotado con una abertura en la pierna a lo angelina Jolie, uno bien sexy ya me imagino que tipo de vestido ser&aacut
—Mi Mari ¿Estás bien? —Mientras Diana la veía detenidamente. —Claro que estoy bien princesa, si te tengo a ti claro que estaré bien siempre—Dándole una sonrisa que no llegaba a sus ojos, nada estaba bien y salir de ese departamento la desquebrajo más si eso era aún posible, recordar todo lo que sufrió a manos de Mateo. —Es que tus ojos se ven chiquitos, chiquitos, así como chinitos ¿Estas enferma? —Es que soy alérgica a unas hormigas gigantes y me pico una, vez aquí mira en mi cuello hay una pequeña hinchazón eso es gracias a ellas—Mostrándole lo que debía atribuirle a la dichosa alergia. —Que feo esta, pero ¿Se va a quedar así? — Intentando tocar en ese lugar, pero ponía cara de horror y no se atrevía. —Claro que no, ya tomé algo para se vaya rápido, voy a estar bien tu tranquila. Para Sofía era inevitable no darse cuenta lo que af
Ella quería llorar de la emoción, quería saltar con la pequeña en brazos, jamás pensó que algo como eso sucedería o nunca busco que eso sucediera. —Nada me haría más feliz en esta tierra que de verdad ser tu mamá, pero tú puedes decirme como quieras pequeña nada va a cambiar lo mucho que te quiero, porque para mí es como si hubieras salido de aquí—Y señalo su corazón y abrazo fuerte a Diana, que quería llorar, pero ella misma se había propuesto ser una niña valiente y lo estaba logrando. Luego de un rato de conversar Diana estaba muy emocionada por su dichosa noche de chicas, quería maquillarse, quería ponerse verdura en los ojos como decía ella. —Hoy es nuestra noche de chicas ¿Así se dice vedad mi Mari? —Sonriendo como solo ella sabe hacerlo. —En efecto, hoy es nuestra noche de chicas mi cielo. — William solamente las observaba, le había tomado por sorpresa lo que Diana quería, pero con esa