D´LAYLA
¡Carajo!, otra vez no quiero ¿Es en serio? Bueno, se dirán ¿De qué habla? Me presento mi nombre De layla pero me dicen lay o layla depende claro, tengo 18 años y vivo en un palacio lleno de sirvientes y lujo por donde vean ,,,,,, ¡Va! Mentira vivo en un pequeño cuarto va ni eso vivo casi debajo de un puente cerca de una estación de trenes abandonada, tengo cabello lacio pero rebelde yo diría demasiado a veces siento que tengo una telaraña en vez de cabello aunque dicen que es normal por como herencia materna, no soy baja para ser mujer soy demasiado alta y me lo han dicho aunque suena algo machista, mido 1.75 delgada porque no me queda de otra imaginen una pieza de pollo entre 4 personas ya pues imaginen, conmigo vive mi mamá ya está casi anciana, mi hermano de 15 años y mi padre quisiera ni mencionarlo él es el culp
ESTEBANHoy ha sido un dio duro pero feliz, me hicieron más pruebas y he salido bien de todas ellas, gracias a Dios que me sigue ayudando, todo ha salido negativo, que diferencia con el diagnóstico inicial pensé que realmente moriría aquí y preferiría hacerlo solo tal vez si le decía a ella que tenía miedo de morir solo, ella era capaz de sacrificarse y sacrificar su felicidad por acompañarme la conozco y aprendí a conocerla a veces la extraño pero me ha servido mucho estar aquí ya no siento ese dolor de no tenerla cerca, ya no tengo esa necesitada de ver sus fotos de acosarla por las redes sociales no me malinterpreten no es que le escriba a todas horas solo que me la pasaba viendo nuestras fotos aquellas que nos tomamos juntos tantas veces hace poco me llene de valor y borre varias aun no borro todas no me siento capaz aun , gracias a Dios el dire
ESTEBANNo sé qué estoy haciendo, en unos segundos se me quito la borrachera que hago en mi auto con una jovencita y un muchacho herido de bala casi muriendo y rumbo a mi casa y no a un hospital como debería ser, ¡no sé qué mierda estoy pensando, en que lío me estoy metiendo! Para que a este muchacho le metan bala no es algo de robar un dulceMINUTOS ANTES—Doctor por favor se lo suplico no deja que muera, es mi única familia, por lo que más quiera hago lo que usted me pida luego, pero sálveloSin dejar de llorar y de arrodillarse y aferrarse a sus piernas mientras Esteban miraba la escena la muchacha suplicante y el muchacho a medio morir—Tenemos que ir a un hospital —Le dijo EstebanElla solo atina a dar un grito desgarrado
Varias horas después Esteban les había preparado el desayuno D’Layla se había quedado dormida en el mueble y el olor a café recién hecho la despertó, pero apenas lo hizo fue a ver a su hermano, y cuando iba a tomarle la temperatura—No te preocupes ya le apliqué unos analgésicos, ahora que todos estamos cuerdos y calmados puedes explicarme que fue lo que sucedióAunque se veía algo serio y molesto por haberlo involucrado D’Layla solo podía observar su perfecta caballera castaña casi rubio, sus perfectos brazos que se acoplaban de manera perfecta a esa camisa color celeste esos ojos color entre cielo y azul era un color que no podía definir solo sentía que se perdía en ellos, no podía dejar de admirarlo.Que hombre por Dios, acaso morí y estoy en el cielo
D´Layla No puedo estar cerca de este hombre, no se da cuenta que estoy demasiado enamorada si yo enamorada quien me lo diría a mis 18 años enamorada de un hombre que 10 o más años mayor que yo , él es un Ángel y yo tengo un maldito infierno como pasado , jamás se fijaría en una niña como yo para el siempre seré eso una niña rebelde pero tengo que pensar en mi hermano no podemos regresar a las calles ese maldito italiano se querrá vengar de nosotros , no puedo exponer a mi hermana a toda esa mierda de vida , tal vez si tenga razón la única manera de sacarlo adelante es si quedándome acá y ayudando a mi Ángel va a ser una tortura tenerlo cerca, ver sus lindos ojos casi tan claros como el mar, esa sonrisa de portada de revista y ese cabello castaño claro&nb
—Estas loco hermanito. solo que como que prácticamente le debemos la vida acaso no te has dado cuenta con eso él puede decirme como quiera y a ti también.Definitivamente no podía ponerse en evidencia, no podía dejar que alguien se dé cuenta que hace meses que vive soñando que algún día el volteara a verla como ella quería—Bueno si lo vemos así, tienes razón le debemos mucho y anda ve y recorre la casa que debemos saber dónde dormiremos estos días—Hablando de eso de cuando acá sabes de jardinería, que yo sepa no sabes ni diferencia el cilantro del perejil—Pero puedo aprender, eso no importa la idea es tener un techo donde quedarnos mira todo esto—Pero no es nuestro y solo lo hago porque no quiere
—Entonces tu preparaste todo eso, pero no era necesario, yo llamaba a un catering y traían todo— Ella sentía agradecimiento hacia el muy aparte de ese enamoramiento que necesitaba que fuera pasajero, siempre había oído acerca de eso y esperaba que sea así porque no le gustaba la idea de ser el tipo de mujer sufrida que toda su vida su corazón le pertenezca a un hombre y además uno imposible.—Es lo mínimo que podía hacer, después de todo le debo la vida de mi hermano, además no sé si estará a la altura de sus amigos, pero hice lo que pude. —Queriendo restar importancia al hecho que delante de ella, había cerca de seis bandejas de entremeses diversos, dulces y salados, decorados con la mayor paciencia y cariño posible, no era tal vez lo que él estaba acostumbrado, pero quería quedar bien con él y pagar
—Parece que fue todo muy divertido — Le dijo Layla a su doctor favorito.—Excepto pequeños detalles, pero si no me puedo quejar hace mucho tiempo que no celebraba mi cumpleaños, él anterior a este estaba si recuerdo bien sometiéndome a una operación muy delicada— Recordando es época en su vida, donde se encontraba solo, sin la mujer que amaba, sintiendo por momentos culpa o arrepentimiento de haberla dejado, pero hoy podía decir que sin darse cuenta ese dolor por dejarla ir se iba hiendo.DÍAS DESPUÉS—Entonces ¿Estás segura? —Preguntaba a su hermana.—No puedo seguir huyendo, por lo menos yo saldré, sé que estás recuperado, pero tengo que dar la cara. —Tenía miedo, pero no podía seguir huyendo a
—No fue el mejor, pero era nuestro padre, ¿Por qué hermana? —Ella sin lágrimas ya lo abrazaba, mientras el cajón era metido a un gran hueco dentro de la tierra, no había flores, no había otras personas lamentado la muerte de ese hombre, solo eran ellos y Esteban.—Vamos, Stevi tenemos que ir a ver a nuestra madre. —Esteban los seguía a paso lento, les sugirió ir a comer algo, ya que el menor de los hermanos ya estaba recuperado no había peligro, otro en su lugar ya les habría pedido que se vayan lejos, sin embargo, le gustaba su compañía, lo hacían sentir que no estaba solamente, sin mencionar que la presencia de aquella chiquilla loca de mejillas sonrojadas era como un pequeño rayo de luz a su vida.…—¿Cuándo cree que despertara? —Pregu