Los primeros rayos del día se filtran por mi ventana, el sol va tomando fuerza sobre el cielo y le dan la última pasada a mis pestañas que se alargan mucho más con el rímel para luego ir por mi cabello. Sammy me peina realizándome un semi-rrecogido y ondulándome las puntas le da volumen.

La emoción me tiene con la adrenalina viva en las venas y me levanto de la silla acomodándome la braga y las portaligas que ajustan las medias que llegan a la mitad de mis muslos. Me meto en el vestido de novia con corte de princesa. El corset traslucido marca la diferencia con pedrería preciosa el cual realza mis senos aportando sensualidad y los guantes largos casi imperceptible me dan un aire femenino y delicado.

La falda cae al piso destacando voluminosa desde mi cintura, el velo traslucido de tres metros de longitud y con detalles rojos le da la estocada final sin duda alguna a mi aspecto, resaltando cada parte de mi cuerpo. Me miro al espejo con la sensación en mi pecho al verme con la aparien