A DOS DIAS

VERONICA

El sonido de mi teléfono me sacó de mi estado de semi-sueño. Mi cabeza dolía y mi cuerpo estaba cansado después de una noche sin dormir. Miré el reloj y vi que era sábado, mi día de descanso. ¿Quién podría estar llamándome a esta hora?

Tomé el teléfono sin mirar quién era y contesté con un tono de voz algo irritado.

—¿Sí?

—Hola, mi amor —escuché la voz de mi mamá al otro lado de la línea—. ¿Cómo estás?

Mi culpa se activó al escuchar su voz. No quería parecer descortés.

—Hola, mamá —le dije, intentando sonar más amable—. Estoy bien, gracias. Solo que no dormí muy bien anoche.

—¿Qué pasó? —me preguntó mi mamá, preocupada—. ¿Te pasa algo?

Estaba tentada de contarle a mi mamá sobre lo que había pasado con Bruno, pero algo me hizo dudar. No estaba segura de cómo reaccionaría ella, y no quería preocuparla innecesariamente.

—No, mamá —le dije—Solo que tuve un día un poco estresante en el trabajo, eso es todo.

—Tu jefe te maltrata, te explota —dijo mi mamá—. No entiendo por qué aguan
Continue lendo no Buenovela
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Digitalize o código para ler no App