En lugar de irme a la habitación, decidí quedarme sentada frente a Salvatore y leer el contrato en su presencia.Me costó concentrarme durante las primeras dos páginas, porque cada vez que apartaba la mirada del papel y la trasladaba a su rostro me perdía un poco... aparte, no encontraba nada interesante en aquellas primeras líneas, nada que ya no supiera.Llevarle su ropa a la habitación a las siete y diez, su café a las nueve y bla, bla, bla... Todo con lo que ya estoy cincronizada.Me mordí el labio de vez en cuando para evitar sonreír, las veces que pillaba a Salvatore colocando un mechón rebelde de cabello detrás de su oreja, y a los pocos segundos esté volvía a salirse logrando acariciar su mejilla... Que envidia.Tenia la mano derecha reposada sobre el escritorio, justo al lado de su laptop y la izquierda la mantenía alzada, con el codo apoyado en el brazo de su silla, mientras su pulgar jugueteaba con un enorme anillo que tenía en el dedo anular, eso también llamaba mi atenció
Una vez en la habitación, cerré la puerta y me llevé las manos a la cabeza.¿Que carajos fué lo que firme?, ¿Acaso ese contrato me convierte en la amante de ese hombre?, O peor, en su prostituta, porque si me va a pagar para que lo atienda solo a él y eso incluye todo tipo de "atenciones", la palabra amante pareciera un eufemismo.-No, no, no y no-Me dije a mi misma.Después de haberme negado tanto en mi anterior empleo, no puedo caer tan fácilmente en este... Aunque si comparo a Salvatore con los clientes que frecuentaban el bar, la diferencia es kilométrica, pero igual no me creo capaz de dormir con el, y menos, estando bajo el mismo techo que Elena, sería muy descarado de mi parte, sin importar las libertades que ella se toma, ese asunto es entre ellos dos.No entiendo en que momento todo se complicó tanto, no llevo ni dos meses trabajando en está casa y ya me he metido en demasiados problemas, demasiadisimos...Y lo increíble es, que después de leer esa última parte del contrato no
¿Que atuendo se puede poner una chica para dormir con un hombre que le alborota las hormonas, tal como un oso alborota a un avispero?No tengo la menor idea... pero como dicho hombre es casado, la mejor opción sería algo poco revelador y escasamente provocativo.Fue por eso que me coloque una pijama de pantalón largo... fuí al baño a cepillarme los dientes y peiné mi cabello para dejarlo suelto.Cuando estuve lista salí de la habitación justo a la hora acordada, y empecé a subir las escaleras, sintiendo los pies pesados, las piernas débiles y a mi corazón querer saltar de mi pecho... Y para completar, la sangre huyo de mi rostro cuando vi a Elena que venía bajando los peldaños.Casi me lanzo a rodar escaleras abajo con tal de no verle la cara a esa mujer.Me quedé inmóvil, como una muñeca de porcelana, y con los nervios de punta. Pero resulta que Elena venía tan risueña que ni se percató de mi presencia, o simplemente me ignoró... Traía un aura distinto, alegré, no se dónde dejo ese á
Fui abriendo lentamente mis párpados, y me encontré de frente con unos conocidos ojos marrones que me detallaban con extremada atención...A pesar de que ya llevo vários días durmiendo en su cama, es la primera vez que me lo encuentro al despertar. Y verlo ahí, me entusiasmo más de lo que quisiera admitir...Estaba acostado boca abajo, con la cabeza apuntando en mi dirección, y una de sus manos reposaba sobre la almohada, justo al lado de su rostro.Mis ojos se deslizaron lentamente por sus facciones, sintiéndose deslumbrados principalmente por esos ojos color café, tan intensos e intrigantes, y los cuales veo, incluso en mis sueños. Su nariz recta y pómulos me parecen adecuados para ese masculino rostro. Quisiera pero no puedo, apreciar por mucho tiempo sus labios suaves y carnosos, porque me generan sensaciones que no logro describir...Decidí hacer una momentánea estación visual en su espalda descubierta, en sus brazos, en sus hombros. Me impresiona mucho la manera en que se le mar
Mientras daba una tranquila caminata por los jardines, me di cuenta de que el sol empezaba a bostezar, dándole pasó a la fría tarde.Salvatore salió de la mansión desde el medio día y aun no regresa, es por eso que ahora me encuentro divagando entre las Flores...Después de que él, atendiera una llamada telefónica, lo sentí un poco inquieto.Me pidió que le alistara uno de sus trajes de corbata, porque al parecer se le presentó una reunión de imprevisto, con unos inversionistas importantes.El aborrece que las cosas se le presenten así, de forma súbita, cualquier situación que surja de un momento para otro lo pone de mal humor. "Por supuesto que el señor meticuloso, necesita controlar todo con extremada anticipación"... Pero no tuvo mas remedio que asistir porque necesitaba cerrar un trato multimillonario con esas personas...Aunque a mi tampoco me fascinaron esos planes de última hora. Por culpa de esa reunión es que ahora me encuentro ahogada entre el aburrimiento y la preocupación.
SALVATORE.Que difícil es dormir cuando mis pensamientos deambulan desasosiegos...Intenté varias veces mantener mi mente en blanco, pero fué inútil, mis actuales problemas se acumulan y me arrastran inevitablemente a una noche de desvelo.Suspiré frustrado y abrí mis párpados para mirar por tercera vez el reloj despertador que ya marcaba más de la medía noche.No podía seguir así, debía descansar mis horas reglamentarias, mañana tengo demasiados asuntos que resolver.Giré sobre mi costado y mis ojos se posaron sobre aquél rostro angelical que se encontraba durmiendo plácidamente a mi lado. Escuchar su pacífica respiración me ayuda a relajarme, pero no estoy seguro de que me ayude a dormir, porque una vez que la veo, me resulta difícil apartar la mirada.Levanté mi mano y con la punta de mis dedos, le quite cautelosamente un mechon de cabello que tenía en el rostro, para apreciarla mejor.No entiendo por qué, pero ella se a convertido en una especie de droga para mi, para mi cuerpo..
Después de casi un minuto que me pareció eterno, la vi tragar en seco para susurrar con voz temblorosa:-Es la primera vez que yo...La frase se desiso antes de que pudiese terminarla, pero entendí perfectamente el inconcluso mensaje.Cerré mis párpados y uni mi frente con la suya porque ahora era yo quien estaba al borde del arrepentimiento.Como es posible que no me haya dado cuenta, que no previera eso, sabiendola tan inocente.Se que algo dentro de mi lo sospechaba y me negué a creerlo, por el egoísmo desmesurado de poder hacerla mía.Ahora me encuentro en una encrucijada, quiero que suceda y al mismo tiempo no puedo. Confirmar que puedo ser el primero en su vida incremento mis ganas, pero no me creo merecedor de algo tan importante."Si no eres tú, será otro"-Rugio mi subconsciente, y el simple hecho de pensarlo hizo me que hirviera la sangre.Aun así no sabía que hacer, necesitaba una señal. Y ella, adivinado mi reacción, colocó sus manos a los costados de mi cara, y me alejó un
STELLA.-Bffff-Resople con fastidio.Ya he acomodado tres veces la cama de Salvatore y aún sigo viéndole arrugas.Quito las sábanas, las almohadas, vuelvo a colocarlas cuidadosamente y sigue quedando mal. No entiendo que pasa, he perdido treinta valiosos minutos con algo tan simple cómo cambiar unas sábanas.-¡Estúpida cama!-Me quejo molesta, en voz alta, dándole un punta pie a la madera. Sabiendo perfectamente que mi rabia no es por el enorme mueble frente a mi, sino por su dueño.Me estoy volviendo loca por su culpa, primero hace cosas que me dejan suspirando como tonta y después lo arruina absolutamente todo...-¡Estupido Salvatore!-Suelto al fin, desahogándome.Es que tengo tanta rabia, sentí que todo había sido perfecto anoche, incluso nuestro despertar pareció serlo, pero no, al muy tarado se le ocurrió abrir la bocota y dañarlo todo, diciendo una frase tan humillante como esa...Flash Back.Al despertar noté que no hacía tanto frío como suele hacer todas las mañanas, a pesar