REGLA # 1. CAPÍTULO 18. HuéspedesLeon tiró de Mariel hacia los establos, y ella no podía evitar mirar con fascinación y algo de miedo los enormes caballos que se encontraban dentro de los corrales.Él, por otro lado, solo iba muerto de risa y tratando e no ahogarse con su propia lengua porque solo
REGLA # 1. CAPÍTULO 19. Un hermoso espectáculoLeon y Mariel caminaron hacia su habitación mientras las quejas de Verena resonaban en el pasillo detrás de ellos.—¡Esto es inaceptable! ¡No pienso tolerar esta falta de respeto! —gritaba con una voz chillona y cargada de indignación.Mariel apenas pud
Regla # 1. CAPÍTULO 20. Las reglas están para cumplirseLeon se echó atrás en un solo segundo, mirándola a los ojos.—No has bebido, no te has metido nada… —murmuró como si tratara de convencerse a sí mismo—. ¿Te volviste loca?—¡Un poquito sí! —Mariel hizo un puchero—. Ovulación, hormonas, falta de
REGLA # 1. CAPÍTULO 21. Ya casi…No había forma de negarlo, aquellas palabras tenían el poder de poner a Leon Roshtchild en la peor vorágine sexual de su vida y ni siquiera lo sabía. Solo estaba claro que desnudarse delante de Mariel era el maldito exhibicionismo perfecto, porque le encantaba la for
REGLA # 1. CAPÍTULO 22. Un lindo oso en celoMariel despertó con el cuerpo entero adolorido, como si hubiera corrido una maratón y, al mismo tiempo, hecho una rutina intensiva de gimnasio. Soltó un quejido que resonó en la habitación mientras se sentaba en la cama, desgreñada y con los ojos entrecer
REGLA # 1. CAPÍTULO 23. Entre clases y errores.Mariel comenzó el día con un peso en el pecho, aunque no sabía si era por el cansancio acumulado, el café demasiado cargado que Leon le había preparado, o las constantes indirectas de Verena, quien había adoptado una actitud digna de villana de telenov
REGLA # 1. CAPÍTULO 24. Peligro al acecho.Leon estaba sentado en la biblioteca, tamborileando los dedos contra el brazo del sofá con un ritmo irregular. Llevaba así un buen rato, mirando fijamente un libro que evidentemente no estaba leyendo. Mariel lo había notado desde el pasillo y, con una sonri
REGLA # 1. CAPÍTULO 25. Una hadita enojada¡Dormir en el sofá era lo peor del mundo! Leon se había hecho el duro casi toda la noche, casi, porque no sabía ni para qué lado girarse y no había forma de que se durmiera.—¡Al diablo, que me mate mañana! —rezongó subiéndose a la cama y abrazando a Mariel