~Autor AdrianitaMD~

Mi nombre es Danison Andrade, te contaré

está historia.

Los Dior nos odian, y yo debía convivir con mi familia en su gran mansión.

¡Espera! empecemos por Axthon.

ahora sí.. Axthon el Adonis que se fijo en mi personalidad.

Quién diría que del odio al amor hay un paso. Pero el hecho es que, yo nunca lo odie el me gustaba y pues... el Adonis si me odiaba. Fingir odiarlo no iba conmigo, nunca pensé enamorarlo profundamente.

Mi cambio de Look causó que el Adonis revelara la verdad.

Así fue como comenzó todo, en la gran mansión.

Tu Mi Perdición.

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[Danison]

Otro día en el que agarro el cepillo para peinar mi pelo rizado. Mirándome al espejo, jalo unos mechones que hacen que de un pequeño gritito de dolor, mi pelo era incómodo de dominar.

Tengo que apresurarme estoy en mi último año de estudió (La promoción) y claro mi cumpleaños número 19 está cerca. Ya acomode mi pelo, me mire ya estaba lista solo faltaba que el idiota de mi hermano venga a tocar mi puerta.

—¡Oye Danison, apúrate!—Hablo con la voz alzada detrás de esa puerta, y debía ir pasar por unos cuantos obstáculos.

Me refiero a las personas que nos detestan desde el día que pisamos esta casa. Acomodé mis lentes, fui a la puerta tome la manija y la abrí.

—Buen día hermanito—Mi hermano me miró resoplando. le dedique una sonrisita—Lo siento estaba arreglándome.

—Sigues viéndote igual Danison.—Soltó seco, eso me había herido en parte, pero no soy una chica que se le pasa llorando por qué critican su aspecto, aprendí a vivir con críticas y burlas. Aún que ahora ya les vale si soy bonita o una fea no me dicen nada.

Mateo fue en dirección a la escalera y tuve que seguirle, el bajaba más rápido que yo y mis piernas parecían no tener fuerza de correr

¡Es que me dan miedo las alturas!.

—Y recuerda Danison, saludar al señor Dylan, a la señora Janeth, su querida hija Hanna y el patético de Axthon—Apeló Mateo antes de que lleguemos a la sala.

No tenía ganas de pasar por ese lugar, ellos ni siquiera nos respondían el saludo, simplemente nos veían e ignoraban pero Hanna la hija menor de los Dior era lo contrario muy linda, nos saludaba hasta se acercaba a hablar con nosotros.

estábamos justo en la sala, los Axthon estaban en su desayuno, Mateo se detuvo y esbozo una gran pero gran fingida sonrisa.

—¡Buen día querida familia Dior!—Queria esconderme detrás suyo en este instante. El ambiente se había vuelto tenso e incómodo.—Te toca saludar a ti Danison.—masculló entre dientes.

—Señor Dylan como está en este hermoso día, señora Janeth usted se ve muy bien pero perfectamente hoy...—sentí sus miradas pesadas puesta en mi, quería detenerme en este instante y solo irme—Hanna ¿que tal tu día?—esboce una sonrisa mirando a Hanna que tenía un gesto alegre.

—Muy bien Danison ¿y el tuyo?

—Um... bien supongo

—Oh y eso... ¿no quisieran desayunar con nosotros?—quise responder pero antes que lo haga alguien se interpuso.

Apoyaba a mi hermano en haberle puesto ese apodó « patético ». Esa personita poso su penetrante mirada e iracundo ojos azules en los míos, no puedo seguir compitiendo con esa mirada y es que el derrite mi corazón soy tan estúpida por ser débil ante el.

—La falta de educación abunda por aquí—Se hizo presente su ronca y profunda voz que era una sensación extraña que hacía estremecer mis oídos.—¿Te han enseñado a saludar a tus mayores?—Preguntó de forma grotesca, frunciendo un poco la frente, entre abriendo sus labios.

Cómo lo odiaba y no solo por eso, es que... no podía odiarlo por eso me odiaba a mi, enserio yo era débil ante la única personita en este mundo y ese era el queridísimo Axthon Dior

—Disculpe señorito Axthon, no lo había visto cuánto lo siento—fingí una voz penosa e hice un puchero triste.

—Hablaron suficiente, pueden retirarse de nuestras vistas—dijo por último, creyéndose una gran cosa, quería decirle miles de cosa mi lengua estaba lista para darle los insultos que se merece. Pero claro eso sería cuando el este solo.

—Con su permiso, señores Dior…—Indague irritada por dentro, Mateo me siguió.

Justo en la salida no aguante y tuve que decir palabrotas

—¡Hay mírenme soy Axthon, un anciano por favor respétenme o podría tener un paro cardíaco—Mi hermano se echó a reír fuertemente, me contagió la risa que no aguante y tuve que reírme también.

El tenía razón, no lo saludé tal vez por eso se molestó. Pero ya me tranquilizó, se miraba tan atractivo con ese traje, esa mirada bestial sus facciones que me hacían debilitar. ¡Danison ya el es un fastidioso y idiota e inmaduro humano!

Fuera de broma, si era muy bueno en su hablar, cortante, caballeroso, bien galán.

—Poco más y insultabas al rey de Roma—Comentó Mateo.

—Se lo merece por ser idiota.—Bufe

Llegamos justo al auto, papá siempre nos llevaba al colegio, ahí estaba afuera estacionado. Lo saludamos y entramos, el nos miraba por el retrovisor.

—Chicos demoraron mucho

—Lo sentimos papá ya sabes por educación hablamos con los Dior—Contesto Mateo.

—Uff ya me lo imagino, esa familia es un dolor de cabeza.—Apeló papá.

Mi padre era dueño de la mitad de la empresa Dior y claro también la gran mansión Dior. ¿Cómo lo logró? Aún es un gran misterio. El viste elegante como todo un negociante, usa lentes como yo y tiene una barbita pequeña gris que lo hace ver chistoso en ocasiones y está perdiendo cabello eso se debe a la edad.

—Ahí va la futura pretendiente de Axthon.—Señalo Mateo por la ventana, mire por el vidrio, iba esa rubia irritante conduciendo su coche toda hermosa por cierto. Claro Axthon la ama con locura y todo por qué es hermosa.

—Que bonito se ve su auto.—Dije sin ganas de seguir mirándola.

En cuestión de minutos llegamos al colegio, salí del auto y el viento choco con mi cara y es que aquí en Londres era tan común. Mire el gran colegio, otra vez debía entrar y recibir miradas de estudiantes, comentarios negativos también.

—Vamos Danison, te acompañare hasta tu salón.

—¿Oh enserio Mateo?

—No, es broma.—y se alejo riéndose.

Cómo odiaba que sea así conmigo. Pero en parte era muy bueno, no te juzgo Mateo. Pase con rapidez sin ver a alguien aún que chocaba algunas veces y recibía regaños, ignoraba… por fin llegue a mi salón, deje mi mochila sobre el asiento que estaba junto a mi amiga.

—Nena ya iba empezar la clase—Hablo Estefany, ella estaba poniéndose rimel en las pestañas.

—Pase una serie de obstáculos, créeme este fue uno de los más incómodos días de mi vida.

—Ay… apoco así.—Me miro juguetona—¿Y tu príncipe Axthon?.

Abrí los ojos en grande, el calor se subió a mi cara. Ya podía verme como tomate si me dieran un espejo. Estefany era mi mejor amiga en todo este salón y la única, siempre estaba ahí.. ella sabía del secreto que vivía en la mansión y claro de Axthon, aún que ella tenía novio Axthon no le atraía, pero si Estefany era una hermosa chica rubia con ojos verdes, su pelo es Lacio cómo la envidiaba. No le costaba peinarse.

—Axthon el idiota, ni lo menciones.

—¿Uys por qué?—Sonrío ella.

—Olvide saludarlo y recibí un regaño de su parte.

—Ay Danison, seguramente estabas por derretirte—Estefany me haría cosquillas en este mismo momento de no ser por la maestra que entraba justo a tiempo.

Ah, y la odiosa de Peninton… no la soportaba, ella siempre con sus insultos de gringa. Y claro se burlaría por qué yo era la única que no consiguió pareja de baile para la graduación.

—Estefany que bonitas tus pestañas, oh.. Danison ¿Ya conseguiste pareja de baile?—Pregunto sínica, fingiendo amabilidad.

Cómo me desagradas Paninton.

Este será un largo día...

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Espero les guste y estén disfrutando 😁😁✨✨❤️❤️😊

*Danison, 18 años... una soltera sin encontrar el amor verdadero, tampoco novio.

¿Cambiará de Look para conseguir novio? sigueme... leyendo* :).

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