CAPÍTULO 46

Habían pasado un par de días y Liam ya estaba despierto y sus fuerzas regresaban más rápido de lo que me había atrevido a esperar. Me quedé a su lado, atendiéndolo, mi corazón se hinchaba con cada momento que pasábamos juntos.

Su cabello rubio arena brillaba a la luz de la mañana, y esos llamativos ojos azules (ojos que había visto tanto) ahora estaban llenos de gratitud y algo más profundo, algo que reflejaba mis propios sentimientos.

—Freya, gracias por tus cuidados. —dijo suavemente mientras caminábamos por el bosque que rodeaba la cabaña. El aroma a pino y tierra llenó el aire, conectándome al momento presente.

—Fue un gusto hacerlo, eres especial para mí —respondí, apretando su mano—. Yo quería hacerlo.

Antes de que Liam pudiera responder, un anciano emergió de entre los árboles, su cabello plateado cayendo como una cascada, su presencia imponía respeto. La anciana Maren siempre había sido una figura de sabiduría y fortaleza en nuestra manada, y sus visitas nunca eran frívolas.
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo