Narra Noah.
Viernes 25 de marzo 2022.
—Necesitamos que dejen de evitarnos —Natanael es quien habla por los dos.
Siempre he sido el intermediario en los conflictos a mí alrededor, pero esta vez no soy capaz de serlo.
Me siento decepcionado en todos los sentidos. Es como si todo lo que en mi vida creí y amé nunca fue real.
Mamá me admitió que le fue infiel a mi padre. Y aunque yo no sea un chiquillo me afecta como si fuera el fin del mundo.
Se van a separar, veo en los ojos de mi padre que jamás la perdonará, y tampoco tengo la valentía de pedirle que le dé una oportunidad. No tengo la moral después del rollo en que me he metido.
—¿Se separaran? —Cuestiono viéndolos, tomando con fuerza el teléfono con la llamada de mi hermano activa.
—No —Mamá niega pero no es capaz de verme a mi o mi hermano.
—No legalmente. Solo… necesitamos tiempo.
—Yo no necesito tiempo —Mi madre lo ve, con desespero.
Lágrimas se acumulan en mis ojos ante la escena.
—Tampoco lo necesitaste para pensar en nuestros 25 años de matrimonio.
Sí a mí me ha dejado con la boca cerrada, no quiero imaginar el efecto en mamá.
—Noah, solo dejémoslos ¿sí? —Mi hermano luce tan afectado como yo.
—Hijos…—Dice ella en un hilo de voz.
—Lo siento… —Le digo. Corto la llamada con mi hermano y salgo de la casa de mis padres antes de que la tensión me destruya.
Si es que no termina por destruirme también el hecho de que han pasado tres días desde la pelea en Pacha y no sé nada de Abigail. La verdad, no la recuerdo después de darle el primer golpe a Peitton. No responde mis mensajes, ni mis llamadas.
Tuve muchas expectativas ese día respecto a nosotros y nada se dio. Las constelaciones desaparecieron, mi suerte y también lo que creía del matrimonio de mis padres se esfumó. La necesito. Quiero desahogarme como ella lo hizo conmigo hace años, sin decir el porqué. Deseo que aunque permanezca en silencio me bese y me transmita esa actitud tan arrasadora que me derrite a sus pies.
He pensado ir a su casa, pero no quiero que aumente su molestia si es que lo está. Fue una de sus reglas.
—Nada de visitas sorpresas. Si no te pido que me busques y llegas: todo acabará.
Me quedó claro, después de que sus labios rosados se impactaran con los míos y me diera uno de los besos más pasionales que he recibido; chupó un poco el inferior de mi labio, su lengua danzó con la mía, sus manos masajearon mi nuca y me abarcó por completo, robándome más de un suspiro, tanto, que me hizo sentir inexperto y las cosquillas en mi estómago gritaron: ¡presente!
Supe que enloquecería por ella mucho antes de eso. Y no haberla tenido por casi una semana me hace sentir como un adicto que tiene solo un día sin consumir su vicio.
Subo a mi moto, la enciendo poniéndola en marcha mientras me coloco los auriculares.
—Llamar a Peitton.
El sonido de repique resuena en mi oído y tres pitidos seguidos igual. Me corta la llamada también tres veces después.
Pienso en llamar a Bibiana pero el recuerdo de una llamada de Logan llega a mi mente.
—Si piensas seguir con ella, Corby, al menos piensa un poco más en la que se supone es tu mejor amiga, nuestra amiga ¿no ves que le haces daño con tu capricho de querer que ella sea parte de nosotros? Eso no ocurrirá jamás, Noah, jamás.
Y es por eso que desecho mi idea. Comienzo a sentirme culpable por lo mal que Bibiana lo pudo haber pasado, pero el recuerdo del puchero de Abigail diciéndome que no encajaba se hace más fuerte.
No sé qué ha hecho en mí, pero a pesar de todo solo puedo elegirla a ella.
El viento para de pegar con fuerza en mi rostro cuando me detengo. Decidido, tomo un respiro, desabotono un par de botones de mi camisa de vestir azul cielo y toco el timbre seguido de la puerta.
—Vete a freír canguros, Corby…—La voz de Peitton es de hastío por lo que exhalo, cansado de toda esta situación.
—Estoy enfrentando mis problemas, como el machito que soy —Uso sus palabras a mi favor.
No pasan ni tres segundos cuando cierra la puerta en mi cara. Inhalo para volver a tocar.
—¡Vete, Corby! Está bien ¿okay? Es obvio que te ha elegido a ti ¿tienes que venir a escupirlo en mi cara?
Los latidos de mi corazón aumentan cuando en sus palabras algo no me parece del todo bien ¿Qué quiso decir con que me eligió a mí?
—Peitton solo abre la puerta… —Meneo la cabeza, frustrado —He venido a… —Tomo mi tiempo para decir algo que de solo pensar me destroza más —A saber si Abigail te ha buscado u algo desde aquella noche.
Lo escucho soltar una risa burlona y me irrita. Definitivamente odio esta faceta por la que Peitton ha optado las últimas semanas. Me ha hecho pensar en varias ocasiones por qué aún lo considero mi amigo, y es que no deseo borrar los buenos recuerdos, ni las salidas a la opera cuando todo estaba abandonado, los papelitos con las respuestas de los exámenes, su ayuda con las chicas, ni los amaneceres de surf en donde al terminar entre todos decíamos con solo cinco palabras nuestro estado de ánimo; cosa que aunque a Logan y Bibi les parecía algo infantil, a Pei y a mí sí nos importaba.
—¡Pues qué bien! —Sigue gritando desde adentro —Ninguno de los dos pudo conquistarla. Para eso existen otras igual de busconas ¿no?
—Perdida, angustia, preocupación, llorar, surf…—Digo, pegando mi frente de la puerta.
—Adiós, vete, desaparece, sayonara, largo.
Rio sin gracia alguna, está siendo el mismo de siempre.
—No es así, Peitton, tengo un mal presentimiento, creo que… le ha pasado algo. No hay un día en que no actualice sus historias de I*******m y tiene exactamente tres días sin hacerlo —Siento los pálpitos de mi pecho subir a mi garganta —Estoy preocupado y… sé que has tenido tiempo para pensarlo y sabes que estuvo mal dejarte llevar. Dios, entendí tu mensaje esa noche, hermano. Sé que no lo haces realmente porque me odias, Peitton, tú solo estás gritando por ayuda...
Me sorprendo al darme cuenta que no he pensado nada de lo que dije, solo lo suelto y ya.
—No sigas…
Llevo también el puño a la puerta y niego, necesito soltarlo.
—Lamento no preguntarte si estás bien, lamento no habernos visto tan seguido antes de que ella llegara, siento que… tal vez si… —Exhalo —Peitton, la amo, y no quise parar lo que pasaba por el miedo a que cuando la pusiera a escoger se fuera contigo, esa es mi verdad, hermano. No es porque soy buen amigo, es porque me he enamorado y tengo miedo de perderla.
La puerta es abierta y me deja ver sus ojos azules un poco rojos. Luce como si tuviera precisamente tres días sin ducharse pero eso no me importa, lo abrazo.
—Dime que no te has enamorado Pei.
Él suspira en mi hombro, y tras darme una palmada responde:
—Vamos a buscarla.
Sonrío sintiendo un poco de alivio y me separo de él. Ambos nos vemos con algo de complicidad y por un momento siento que todo queda perdonado, sin embargo, sé que tomará bastante tiempo para que volvamos a ser los de antes.
—¿A su casa?
—Sí, pero dúchate primero.
Él se hace el ofendido —¿A caso apesto?
—No, pero luces como sí.
Ambos reímos. Y minutos más tardes este se encuentra vestido casualmente, como siempre, con su cabello rubio bien peinado y esa patética colonia que cree que derrite a las chicas, lo cual dudo que lo haga. Así que entre risas por ello, y su petición de irnos juntos en la motocicleta, nos embarcamos en la búsqueda de la protagonista de mi loca historia de amor.
—¿Es esa? —Peitton casi me grita, cuando en menos de tres cuadras la mansión destaca.
—S… —Un papel impide que termine la palabra, por lo que cuando el mismo viento se lo lleva me detengo en seco.
Aún falta una cuadra para la mansión Campbell pero los anuncios colocados en los buzones de las casas vecinas e incluso regados en el asfalto, hace que los latidos de mi ser se salgan de control.
Las ganas de llorar me invaden y cuando tomo el papel con mis manos temblorosas solo suelto un jadeo adolorido.
DESAPARECIDA.
Junto a una fotografía de Abigail, con sus características y número telefónico de sus padres.
—Esto tiene que ser una broma… Noah —Peitton habla, pero mis ojos están clavados en la palabra en mayúsculas y negrita —¡Noah!
Veo todos los demás, recogiéndolos como si en uno pudiera encontrar un: “es una broma”, pero no lo consigo, y las lágrimas salen sin parar.
—Peitton, esto no puede estar pasando…
Peitton se lleva las manos a la cien y camina de un lado a otro no sé por qué. Yo solo puedo limitarme a pensar que algo muy malo además de esto está ocurriendo.
Soy preso de la angustia desde este momento.
—Logan… —Suelta mi amigo, y veo a todos lados pensando que por alguna extraña razón el nombrado está cerca, pero no —La última vez que la vi Logan la estaba subiendo a su auto.
Narra Bibiana. Viernes 25 de marzo 2022. Me termino de acomodar al ritmo de mi canción favorita. Al estar lista bajo corriendo las escaleras, no obstante, reduzco la velocidad cuando recuerdo que a mi madre estos sonidos la molestan. Es por eso que para escuchar música tengo que usar siempre audífonos, entre otras cosas. Suena mi teléfono y mi estómago se retuerce de la emoción al ilusionarme con la idea de quién será el mensaje. Logan: Espero que tengas un buen día. Suerte. Resoplo con desgana. Por un momento pensé que Peitton tendría la delicadeza de escribirme al menos un “suerte”. Todos mis amigos saben que hoy es un día importante. Yo: Gracias. Sé que no debería ser cortante con èl. Después de todo, Logan siempre ha estado para mí. Fue al primero que conocí de mis tres amigos, solíamos ser muy unidos, pero al conocer a Noah y Peitton las cosas cambiaron. Ni siquiera me di cuenta cuando mi relación con Logan comenzó a pesar, a tornarse incomoda y distante. Y aunque debo aleg
Narra Noah.Viernes 22 de abril del 2022.—Tienes que detenerte y respirar. Oye —Escucho las palabras pero no entiendo lo que quieren decir —¡Noah! Hermano, mírame y respira.Mis ojos empañados se dirigen a la pantalla de mi teléfono.—¿No conoces a alguien que pueda ayudarme? ¡Nadie!Cuelgo porque Natanael está llorando también al no darme respuesta y no puedo verlo.Me siento abandonado, como aquella primera vez que tras tanto trabajo a mis padres se les olvidó buscarme al colegio, y con miedo tuve que aventurarme a ir solo a casa; enfrentándome a las personas grandes que sentía me harían daño, a las calles que parecían tener el mismo rumbo, los mismos nombres, el mismo silencio y a ese regaño de mi hermano porque estuvo buscándome por horas como un loco.Hacía mucho que no experimentaba ese sentimiento, pero esta vez es mucho más intenso porque nadie me ve a los ojos y me da una respuesta de en dónde está lo que busco.Un mes.Ha pasado un mes desde su desaparición oficial y sus pad
Narra Abigail.8 de Marzo del 2022.Más que divertido, sentir que estaba moviendo las piezas del juego a mi conveniencia, era placentero.Vi a la distancia a Logan partir con ella y me aferré a la cintura de Noah con fuerza.Él también debía caer pronto; pero yo me encargaría de forma inteligente de que ello ocurriera.Sentí que mi cuerpo se estremeció de la excitación que me causó ver la cara de Bibiana cuando Peitton se negó llevarla y la de Peitton cuando decidí irme con Noah. Siempre fue satisfactorio saber cómo podía mover hilos por hilos para que todo saliera a mi conveniencia. Como cuando movía mi látigo en la mazmorra; en los ojos de los sumisos podía mirar cómo el brillo de lujuria y placer se cambiaba por dolor, un dolor agudo que no solo salía por sus bocas en quejidos que me excitaban, sino que brotaba por sus pieles, tan mojados como mi feminidad por el espectáculo. No fui una dominatrix, porque mi principal motivo no fue darle el placer a la otra persona; yo solo buscaba
Lunes 23 de mayo de 2022.Narra Peitton.—¿Cómo ha estado Noah? —Le pregunto a su madre después de llevar unos minutos hablando mientras masajeo mi cien para intentar calmar mi dolor de cabeza.Estoy retardado y esta cola en el transito parece no querer avanzar. Pensé que los padres de Noah postergarían el divorcio por la situación que está pasando su hijo, pero por lo que me contó la señora me equivoqué. Tal parece que las cosas se complican cada vez más con su esposo.No debe ser fácil para mi amigo y debe estar sintiendo que su mundo se le está viniendo encima. Me causa ansiedad el silencio de la señora, necesito buscar un atajo para esquivar el tráfico porque voy tarde, pero sé que esta llamada es importante. Luego de un pesado suspiro por fin me responde:—No sé nada de él… —Mi pecho se oprime porque no puedo evitar que la angustia me invada —Justo te llamaba para preguntarte por él y…—No —Me apresuro a responder —Lo he llamado e ignora mis llamadas y las de nuestros amigos —Ci
Martes 24 de mayo de 2022.Narra Noah.Ahora cuando cierro los ojos lo único que puede mi mente ejecutar son imágenes consecutivas que me llevan desde el día Cero, hasta un número indescifrable.El día Cero fue cuando la vi llegar al salón en nuestra primaria; con una coleta alta, ojos saltones profundos, algo nerviosa pero al mismo tiempo determinante. Desde ese día jamás paré de verla.Y ahora ya no podré verla nunca más.El corazón se retuerce en los restos de mi piel ardiente. Estoy en el número indescifrable de dolor.La noche en la que Peitton me dijo aquello pensé que era una m*****a broma. Que, al final, Abigail sí había resultado tan malvada, al punto de jugar de esa forma conmigo para que la olvidase. Pero su cuerpo sin vida en esta urna que veo y no he dejado de tocar es lo más real y doloroso que mi tacto ha sentido.Tan real como el hecho de que sé que jamás tendré una vida después de esto.—Es hora —Mi madre me toma el hombro, yo la aparto con sutileza.La mirada que no
Jueves 18 de Agosto 2022.Narra Logan.—¿Has estado bien?Miro de reojo a Peitton quien conduce su gran auto mientras yo soy su acompañante.—Sí, ¿y tú?—Bien —Responde con un tono que no sé descifrar —¿Y Bibiana?—Si no sabes tú...—¿Ah? —Me mira con confusión —¿Qué quieres decir, amigo? —Sacude la cabeza —Se supone que ella es más... comunicativa contigo, pensé que habían estado en...—Pensaste mal.—Oh, entiendo.Hay silencio en el vehículo y solo quiero llegar a ver a Noah porque sinceramente desde que Peitton fue a verme al bar con uno de sus amigos nuevos no tenía ánimo alguno de charlar con él.La razón es sencilla. La noche en que nos reunió para saber sobre la muerte de Abigail, nos tomó por sorpresa a todos, pero en ese momento afectó mucho más a Noah, y a Bibiana, por alguna razón. Ella lucía perdida, confundida. Y por más que busqué sus ojos y quise consolarla, ella solo tuvo ojos para dirigirse al ojiverde.Me sentí... patético.Llegamos al club en donde la madre de Noah l
Domingo 09 de marzo 2025.Narra Logan.Fallen Roses se escucha en el fondo cuando mi mano aterriza en la nuca de Karim, la cual suelta un sonido tan agudo por sus labios finos que me eriza la piel.Ella quita con desespero mi delantal, acaricia mi amigo por encima de la ropa mirándome desde abajo con sus ojos oscuros, su cabello rubio teñido lo tengo ligado en mis dedos.Las luces se encienden y apagan al ritmo de la música y la gente brincando y gritando extasiada.Tomo sus labios cuando ella se estira hacia mí, sin evitar sentirme tan caliente. Y ella sin mas, en dos movimientos rápidos me tiene todo en su cavidad bucal.Echo la cabeza hacia atrás mientras mi mano libre se pone en puño por la adrenalina. Debo admitirlo, tengo unos tragos encima, algunos. Y no es la primera vez que Karim intenta que yo pierda las casillas hasta sentir que es normal tener sexo casual con una chica atractiva que además no tiene interés amoroso en mí.Jamás pensé que llegaría a estos extremos de habérmel
Martes 11 de marzo 2025.Narra Bibiana.Por más que intento mirar en los ojos de Logan ese brillo que siempre los iluminaba cuando me miraba, no lo encuentro. Su respuesta me dejó helada, no me la esperaba. Dos meses después que nuestra vida cambió repentinamente, Logan y yo pasábamos mucho tiempo juntos y nos volvimos más cercanos que antes, pero en este momento viendo cómo le sonríe a esta chica y cómo me miró para decirme que no me llevaría a casa, me doy cuenta que algo cambió.La ausencia de ese destello de brillo en sus ojos logra que mi cuerpo se descomponga, así como recodar todos los momentos que le hice un desplante por siempre elegir a Peitton.Odio que ese sentimiento de que soy desechable vuelva a mí, y es que así me hacía sentir la presencia de Abigail. Como quisiera evitar que los recuerdos vuelvan a mi mente, pero un escalofrío recorre mi cuerpo al regresar a esa fría noche.Conocía perfectamente a Peitton quien con solo mirarlo entrar sabía que nos diría una mala noti