Me había quedado con mi hija hasta que ella se quedó dormida.Aaron y yo no hemos hablado desde que fue a curarse pero necesito hacerlo.Sin vacilar dejé un beso sobre la frente de Alenka a pesar de que no quería alejarme de ella, necesitaba hacer algo con urgencia.Tomé un arma nueva de Aaron y al salir Colton me miró con preocupación. —¿A dónde vas?—¿Dónde están los hombres de Aaron?—Recibiendo nuevas órdenes, lo que pasó fue…—Lo sé. Guíame.—¿A dónde? —preguntó Colton con el ceño fruncido sin entender a qué me refería.—A donde están todos.—Eleri…—Colton, ¿Tengo que ordenarlo?Él bufó haciendo un gesto al otro hombre que estaba situado en nuestra puerta y después me guió a donde estaban todos.Aaron estaba tan furioso como lo estoy yo, creo que aún más.Ladraba órdenes hasta que notó que me acercaba tensándose enseguida.Antes de que tuviera tiempo de hablar lo hice yo misma.—¿Quién es Raymond? —gruñí la pregunta sintiendo la mirada de todos los hombres de Aaron puestas en m
Su mirada se oscureció mucho más observándome pero no tardó en obedecerme logrando que mi sonrisa se ampliara.Pasé mi lengua por mi labio inferior clavando mis ojos en su dureza antes de arrodillarme frente a él.Mis uñas se clavan adrede en sus poderosas piernas mientras que mi boca lo busca con lujuria. Arrastro mi lengua a lo largo de su polla capturando su sabor adictivo mientras gimo a su alrededor. Aaron toma mi pelo en una coleta y tira de mí para llevarlo más profundo.Lo tomo todo lo que puedo, sin embargo, me es difícil por lo grande que es aunque me excito al escucharlo gemir con deseo.—Bendita boca, princesa. Eso es, toma lo que te pertenece.Sus caderas bombearon con más fuerza mientras que yo lo lamo.Juego con él.Lo vuelvo completamente loco antes de perder yo misma la cabeza.De pronto lo suelto haciéndolo gruñir pero no voy demasiado lejos y Aaron lo sabe. Me coloco a horcajadas sobre sus piernas conduciéndolo con mi mano hacia mi cavidad húmeda.—Princesa…Mi espo
Sus dientes estaban apretados al mismo tiempo que observaba furioso a su prima.Ella comenzó a llorar aterrada.—Aaron, yo lo hice por…—¡No quiero que hables ahora que estoy jodidamente a punto de explotar por respeto a todo lo que has hecho por Alenka! Pero no voy a perdonarte esto Asia. Eleri, vamos.Di una última mirada a la mujer quien lloró con más fuerza.No quería que esto sucediera.Seguí a Aaron viendo como Stephen cerraba la puerta detrás de él. Espero que la consuele, de alguna manera sé que Asia no es mala persona y solo intentó proteger a Aaron y a Alenka.No olvidaré que ella fue la figura femenina que Ali vio, incluso si me había lastimado a mí, amó a mi hija.—Ella estaba protegiéndolos —susurré a Aaron quien se detuvo antes de girarse a mirarme con el ceño fruncido.Antes de que lo previera sus manos se cerraron alrededor de mis brazos haciéndome chocar contra su pecho.—¿Crees que necesitaba su protección? ¡Estoy harto de escuchar esa mierda, no soy un jodido hombre
Estábamos tan sumidos el uno en el otro que pronto fuimos sorprendidos por una risita dulce.Bajé la mirada encontrándome con los hermosos ojos de mi niña quien estaba cubriendo su boquita con ambas manos.—Están enamorados —señaló divertida.Miraba a su padre y a mí antes de echarnos los brazos al cuello juntándonos en un abrazo.—¡Beso! ¡Tienes que darle un beso a mi mamma, papà!—Alenka, ¿Qué sabes tú sobre besos? —gruñó su padre.Mi dulce niña se sonrojó pero valientemente le respondió a Aaron.—Los príncipes le dan besos a sus princesas, dijiste que mamá es la tuya, ¡Te escuché! Debes darle un beso de amor verdadero, papà. Cuando crezca yo también tendré un príncipe, ¿Verdad, mamma?Yo sonreí completamente derretida con su sonrisa y su voz dulce.—Seguro que sí…—¡Nunca! Eres muy pequeña para que pienses en esas cosas Alenka. Asia no debe dejarte ver televisión —gruñó una vez más, celoso.Está siendo lindo ver ese lado protector con nuestra niña.—¡Soy grande! Mamma sabe —dijo me
—Oh Dios… Sí, bebé.Aaron gruñó arremolinando su lengua a mi pezón mientras que sus empujes se hacían más fuertes.Simplemente no podíamos apartar las manos uno del otro.Esta necesidad cada día crece más.Después de llegar al orgasmo cierro mis ojos aferrándome a él.No quiero que nunca nos apartemos.Hemos estado demasiado tiempo separados.—Han crecido ¿No? —murmuró apreciativamente antes de dar un nuevo lametazo por mi seno.Yo siseé y sentí como mis mejillas se coloreaban inmediatamente. Tengo que encontrar la manera de decirle que estoy embarazada. Sé que no es el mejor momento pero definitivamente Aaron debe saberlo.—No creo… ¡Ah!Mi esposo muerde mi pecho antes de sonreír maliciosamente acostándose a mi lado para luego atraerme a su pecho.—Yo creo que sí. De todas maneras tus tetas siempre han sido mi maldito deleite, tan perfectas como tú.Baja la cabeza tomando mis labios en un beso que inmediatamente es correspondido.Por un rato hablamos de todo y nada.Con Aaron siemp
—¿Dónde pudo haber escondido a Scott? Dios… ¿De verdad Aaron lo hizo? Sabe lo que significa Scott para mí.Mis manos juegan nerviosas mientras camino por la casa.Sus hombres ahora me tienen más respeto.Podría utilizar eso a mi favor.Obviamente si Aaron tiene a Scott, él debe estar siendo resguardado con varios hombres.Por eso debo mantenerme alerta.Examino por donde paso con ojo clínico pero algo llama mi atención. Una de las sirvientas de la casa llevaba una bandeja de comida hacia lo que parecía ser el sótano.—¿Está allí?Me mordisqueo el labio inferior. Rápidamente me voy a la habitación que compartimos mientras pienso qué voy a hacer a continuación. De alguna manera sé que esto es real.—Debe tener alguna explicación, Aaron… él no haría nada para lastimarme. Ese audio debió ser manipulado de alguna manera.Sage me lo había enviado a mí como si quisiera que volviera a oírlo para salir de la burbuja en la que Aaron me ha metido.Pero no tengo la fuerza suficiente para volver
—¡Yo soy el mentiroso cuando tú estabas fingiendo para quitarme a mi hija! ¡¿Qué demonios está pasando por tu cabeza?! ¡¿Qué te dijo el hijo de puta de Sage?!Sorpresivamente Scott se metió entre nosotros empujando a Aaron con fuerza, sin embargo, apenas logró moverlo.—¡No le grites! ¡Y tú eres el hijo de puta, no mi hermano!Aaron lo ignoró con sus ojos aún sobre mí.Su cuerpo está totalmente tenso y en su mandíbula está temblando un músculo. —¿Qué te dijo?—Colton te dijo lo de Sage.—Eso no importa, ¿Qué. Te. Dijo? —puntuó furioso.Pero no más que yo.—No fue lo que dijo, fue lo que yo escuché —me volví para mirar a Scott—. Cariño, espérame afuera, hoy volverás a casa.Ignoré la tensión de Aaron cuando Scott salió a regañadientes dejándonos solos.Nuestros ojos se buscaron fulminantes. Bajo su mirada busqué el audio de Aaron reproduciéndolo, escuchando cada dolorosa palabras mientras que él fruncía el ceño.—¿Qué demonios? Ni siquiera recuerdo… si lo dije fue antes de que te tra
Aaron ya se había despedido de Alenka así que yo lo acompañé hasta el auto.Aún me siento angustiada por lo que vaya a pasar a continuación con él, sin embargo, finjo que estoy bien.—Deja de disculparte, ahora eres consciente que ni aunque quieras puedes deshacerte de mí.Él me dio una sonrisa burlona antes de guiñar un ojo.Mis brazos rodearon su cuello.—Por favor cuídate, espero que todo salga bien, te amo —susurré en su oído.Aaron abrazó mi cintura pegándome más a su cuerpo antes de besar mi cuello.—También te amo, princesa.Nos dimos un beso antes de que él se separara de mí.Mi corazón tembló al verlo irse.—Todo va a estar bien…*Necesitaba distraerme con algo mientras Aaron vuelve, estoy muy nerviosa.Veo a Scott sentado sobre la cama estudiando la habitación pensativo.Aaron le dio la libertad pero cuando iba a llamar a Sage se negó hasta que mi esposo volviera, no quería dejarme sola y realmente se lo agradezco.—Scott, ¿Qué fue lo que te dijo Aaron ayer?—¿Sobre qué? E