Mia
Quiero morderlo, besarlo, abrazarlo. La verdad que ya ni se que es lo que quiero con él en estos momentos, Erior es el tipo de hombre que no se consigue en cualquier lugar ni página web.
— Mia... — Murmura con la voz enronquecida mientras muerdo el lóbulo de su oreja derecha. Reparto besos por su cuello y cuando esta por subir mi vestido, alguien azota la puerta.
Me aparto de él y Erior, de inmediato se cubre su miembro con un libro.
— Oh, estaban ocupados. —Miro con disimulo a Sully, quien tiene la nariz y ojos rojos.
— ¿Estas bien? —Sacando el lado donde me provoca dec
EriorRespiro hondo. Ayudo a Mía a subir las escaleras mientras aún se encuentra en alguna especie de trance, con la mirada perdida y el rostro lleno de lágrimas.¿Qué estará pasando por esa cabeza en estos momentos?Doy una mirada de soslayo a la habitación en la que Sully se encerró en cuanto Mark perdió la cordura y se fue a los golpes conmigo.Suspiro.Nunca antes habíamos llegado tan lejos con las riñas, casi siempre terminábamos jugando a la play o bromeando sobre quien lloro como niña y se rindió, pero hoy no.Escucho como mi hermano arroja la puerta al salir molesto, imagino que se irá para alguna
—Si abres bien la boca, para la próxima te daré más comida.—Arrojó el plato sobre la cama con tan solo un pan a medias y una rebanada de queso, mientras que él se iba con uno repleto con pollo, arroz, queso y ensalada.Suspiré.Porque era lo únicoque podía hacer para retener las lágrimas y soportar el dolor ahí abajo.A papá no le interesaba yo, solo le importaba el dinero que ganaba conmigo y sus amigos. Detestaba a mamá por haberme abandonado aquí y llevarse solo a Allek. Debió dejarlo a él, al menos no le habría tocado nada de esto, puesto que nuestro progenitor siempre pensó que obtendría buenas ganancias con su primogénitosi traficaba droga en el colegio.— ¿Mia?Abrace con fuerza la almohada, no quería q
Erior.Por más que busco y busco en la internet miles de soluciones para toda esta basura que le sucede a Mia, no encuentro una que sea por completo creíble. Digo, hablan incluso de hipnoterapia y la verdad que no me gustaría que se sometiera a eso.Suspiro.Me siento inútil, no sé que hacer y ya estoy metido en este lío. No es que me moleste, para nada, pero si quiero tener algo que aportar más allá de palabras y gestos para la mujer que trae mi mundo de cabeza. Sully se ha ido a dormir con las puertas bajo seguro, Mark no responde los mensajes así que supongo dormirá afuera en alguna cama con otra mujer mientras su borrachera lo domine.
Mia.Un sonido me despierta. Erior está abrazándome como un koala, haciendo puchero.Se ve hermoso no lo puedo negar, pero no es el momento para admirarlo. Siento unas nauseas enorme, con calma quito su brazo de encima tomo mi teléfono que no para de sonar y en cuanto puedo corro al inodoro dejándolo salir todo.— Que asco... —Murmuro. No quiero despertar al bello durmiente, mi teléfono vuelve a sonar y noto que es Allek quien llama, cuelgo y entonces noto que Erick me ha dejado por lo menos unos treinta y dos mensajes de textos, veinte notas de voz al whatsapp y setenta y tres llamadas perdidas.—Que mierda le pasa a este loco.
Erior.Respiro hondo mientras sobo mi brazo, estoy sentado junto al balcón que da una hermosa vista de las afueras de los departamentos. Por suerte a Mia le dieron uno cerca, en caso de que quiera quitar un poco de estrés mirando algo tan bello, como lo es el parque a las afueras.Resoplo.Al menos está circulando la sangre por todo mi cuerpo de nuevo, no comprendo como una mujer que se ve tan elegante y frágil, puede ser más ruda que un hombre.Mañana tendré que retomar mi rutina nuevamente, no puedo seguir faltando a las clases o seré despedido, Sully llamó hace poco diciendo que se mudaría a un departamento donde compartir
Mia.Entro a la habitación mientras Erior se decide por tomar un poco de aire fresco luego de lo que le hizo la Detective, pero estoy muy segura que es para pasar la vergüenza de que un mujer mucho más pequeña y delicada lo haya derribado como si nada.Por otro lado Allek y ella salen luego de un asentimiento de cabeza entre ambos, algo raro, muy raro.Resoplo y comienzo a buscar entre mi ropa algo, lo que sea con tal de quitarme esta que ya esta sucia y me da la sensación de que yo lo estoy también.Busco una blusa de encajes negra y una falda de cuero, me dan ganas de vestirme como me gusta por unos momentos a ver sí así se me pasan todos
Erior.La cordura la perdí al apenas entrar a la habitación del hotel. No tuvimos que decir ni una palabra, ella me empujo sobre la cama y quitó mis pantalones. Yo la tome por la cintura y creo que ni cuenta se dio cuando ya estaba completamente desnuda, vibrando cada que pasaba la lengua por su anatomía, cada que mordía y lamía sus senos.Mia es una exquisitez que espero solo yo pueda disfrutar siempre, hasta el día de mi muerte.Gime y la arrojo sobre la cama, quito mi camisa y ella ríe tapando su cara. Le gusta lo que ve, pero le avergüenza que la vea desnuda. Excelente, eso me hace poner más duro.Muerdo su cuello, gime.&nb
Allek.13 de Abril de 1998.A los 10 años.—Allek cariño, camina rápido antes que trate de alcanzarnos. —Mamá apresuraba el paso, queríamos irnos lo más lejos posible de ese lugar y lo mejor para ello era largarse antes de que cambiara de opinión y tratara nuevamente de mantenernos encerrados en aquella cárcel a la que llamábamos casa.—Pero... Cleo... ¿Por qué no vino con nosotros? —Indagué. Mamá suspiro ante mi pregunta y su voz se quebró al responderme.—Ella... Sabes que siempre fue la favorita de tu papá— mintió, él no la toleraba cuando estaba feliz mucho menos cuando lloraba y le repetía miles de veces que era un estorbo para todos. —Le di a escoger y prefirió quedarse a acompañarlo a él, no te p