Atados de mano

Sin tener ni idea de lo que ocurría, los lindos chicos seguían bebiendo, en ese bar de mala muerte, propiedad de los Santisteban. Sin saber que vigilaban cada movimiento que ellos hacían, Jared Smith era muy audaz en todo, la espera había sido larga, pero será placentera la venganza.

Los Graham no podían encontrar a sus bellos amantes, era como si los hubiera tragado la tierra. No podían ir y presentarse como si nada a la casa de ellos, sería demasiada desvergüenza de su parte, los van a buscar después de desaparecer sin ninguna excusa, ni pensarlo. Se iban a volver locos así, pero todo era su culpa por no avisarles, ellos solo estaban molestos por su desaparición.

Totalmente desesperados, sin pistas de ellos, solo les quedaba recurrir a los más confiables, los guardaespaldas que ellos contrataron, los habían estado siguiendo en todo momento, pero no les habían dado noticias. Y como invocando al diablo, ellos los llamaron.

— Señor Graham, su esposa y cuñado están en un bar de los San
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo