Jonathan y Semoi revisaban las pruebas que Amanzi les entregó tan pronto como amaneció, en esos momentos Olar se preguntaba si los Mercenarios descansaban, él todavía se sentía adormilado mientras Kalule y Miller parecían no haber trasnochado en lo absoluto. Preparó más café y se los sirvió a los hombres que aceptaron con una sonrisa.

Junto a las fotografías y los documentos, se encontraban varios recibos y extractos bancarios, aunque varios estaban a nombre de Camila Jilguero, lo cierto es que otros demostraban que el dinero entró directamente a las cuentas de Enrik saliendo después en varios pagos de material sin especificar.

—La idea es encontrar el origen de los ingresos y desglosar esos pagos, de igual manera, Enrik debe contarte bien que fue lo de Alicia Arwen, estamos hablando de secuestro, un crimen que le dará mínimo 30 años.

Jonathan se sobó los ojos, no era uno, ese era el que daba comienzo a la lista, ya que debía agregarle que robó un niño, sobornó a los guardias de la pr