II.-—Definitivamente estamos en problemas —dijo Haniel, observando el desastre frente a ellos con una mezcla de resignación y nerviosismo.—¿Problemas? —replicó Dantalian, con una vena palpitando en su cuello y los ojos encendidos de sorpresa—. ¡¿Problemas?! ¡Vamos a tener mucho más que problemas, Haniel! ¡Mi papá nos matará!Haniel soltó un suspiro teatral, desestimando las preocupaciones de su Dantalian con un movimiento de la mano.—Ay, por favor. No le tengo miedo a mi querido y muy estúpido hermano —dijo con una sonrisa socarrona—. Gritará, claro, probablemente como una gallina a la que estan matando. Pero nada que unos buenos tapones de oídos no solucionen.Dantalian emitió un gemido casi lastimero, hundiendo el rostro en sus manos.—No sé por qué sigo dejándome arrastrar a tus locuras… —murmuró, mirando el pantano frente a ellos con una mezcla de desolación y horror—. ¡¿Por qué me hago esto a mí mismo?!—No seas melodramático —gruñó Haniel, cruzándose de brazos—. Además, me se
—¿Alguno de ustedes ha sabido algo de mi tío Gunnar? —preguntó Dantalian mientras llevaba una tostada a la boca, con el ceño ligeramente fruncido que delataba su preocupación.—Ese gitano debe estar en alguna cueva de una ciudad mágica perdida, intentando robarse alguna criatura que le dé más poder o algo por el estilo —gruñó Bael, revisando su dispositivo del escuadrón real. Apenas levantó la vista de la pantalla mientras hablaba.Jessy, que estaba atenta a que Gabriel y Andrómeda terminaran su avena, levantó la cabeza al escuchar la mención de Gunnar.—Ahora que lo pienso, no recibo respuestas suyas desde hace un par de días —admitió, observando de reojo a Dantalian—. Pero ya sabes cómo es tu tío Gunnar, cariño. Es un aventurero sin remedio. Seguramente aparecerá en cualquier momento con alguna historia fantástica que contar.Dantalian no se tranquilizó con las palabras de su madre. Apretó los labios y se terminó su tostada de un gran mordisco.—Siempre responde mis mensajes —insist
—Uy, creo que fue mala idea saltarnos las clases hoy —dijo Haniel, apagando su cigarro contra la roca y guardando la cajetilla en el bolsillo.—¿Había algún examen o algo así? —preguntó Dantalian entre bocados, mientras terminaba uno de los sándwiches que su Haniel había traído.—No, nada de eso. Pero… mi querido hermano Bael me acaba de mandar un mensaje. —Haniel levantó su celular, mostrándole la pantalla con un mensaje breve pero contundente:"Estás muerto, maldito renacuajo."Dantalian gruñó, rodando los ojos.—Qué original.En ese momento, su propio celular vibró en su bolsillo. Sacó el móvil para ver un mensaje de Bael."¿Dónde estás?"El tono autoritario de esas dos palabras fue suficiente para encender la rabia en Dantalian. Sin pensarlo, apretó el dispositivo con tanta fuerza que lo destruyó, dejando pedazos de cristal y plástico en su mano.—¡No puede dejarme solo un maldito día! —exclamó, apretando los puños mientras su voz se volvía más grave, un eco de la tensión acumulad
—¡¿Qué le hicieron a ese pobre perrito?! —exclamó Dylan, arrebatando al perro de los brazos de Dantalian.—Lo encontramos herido en el bosque —explicó Dantalian, siguiéndolo con preocupación—. No sé cómo, pero estaba atrapado debajo de un árbol tío, vinimos para que nos ayudes.—No veníamos aquí desde que éramos niños —comentó Haniel, mientras ambos seguían a Dylan hasta el sótano, donde tenía su laboratorio—. ¿No pusiste refuerzos mágicos y tecnológicos especiales para nosotros?—Sentí que venían desde kilómetros de distancia —respondió Dylan como si fuera algo obvio—. Era horario de escuela y estaban viniendo a pie en vez de teletransportarse. Claramente necesitaban ayuda.—Pensé que con la edad tus habilidades mágicas se habrían deteriorado tío Dylan —replicó Haniel con una sonrisa burlona.Dantalian le lanzó una mirada fulminante. No era momento para provocaciones, especialmente cuando su tío Dylan estaba ayudándolos.—Los hechiceros acumulamos experiencia mágica con los años. Nue
—¡Vamos, Peter! —exclamó Dantalian entusiasmado.Lanzó la pelota no demasiado fuerte mientras Peter, el perro que habían adoptado y que había nombrado así por su héroe de cómic favorito, Peter Parker, corría tras ella lleno de energía, con la lengua fuera y el pelaje brillante bajo el sol.—Es mi cumpleaños —gruñó Haniel, cruzándose de brazos—. ¿Por qué estamos jugando con Peter en vez de ir de compras para mi fiesta de cumpleaños?—Porque necesita quemar toda esa energía acumulada —respondió Dantalian con un tono paciente—. Estuvo descansando dos semanas para recuperarse. Mi tío Dylan dijo que debía estimular sus músculos.Haniel gruñó, revisando su teléfono con aire malhumorado. Dantalian lo observó de reojo, conteniendo una sonrisa. La verdad era que toda su familia los esperaba en el palacio para una fiesta familiar sorpresa, desde sus tíos hasta sus abuelos.Por la noche habría otra celebración, esta vez con sus compañeros de la escuela. No porque todos adoraran a Haniel, sino po
—¿Estás viendo lo mismo que yo? —preguntó Ted, sin apartar la mirada de la escena frente a ellos.—Puede que hayamos heredado la miopía de hombres lobo de los Dickens, pero esta vez veo perfectamente —respondió Thomas—. Y aun así, no deja de sorprenderme.—No es la gran cosa —dijo Dantalian con una sonrisa, tomando un sorbo de su trago en un vaso de plástico—. Haniel suele ponerse muy divertido cuando toma.—Sí, pero esto es extremo —Bruno bebió su propio trago de un solo golpe—. No sabía que Haniel sabía bailar la "danza del vientre". Míralo, parece una chica moviendo las caderas así.Haniel se había subido a una mesa y ahora movía las caderas con una destreza asombrosa. La multitud en la fiesta de su cumpleaños estalló en gritos de euforia, animándolo como si fuera la estrella de la noche.—Mañana despertará y no recordará que puede bailar así —comentó Dantalian con diversión mientras sacaba su celular para empezar a grabarlo—. Pero me burlaré de él durante meses.Varias chicas, inc
—¿Sabían que su tío Matt construyó esa cabaña con sus propias manos? —Liam los miraba con expresión severa, enfundado en su pijama, que curiosamente tenía dibujos de ovejas saltando vallas—. ¡Con sus propias manos! Y ustedes la destruyeron por completo… —Hizo una pausa dramática, llevándose una mano a la frente—. ¡Ni siquiera nosotros logramos algo así en nuestra juventud!—¿Nos está reprendiendo o nos está felicitando? —susurró Ted a Thomas, sus ojos brillando con diversión reprimida.—Creo que es una mezcla de los dos —respondió Thomas, apretando los labios para no sonreír.Dantalian permanecía inmóvil, sentado en el sofá sin saber cómo había llegado hasta allí. Después de la explosión, su mente se había nublado. Recordaba fragmentos, gritos, el rostro pálido de Haniel, la mirada furiosa de su padre. Todo era borroso, como un mal sueño.Alzó la vista y se encontró con Haniel, que estaba sentado en el otro extremo de la sala, con un ojo morado e hinchado. Se veía tan mal que incluso
Este libro es la quinta y ultima parte de la saga de Alfa King.Este libro está en proceso y se actualizara semanalmente. ***—¡¿Estás bien?! —Jess preguntó pasmada.Gunnar cayó en el suelo lleno de nieve.—Si, si… —el intento sonreír para que Jess no se preocupara—, solo es el desgaste mágico, he estado teletransportándome demasiado, no te preocupes.Jess ayudó a Gunnar a ponerse de pie.—Debemos darnos prisa —dijo Gunnar—, el alfa de esta manada nos espera.Jess vio ante sí lo que parecía un pequeño pueblo en medio de la nada, con imponentes montañas alrededor cubiertas de nieve.—¿Es aquí donde nadie nos encontrará?—Es aquí donde estarás a salvo.Seis años después….La nieve hacía difícil caminar, el blanco cubría todos los árboles y el camino. Se sujetó mejor el abrigo, algo remendado y desgastado, pero la abrigaba bien. El frío soplaba en su rostro y el cielo se veía despejado a pesar de que había pronosticado una tormenta de nieve.Tenía las manos entumecidas y cansadas. Pasab