En el avión, Sofía le contó a Aby que estaba embarazada y que también serían gemelos, las amigas se abrazaron felices, nadie notó el pequeño brillo de tristeza en las pupilas avioletadas de Abigail, sus heridas internas sanaría pero no hoy, con el tiempo estaba segura de poder hacerloLa llegada a México fue tranquila, la niñera cargaba a Abelardo cuando llegaron, Aby de inmediato lo alzó en sus brazos ¡Abigail, no cargues al niño! . - se escuchó a Sasha decir, no quería que su mujer hiciera esfuerzos que no deberíaEl niño volteó a ver a su padre quién estaba golpeado y con restos de sangre en el rostro, volteó a ver a su madre y lloró haciendo pucheros, parecía que lloraba al verlo tan malSasha avanzó y se lo quitó de las manos a Aby. - campeón, soy papá, me caí cuándo me baje del coche, mírame, mamá me curóEl niño pasó sus regordetas manos por la cara del mafioso griego. - ¡papá!. - llamó a su SashaSi campeón, e vuelto y e traído a mami conmigo, estamos juntos de nuevo, tal com
En la clínica privada de la familia Diamantis, Sofía daba a luz, los gemelos no bajaron lo suficiente y tuvieron que practicarle una cesárea de emergencia, o de lo contrario los bebés se ahogaríanFranco estaba que se jalaba los cabellos, su hijos no pudieron nacer de parto normal y estaban sufriendo en el vientre de su madre¡Si mis hijos mueren, vayan eligiendo el color de su ataúd, por qué ustedes los van a acompañar al más allá!El mafioso amenazaba a los médicos, asustados los galenos, hacían todo lo posible para que los bebés nacieran con vida, tenían familia y no deseaban morir a manos del despiadado jefe de seguridad, Franco ColetoA Franco lo sacaron del quirófano, los doctores necesitaban que los dejaran trabajar, con él ahí, armado, no podían ni concentrarseCálmate Franco, deja que los doctores haga. su trabajo, los bebés van a estar bien ya verás. - Sasha acompañaba a su amigo y trataba de tranquilizarlo, sabía cuánta ilusión le hacía tener a sus hijos en sus brazos, con é
UNA SEMANA DESPUÉSEn la habitación conyugal, en la mansión Diamantis, Abigail trataba de dormir recargada en la cabecera de la cama, tenía dos almohadas en la espalda y otra abrazada, la barriga de embarazada que tenía era enorme, apenas y podía moverseSasha y Aby, después de casarse, habían regresado a vivir a Grecia, ahí estaba el imperio que el gringo manejaba, al mafioso le costó convencerla pero al final lo logróLos bebés de Franco y Sofía habían nacido hacía una semana y los de Aby no habían querido salirAby, ¿no puedes dormir verdad?. - el mafioso se incorporó de la cama para hablar con su mujerNo, los bebés no me dejan, no se por que no han querido salir de mi barriga, creo que se sienten muy agusto aquí dentro, pero me están matandoNo te desesperes cariño, saldrán cuándo sea el momento. - Sasha, era amoroso con Aby, no se molestó incluso en los días más difíciles del embarazo, cuándo Abigail se encontraba de un humor de los mil diablos, el mafioso se preguntaba ¿cómo se
VEINTIDÓS AÑOS DESPUÉSEn la lujosa mansión Diamantis festejaban un evento muy importante, éste era el día en el que el poderoso mafioso, Sasha Diamantis, le entregaba su cargo a Abelardo, su querido hijo, al cual preparó dura y de forma ardua para que ocupará su lugar al crecer, por fin había llegado el momentoEn la parte más apartada del jardín, Dasha y Alejandro se daban un tierno y apasionado beso, se habían enamorado desde que cumplieron los dieciocho años, solo que las herederas Diamantis fueron enviadas a estudiar al extranjero mientras que los gemelos Coleto, Alejandro y Sebastián, fueron enviados una escuela a Rusia, ahí recibieron la preparación militar que necesitarían para ser los jefes de seguridad de Abelardo Diamantis, quién tomaría el cargo de cabeza de la familia griega ese día DASHA, no podemos seguir así, queriendo nos a escondidas, yo te amo y quiero que seas mi esposaLo sé, Alejandro, pero sabemos cómo mi padre es de estricto. - Dasha no quiso hablarle a Alejand
En la pista de baile, los invitados disfrutaban de bailar con sus damas, la lujosa fiesta estaba muy bien amenizada, Aberlado tomó a la joven italiana de la cintura y ella subió sus manos hasta los anchos hombres del griego-mexicanoDios, estoy tan nerviosa, espero que Abelardo no lo noté demasiado, es que nunca me esperé que me invitara a bailarAbelardo era un experto bailador, lo había heredado de su padre, era como si la historia de Sasha y Abigail se estuviera repitiendo, amor a primera vista y un baile entre mafias, así fue cómo se conocieron y así fue cómo se enamoraron, desde ese día Sasha cortejó a Abigail y no se detuvo hasta casarse con ellaHola, soy Abelardo, ¿me gustaría saber tu nombre? solo sé que eres la hija de Lukani GambinoOh, soy Antonella, Antonella Lukani, e venido a la ceremonia de cambio de cabeza de familia de la mafia griega, en su representaciónLa agradable música seguía, la orquesta tocaba alto, Abelardo llevaba con ritmo y cadencia los pasos de Antonell
El ambiente se volvió frío e incómodo, Jonathan no era un mafioso fácil de persuadir, le había gustado Antonella más de lo que quería reconocer, no se podía limitar a qué se la quitarán de las manos sin hacer nadaNo estamos, yo la abordé primero.- dijo Jhon con los dientes apretados. - me gusta, ambos somos hombres de mafia, no me limitarás a solo verte mientras la conquistas, los dos deberíamos tener las mismas oportunidades, ¿o qué? ¿tienes miedo de que sea yo el que la conquiste y te quedes con las ganas de llevarla a tu cama?¡Creo que fui claro, Jonathan, no la quiero para llevarla a la cama, la quiero para que sea mi mujer, pero... si quieres ir contra mí, no te voy a quitar la intención, solo te advierto, en el momento en que la haga mía si te le acercas a intentar seducirla... voy a matarte, a lo que es mío nadie lo toca, estás avisado!Dicho ésto, Aberlado, dirigió sus pasos a dónde la italiana lo esperaba y se la llevó, el mafioso la afianzó con su brazo en la diminuta cint
Los gemelos Coleto estaban más que desvelados cuidando de su jefe, cada quien estaba sumido en sus pensamientos , Alejandro en cómo le diría a su padrino que estaba enamorado de Dasha y Sebastián en como recuperar a Dariana, habían peleado pero la amaba, la amaba más que a nadaEn la habitación del lujoso hotel, Abelardo despertó como muchas veces había dejado a las mujeres con las que pasaba la noche, el mafioso estaba desnudo, follado y abandonado, la mafiosa italiana no estaba por ningún lugar, de había marchado muy tempranoAbelardo no podía creér que lo hubiera dejado así, decir que la acción de Antonella lo había puesto de mal humor, era poco, se sentía humillado, cómo una puta a la cual usan y desechanRápidamente se ducho y se vistió, la costosa ropa por supuesto que estaba arrugada, se había levantado con el pie izquierdo al parecerAlejandro y Santiago lo seguían esperando cerca del auto, estuvieron hablando y fumando cigarrillos mientras su jefe salía de su alocada nocheAb
En el ambiente se percibía incomodidad, todo estaba muy tenso, conocer la verdad de lo que pasó con sus padres y Lukani Gambino, solo vino a complicar las cosas, Abelardo estaba entre dos caminos a seguir, dejaba de complicarse y se olvidaba de Antonella o pasaba por encima del mundo entero para tenerla a su ladoAlejandro Coleto se había quedado de ver en una cafetería que quedaba cerca de la mansión, con Dasha, ella le había enviado un mensaje para citarlo, había dicho que quería decirle algo importanteEl apuesto mafioso llegó al discreto lugar, Dasha ya lo esperaba mientras bebía de su capuchino, ella veía la gente pasar por la ventana, estaba ansiosa y... un poco nerviosaHola princesa, Alejandro dió un suave beso a la joven Diamantis para después tomar asiento frente a ella, se le veía un poco fastidiado ese día¿Todo bien en el trabajo?. - preguntó Dasha al verlo asíSi, todo bien, es solo que Abelardo está un poco descontrolado hoy, anda de un humor de los mil diablosMmm... de