Los mafiosos griegos se quedaron un mes más en la hacienda Montesinos, estaban preparando sus bodas con la hermosa Abigail y con la bella SofíaFranco le había pedido matrimonio con un anillo de diamantes a Sofi, anillo que antes de morir su madre le entregó para que se lo diera a la mujer de su vida, el nunca pensó que llegaría el día de sentir el deseo de ponérselo en el dedo a una mujer, Franco creyó que en esta vida no se enamoraría Abigail y Sofía, estaban vueltas locas con tanto que hacer para el día de la boda, Aby irradiaba felicidad, pensaba que por fin todo lo que sufrió en el pasado cuándo perdió a su gran amor, había quedado atrás, amaba a Sasha con todo su corazón, él era su alma gemelaSofía no dejaba de sonreír, Franco la hacía muy feliz, el callado y frío mafioso había cambiado su actitud con ella por completo, era cariñoso y atento, la cuidaba cómo si fuera ella su mayor tesoroDespués de comer, Sasha invitó a Abigail a salir a cabalgar, está vez no llevaron dos caba
Faltaban escasos dos días para la gran boda, en la hacienda todo era un caos, gente viniendo de aquí para allá acomodando todo, los comentarios no se hicieron esperarEMPLEADOS :Ojalá ahora sí la señorita de case, ya vez en la boda anterior el padre no alcanzó a decir marido y mujer cuándo el padre de Abelardito la secuestróSi, pero por algo pasan las cosas, la señorita Abigail, se ve muy enamorada del padre de su hijoEl Mafioso Sasha, Abigail, Abelardito y Franco con sus hombres, salieron a la ciudad de Culiacán a qué Aby tuviera la consulta con un ginecólogo, Sasha estaba ansioso por ver el ultrasonido y escuchar el corazón de sus hijos, a pesar de tener a Abelardito, nunca había vivido la experiencia de estar presente en esos momentos especialesEl pequeño Abelardo, sonreía feliz al lado de sus padres, cantaba una canción junto a Sasha desde su sillita, Abigail los observaba encantada, la familia de tres de había vuelto muy unidaYa en el consultorio, la asistente del doctor los
Sasha y Franco se activaron en el momento, ya no eran los futuros esposos de las hermosas jóvenes mexicanas, ahora eran los temibles y despiadados mafiosos que iban defender su vida por encima de todoEl italiano Donato ahora sí venía con todo, su objetivo era derrotar a Franco como jefe de seguridad y mano derecha del jefe, no se olvidaba de la sonrisa sarcástica y burlesca que el mafioso griego le dejó el día de la boda fallida de su jefeLas armas de detonaron, Franco defendía con todo a su jefe, estaba siendo demasiado audaz en el enfrentamiento, llevaban hombres capaces pero no sería suficiente, los italianos los superaban en número, realmente ésta vez la tenían pérdidaSasha estaba en posición, su prioridad era defender a su mujer y a su hijo, tendrían que pasar por sobre su cadáver para apartarlos de su ladoCómo era de esperarse, cuando Sasha volteó a buscar a Franco, el mano derecha estaba herido de un brazo, pero aún así no dejaba de disparar, estaba tratando de evitar que lo
Lukani subió a su auto a Abigail, la joven Montesinos era valiente, pero aún así derramaba en silencio lágrimas que le quemaban el rostro, separarse de su hijo y del hombre que amaba no era sencillo para ella, lo único que la tranquilizaba era saberlos vivos y a salvoEl médico curó las heridas de los dos mafiosos, Franco estaba que se lo llevaba el diablo por que había perdido contra su archirrival, el jefe de seguridad italiano, Donato, ese bastardo se había reído en su cara, lo había humillado y eso se lo iba a cobrar con su vidaSasha estaba siendo atendido de la pierna, le dolía como los mil demonios, cada que siseaba o gritaba un poco por la curación, el pequeño Abelardito lo tomaba del rostro y le hablaba, el niño estaba más que pendiente de lo que le estaban haciendo a su padre, no estando Abigail, el pequeño no quiso separarse de su padre Una vez vendado, el doctor le recomendó reposo, Sasha lo último que haría sería reposar, mientras Su amada Aby estuviera en manos del perro
En el auto el ambiente era insoportable Lukani solo desprendía frialdad, Abigail dolor y tristeza, la furia del mafioso se elevaba cada que la veía, con sus dedos levantó el rostro de Aby¿Por qué lloras? ¿te duele tanto separarte del bastardo griego que te hizo tanto daño?Abigail no le respondió, solo lo miró, entendía que estuviera tan molesto pero... ¿por qué llegar a atacarlos e intentar matar a Sasha? ¿no podía solamente dejarlos ir?Lukani no perdió el tiempo, de inmediato subió a Abigail a un avión con destino a Italia, ella era su prometida, lo que seguía era casarse, por qué ella se casaría con él y no con el hijo de puta de Sasha DiamantisEn el vuelo, Abigail permaneció sentada en el asiento donde Lukani la puso, ahí durmió bastante, el embarazo la tenía somnolienta todo el tiempo, además así evitaba hablar con Lukani En la hacienda Montesinos, apenas amaneció, Franco llevó a Sofía al médico, la joven rubia se negaba pero el mafioso no dejaría la salud de su mujer al azar,
La temperatura de la habitación había caído a bajo cero, Abigail no tenía duda de sus sentimientos, pero había llegado a querer a Lukani, cómo no hacerlo si era un hombre extraordinario, era solo que su corazón ya tenía dueño, su cuerpo y su alma le pertenecían a ese mafioso griego que la enloquecia con sus caricias, que la hechizaba con su mirada marrón claroYo... lo siento... las cosas han cambiado, llegué a quererte Lukani, eres un hombre excepcional, uno de los mejores que e conocido en mi vida, pero...¿Pero qué? ¿si soy tan excepcional cómo dices? ¡¿que carajos me falta para qué me ames?!¡No te hace falta nada, eres perfecto a ti manera, el mejor amigo que pude tener! es solo que... mí corazón ya tenía dueño cuándo tú llegaste a mi vida, lo amo, Lukani, esa es la verdad, nunca pude arrancarlo de mi corazón, no te aferres a mí, yo no soy tuya¿Cómo le hago entender a mi corazón que no eres mía? ¡explícamelo! por qué lo único que hace es pedir verte, me pide que te tenga cerca d
Fos días después, había llegado el momento, Sasha lo había preparado todo minuciosamente, cada detalle estaba pensado meticulosamente, no iba a poner en riesgo la vida de Abigail y por lucifer que ya no podía con la desesperación de ir por su mujer a Italia, haría pedazos el país si así fuera necesarioEn la bella Italia, Aby se encontraba encerrada en el baño, lo que desayunó no le cayó bien en el estómago, lo estaba devolviendo todo, Lukani entró y al escucharla tocó la puertaAbigail, ¿estás bien? abre la puerta, déjame verte¡Lárgate Lukani! solo me cayó mal el desayuno, no te necesito¡Ábreme con un demonio! ¡si no lo haces por tu cuenta, traeré la llave maestra!Aby le bajó al sanitario y quitó el seguro para abrir. - no tengo nada, ¿que demonios quieres?. - la mirada de desprecio y odio de Abigail no pasó desapercibida por el italiano¿No te estás alimentando bien? ¿Por qué estás tan pálida?¡Vamos, te llevaré al médico, esto no puede ser normal!¡No! ya te dije que no es neces
Para Abigail el tiempo se estaba acabando, apenas amaneciera, el mafioso Lukani se la llevaría a una clínica privada para practicarle un aborto, la joven mafiosa se sentía desesperada, no podía permitir que el italiano se lo sacara, ella ya amaba a sus hijos con todos su serSasha ya estaba volando rumbo a Italia, tres aviones privados más llevaban a sus hombres y el gran arsenal que llevaba para volarle la cabeza a todo aquel que se interpusiera en su camino, la familia Montesinos le había facilitado si avión y el había puesto dos más de su propiedadLukani permanecia en su despacho, ya le había bajado medio líquido a la botella de Whisky que tenía guardada en un cajón de su escritorio, su mente era un terrible caos, no quería hacerle daño a la mujer que amaba, pero era un mafioso, desde niño fue entrenado para obtener lo que deseaba aunque lo tuviera que arrebatar, nunca se detenía a pensar en los sentimientos de los demás, eso salía sobrandoLa noche se hizo eterna para todos, Abiga