En el paraíso Después de que el señor Cavill cerrase aquella puerta, yo aún tarde un poco más en reaccionar de mi estupefacción. Me había quedado con el ánimo picado por aquella situación en la que él me había llevado hasta el extremo, dejándome con las ganas de seguir en aquella misión exploratoria, pues aunque ya para ese punto había tenido la oportunidad de indagar experiencias en el ámbito sexual al lado del señor Cavill, la realidad era que en casi todas las ocasiones me había tocado asumir un rol pasivo que no me había permitido poder explorar más allá de lo que él propiciaba y dictaba, pero yo también tenía esas ansias de explorar y conocer. No solo mis ojos tenían la necesidad de saciarse con la magistral visión de aquel cuerpo escultural, sino que también mis manos e incluso mis labios y lengua, querían explorar cada rincón de él para disfrutarle en todo el sentido de la expresión. Lamentablemente por lo pronto debía contentarme con atender las que eran sus órdenes, que no m
Apartados del mundo― ¡Uh! ¡Esto no me agrada! ―sentencié de manera inmediata, apenas aquel bocadillo tocó la superficie de mi lengua. Era un sabor demasiado penetrante como para que mis papilas gustativas pudiesen adaptarse y terminar aceptando esa complexión y textura, sencillamente no era algo que yo fuese a poder degustar.― ¿No te gustó? ―preguntó el señor Cavill con un gesto extrañado mientras salivaba a la boca un de aquellos bocadillos con apariencia gomosa.―No, lo siento… no quiero ser grosera, pero de verdad no es de mi agrado―contesté después de haberme ocupado en sacar de mi boca aquel trozo que me provocaba repulsión y desagrado. La mirada que el señor Cavill me dedicó entonces me dejó bastante preocupada, pues, sabía que él era literalmente una caja de sorpresas y no tenía forma de anticipar cuál podía ser su reacción en ese preciso instante.Él se ocupó en seleccionar un tipo de bocadillo que parecía bañado por una especie de salsa viscosa y entonces se acercó a mí sos
Juego placenteroAquella situación en la cual el señor Cavill se había explayado de manera portentosa en dejar en claro su capacidad de recurrir a su arsenal de artimañas de dominio y autoridad, sirvió para dejar en claro que sus intenciones de dominio aún seguían estando en vigencia más que nunca. La mirada del hombre, cuya barba parecía ahora ser más varonil que nunca, me increpaba a darle una mordida al trozo de pizza que él sostenía frente a mí. De todas las formas en la que podía imaginarme comiendo pizza, aquella era la más sensual que podía esperar, pues sus manos poderosas habían sujetado mi cuerpo tomándome por la cintura para mantenerme frente a él mientras el trozo de harina cubierto de queso esperaba por mí. Mis dientes se hincaron en el grasoso trozo de pizza que al entrar en mi boca se sintió bastante agradable como una forma de responder de manera altanera a lo que eran las imposiciones dietéticas del señor Cavill. Así pude deleitar mi paladar con los sabores del ques
Contigo o sin ti.El señor Cavill se quedó mudo mientras su cuerpo tenso expresaba la indecisión de su mente. Aquella última petición que le había hecho casi que de manera inconsciente parecía haber hecho mella en el ánimo y la disposición del altanero CEO que de pronto se mostraba incapaz de disimular los efectos que tenían mis palabras sobre él. Temerosa de que su decisión terminara por decantarse por otras vías, yo me apresuré para acercarme a donde él se encontraba y dejando de lado todo recato o pudor me entregue en sus brazos rodeándole con un abrazo tierno y desvergonzado.Nuestros cuerpos casi desnudos y con la piel al descubierto lograron tocarse de manera que las sensaciones se convirtieron en un canal de comunicaciones más que eficiente. A cada roce de mis dedos la piel de su espalda se erizaba, y aunque él no me abrazaba aún, por los menos con sentir el latido de su corazón en mi rostro me decía que todo estaría bien mientras que estuviésemos juntos en esa cercanía.―Debe
En sus brazosMi cuerpo despertó sumergiéndose en la cálida humedad de aquel inmenso repositorio de agua límpida y refrescante que me permitió disipar las dudas y los temores cuando me descubrí del todo cubierta por el líquido traslúcido. Los colores y los sonidos se deformaron cuando mis órganos sensoriales quedaron completamente sumergidos en aquel momento. Una sensación inmejorable que me permitió sentirme llena de vida y de emoción, pero sobre todo de libertad, pues había podido accionar sin prestar mayor atención a cuestiones de atención o impedimentos, pues ni siquiera el no saber nadar tuvo algo que ver en mi decisión. Mis pies por instinto buscaron asidero donde poder afincarse para volver a flote, fue entonces cuando me percate que no estaba ni cerca de poder alcanzar una superficie para estar a salvo. Con un estallido de inseguridad, comenzando a aflorar en lo profundo de mí ser, comencé a moverme para resolver mi predicamento, pero lo único que conseguí fue darme cuenta de
Corazón descubierto.El señor Cavill comenzó a reír a pesar de que mi manera de expresarme había rallado en los límites de la insolencia y el irrespeto. Podía entender que las palabras del señor Cavill solo lograban dejar en claro que su corazón estaba sometido por una presión sofocante y difícil. Ahora que yo me había atrevido a navegar en aguas profundas y turbulentas sin siquiera saber nadar, no tenía otro camino a seguir más que continuar hacia adelante con la determinación de conseguir un puerto de llegada. Para ese punto el retorno definitivamente ya no era una opción.―Sabes que debería castigarte por esa manera de hablarme ―sentenció el señor Cavill mirando a la distancia los jardines que quedaban detrás de la piscina. Quedaba en evidencia que una fibra de lo profundo de su corazón había quedado al descubierto cuando él se abrió para dejar salir aquellas explicaciones.―Y usted saber bien que yo disfrutaré ese castigo que me imponga ―le aseguré sin resentir mis determinaciones
En los dominios de su serAtendiendo la petición del señor Cavill, me dejé llevar en ese trance de relación y desenfado que me permitió encontrarme disfrutando de manera intensa, lo que era una oportunidad inmejorable para desconectarme de mis problemas y preocupaciones. Desde luego que seguía estando apremiada por la pensión de no saber si Ana había logrado obtener alguna información sobre mi hermano y todavía seguía sin tener una respuesta esclarecedora sobre lo que había sido ese altercado aterrador de la noche anterior. Cualquier persona medianamente cuerda y sensata, bien que podía reclamarme el estar allí recostada a la sombra de ese toldo mientras me relajaba, viendo el cuerpo descomunal del señor Cavill que me servía como espectáculo inmejorable.Mi deseo me conminaba a querer seguir en el agua para estar cerca del señor Cavill, pero mi inexperiencia en las destrezas acuáticas habían terminado estropeando las buenas intenciones de él al querer enseñarme a nadar, por lo que al
Conversaciones vespertinas.No cabía en mí de la ansiedad y la emoción que me ocasionaba el solo recordar las palabras del señor Cavill. Aquello distaba mucho de lo que pude imaginarme, al esbozar en mi mente ese trance de locura. Cuando apenas tenía una idea poco clara de lo que podía resultar de todo aquello, cuando solo me movía por lo que eran tenues insinuaciones de una pasión que ahora me gobernaba y me dejaba en claro que mi corazón estaba completamente prendado de ese hombre de ojos azules y sonrisa embriagante. No era cuestión de dinero, desde hace mucho tiempo que había dejado de serlo. Solo estaba dispuesta a recibir ese pago para poder ayudar a mi hermano a huir de aquel infierno, pero si de mí hubiese dependido el asunto a esas alturas, ya hubiese renunciado a cualquier retribución monetaria y a cambio hubiese pedido que el señor Cavill se revelara ante mí con todo su ser al descubierto para conocerlo y acercarme a su corazón de manera profunda.Si era amor o no, para ese