Su hermana Selene estaba totalmente al servicio de la chica llamada Yareny, parece que al fin hace mucho más evidente y explicito su amor e interés en la chica, que después de saber los motivos por los cuales Selene desapareció un tiempo, la perdono y ahora están juntas casi todo el tiempo, aunque el perdón vino acompañado de mucha atención por parte de su hermana que está rendida a los pies de la asistente de su Julieta.
También observo como Rosario ve con ojitos de borrega enamorada a Antonio, lo ve como héroe, de repente le dan celos de amigo, aunque en el fondo le gustaría que esos dos quedarán juntos así él tendría una oportunidad con Julieta. Tal vez, cuando encontrarán a Julieta y ésta pesadilla termine, él tomaría el papel de cupido y una a este par Rosario-Antonio, En su mente cavilaba que eso podría ayudar a su amiga. Y seguramente Rosario lo ayudaría a él para poder conquistar el corazón de su sexy Julieta.
Se la pasaba suspirando con sol
Irving Dos semanas que Julieta está desaparecida. Me duele el corazón. Me preocupa demasiado no tener pistas de nada. Greta está de lo más tranquila, sigue trabajando aunque los proyectos estén en pausa. La auditoria interna se está llevando a cabo y parece que quién está desviando el dinero está muy tranquilo. Rosario me dio una lista de nombres que ya entregue al padre de Antonio, quien está haciendo una investigación junto con Tomás, ese amigo mío es un sabueso, sé que entre todos vamos a encontrar a Julieta y a las personas que quieren hacerle daño, a mí y a la editorial. Hoy es martes y recuerdo que hace dos semanas tenía entre mis brazos a Julieta, una Julieta tan hermosa que vibraba con cada toque de mis manos, que se estremecía con mis besos. Aún me pican las palmas de las manos con el calor que me dejó. Recuerda que ese beso fue como fuego para él, le devolvía la vida y las ansias por vivir, pero ahora sí VIVIR, con to
(Capítulo con la perspectiva de ambos protagonistas)JulietaSiento algo caliente sobre mi mejilla, es algo cálido, como si fueran rayos de sol.Poco a poco abro mis ojos, lo poco que puedo porque están hinchados por los golpes, el calor era real, pude distinguir los rayos del sol traspasando por una rendija del lugar. Con mucho cuidado pude sentarme, tengo las manos amarradas pero los pies no, eso es bueno.Siento el calor de sol sobre mí y no sé por qué pero lo siento como una esperanza de que puedo sobrevivir. Escucho ruidos fuera de la rendija, intente gritar pero no tenía voz, me parece que de los gritos y el llanto del dolor me han dejado muy mal las cuerdas vocales.Todo, absolutamente todo me duele.Después de muchos intentos pude moverme un poco hacia la rendija, casi al llegar volví a escuchar ruidos y voces que poco a poco fueron alejándose, pero no pude emitir
(Capítulo con la perspectiva de ambos protagonistas)JulietaSiento como alguien pasa algo mojado sobre mi cuerpo, es algo refrescante pero poco a poco comienzo a recordar. Ni si quiera pude intentar escapar, alguien me golpeo la cabeza antes de poder subirme a la mesa.Siento el agua caer sobre mi cuerpo. Abro los ojos asustada. ¿Qué m****a pasa?. Me levanto de golpe y a pesar del dolor me alejo de quien me está tocando. Observo a una señora mayor que porta ropas muy viejas me ve con sorna, se burla de mí. Me observo y estoy desnuda, mi cuerpo está llenó de golpes, los moretones se ven horribles y siento que tengo una costilla rota, que la adrenalina no me había dejado sentir del todo. Hasta que me moví tan rápido, ahora.-Señora, puede ayudarme, por favor- Le suplico, me olvido de mi desnudez por un momento y me hinco suplicándole su ayuda, pero ella me o
IrvingHan pasado quince días desde que traje a Julieta al hospital. Ella sigue en un coma inducido, su cuerpo está muy cansado, golpeado y débil, si la despertaban sentiría mucho dolor, su tía decidió que estuviera dormida para que sanara.Su tía es una persona muy interesante, muy platicadora y tiene esa lama gentil que las personas mayores tienen. Me ha contado muchas historias de la pequeña rebelde de Julieta, desde siempre ha sido una guerrera. Ambos nos reímos por ratos.Mi abuela Marisol se une a nosotros en las charlas de las tardes ha hecho mancuerna con la tía de Julieta como si fueran amigas de toda la vida.Me he pasado todos los días aquí en el hospital.Antonio viene de vez en cuando y a veces me enfurece, aunque sé que está apoyando las investigaciones, me enoja que no pase más tiempo con Julieta. Yo en su lugar no me despegar&iac
JulietaLa oscuridad es un lugar terrible, una parte de mí me decía que estaba a salvo. Otra parte me torturaba, manteniendo presente todo lo que el tipo desgraciado me hizo.Nunca le había tenido miedo a la oscuridad, recuerdo que los momentos en los que me sentía tranquila eran de noche, cuando el idiota de Javier dormía o no estaba conmigo. Las noches para mí eran de paz.Ahora esta oscuridad me agobia, me ahoga, siento que no puedo más. Quiero abrir los ojos, quiero un poco de luz.Me desvanezco.Siento que estoy despierta pero no puedo ver nada. De repente, abro mis ojos y me veo parada en la puerta del lugar en el que estoy encerrada. Escucho gritos y después disparos, el miedo me invade, de un momento a otro observo el rostro de Irving, él vino por mí, mi corazón palpita muy rápido.Lo único que hago es correr a sus brazos, mi refugio. Sus
Irving Después del reencuentro con mi hermosa Julieta sentí que todo iba tomando forma en mi vida. El tipo de las cicatrices y Greta están en el proceso de entrar a la cárcel. Ayer la policía pudo hablar con Julieta para escuchar y registrar su testimonio y poder encerrar a estos malditos. Pensé que ella me sacaría de la habitación para testificar pero no, en vez de eso me tomó de la mano y comenzó a narrar el martirio que vivió en manos de esos dos. La sentía tensarse describiendo como la habían dejado con los ojos vendados y después en una total oscuridad, los golpes… se estremecía cuando contaba como el maldito la golpeaba. También contó que en varias ocasiones Greta iba a martirizarla diciendo que yo le había pedido que fuera secuestrada. Me mira con vergüenza porque en algún momento lo creyó y no puedo culparla, me he portado como un idiota y nunca le aclaré que estaba haciendo una detallada investigación sobre el robo de sus proyectos, no me cab
JulietaEstoy en mi departamento, por fin.Lo primero que hago es aventarme a mi cama, pero ¡Oh, maldito error! Me duele el cuerpo, ya no tanto como antier pero vaya dolores. Hago muecas y bufo por el dolor, parezco niña chiquita, lo que me lleva a reírme como loca, estoy loca.Sonrío como tonta, me doy cuenta que mis cambios de humor están relacionados con los nervios de ver al sexy capitalista. Antes de que me dieran el alta mi tía me convenció de invitar a cenar a Irving, sinceramente no había mucho que convencer, ya había aceptado antes de que ella terminará de hablar.Así que aquí estamos, me mandó a descansar en lo que ella arregla la casa y prepara la comida, aún es bastante temprano y yo quiero que ya sean las 7 de la noche para ver a mi hombre.Con esta idea me quedo dormida, sigo bajo los efectos de medicamentos así que parezco zombi.
Irving Estoy sentado frente a mi hermosa Julieta con el corazón acelerado, hablamos de un futuro, aún algo muy vago, pero lo estamos diciendo y eso hace que mi pecho se llene de esperanza. Ella baja su rostro sonrojado y sigue comiendo. Hago lo mismo. Es impresionante que me haga sonreír de forma tan genuina todo el tiempo. Es verdad lo que dice Rosario, desde que conozco a Julieta sonrío más y me acerco cada vez más a aquel chico de la universidad que quería ser mejor, este pensamiento me llena más de esperanza. La observo comer, detallo sus facciones, pero también observo sus manos, sus brazos, aún se veían los moretones, eso me dolió en el alma. De repente, Julieta escondió su brazo con pena. -Lo siento.- Tome su mano, fue mi culpa por mirar tan fijamente sus brazos.- No te quise incomodar, me duele ver las marcas que te dejó el idiota ese. Pero más te observaba porque eres hermosa. Ella se sonroja y una pizca de a