Narra Nicol Silva Lo abracé fuerte cuando el éxtasis nos abandonó y él me correspondió con suaves caricias a lo largo de mi columna vertebral, mientras me complacía con sus húmedos besos.— Hola de nuevo. — nuestras miradas se encontraron finalmente y sonreímos a la misma vez.— Buen día mi Alejandro — le di un pequeño beso en los labios y pude notar que se quedaba con ganas de más.— Te has despertado de buen humor por lo que veo cariño — en eso tiene razón hoy estoy de muy buen humor y es por tenerlo a el junto a mi.Por saber que ahora está en casa y estamos juntos.— Despertar a tu lado es motivo suficiente para mí— La próxima vez te llevaré conmigo. —agrega — y no aceptaré un no como respuesta a eso.Aún no le había dicho el verdadero motivo por el cual no pude viajar con él pero creo que era el momento de hacerlo — ¿Cómo te fue? — le pregunté tratando de desviar el tema.Aunque moría de ganas de decirle no sabía cómo hacerlo y debía de admitir que me daba miedo su reacción y
Narra Alejandro Silva Estaba ansioso y creo que esa palabra en realidad quedaba chica para describir el revoltijo de emociones que sentía en este momento. Hoy por fin lo vería, vería por primera vez a mi niño y eso me tenía extremadamente emocionado, ansioso sentía muchas emociones y todas ellas positivas.Aunque no podía negar que no todo era maravilloso, a pesar de lo emocionado que me siento, también debo admitir que me sentía agotado mentalmente y es que en estas semanas he tenido tantas cosas de las cual ocupararme.La empresa, los viajes, las reuniones constantes con futuros nuevos clientes y el supervisar las obras en construcción saturaban mi día a día, pero al finalizar la jornada cuando abría la puerta de mi departamento encontraba las razones de tanto esfuerzoComo justo ahora.Nicol y mi bebé que aún estaba en su vientre lo eran todo para mí, me daban esa fuerza que necesitaba para enfrentar mi día a día.La observaba en silencio apoyada en el marco de la puerta de nues
Narra Nicol silva — He vuelto. — la doctora entra al consultorio y yo muero de la vergüenza cuando somos piyados in fraganti besándonos cómo dos adolescentes —, y por lo que veo no me extrañaron nada.— Lo siento.— ella me sonríe dulcemente.— No se preocupen, estoy acostumbrada, por eso generalmente les doy un momento a solas. — explica —. Las primeras visitas son especiales y también vienen acompañadas de una carga emocional extra cuando se trata del primer bebé.Escuchar el latido de mi bebé me había emocionado tanto, saber que ahí estaba creciendo una vida, una que habíamos creado Alejandro y yo con tango amor.— Lo acabo de comprobar. — acota Alejandro con una sonrisa que creo que le durará por mucho tiempo.Trato de levantarme de la camilla pero ella me detiene.— No te levantes todavía Nicol, ahora haremos el ultrasonido para ver como se encuentra ese pequeñín— Está bien. — me acuesto en la misma posición en la que estaba anteriormente, mientras ella revisa el monitoreo prev
Narra Alejandro SilvaEl tiempo pasaba volando.En realidad, no sé si solo me pasaba a mí, pero los días últimamente se me escurrían como agua entre los dedos.Agradecía el hecho de que hoy fuera domingo y si bien el día de mañana tenía programado un viaje para cerrar un importante negocio en el exterior, hoy me había propuesto que disfrutaría de mi día libre.Había organizado todo minuciosamente. Iríamos a almorzar con mis padres, luego pasaríamos por la casa para ver como iban todas las remodelaciones del lugar que se convertiría muy pronto en nuestro hogar y luego, cómo broche de oro, nos juntaríamos con los chicos en el restaurante del padre de JoséHace rato que no los veía y en verdad los echaba de menos.Pero había algo más importante que todo eso.Mi Nicol e
Estuvimos así por un buen rato. Literalmente hasta que la temperatura del agua nos obligó a abandonar nuestro delicioso momento. Entre risas y besos la ayudé a secar su cuerpo y luego a vestirse, claramente luego de descartar varias prendas que ya no le quedaban más, al fin encontramos un atuendo que diera justo en el clavo con lo que quería ese día. Cabe destacar que también se enojó por eso, así que tuve que convencerla de que no se veía gorda, que era normal que su cuerpo cambiara como lo estaba haciendo, que sus caderas se ensancharan y que yo amaba cada uno de esos cambios. A la larga sabía que ella también lo haría, todos y cada uno de ellos se remitían a nuestra pequeña niña. Desayunamos junto al balcón a pedido suyo, ya que era la parte del departamento que más le gustaba para pasar el rato. El aire frío ya se comenzaba a sentir en la ciudad, anunciando la pronta llegada de la época otoñal. Mientras mi chica se encargó de limpiar lo que ensuciamos, me vestí y estuve list
Me despierto y puedo ver cómo mi esposo ya está casi listo para irseal trabajo, así que salgo de la cama lo abrazo de sorpresa por laespalda, automáticamente él gira para quedar frente a frente conmigoy me da un apasionado -Buenos días mi amor ¿Cómo dormiste? --A tu lado siempre duermo maravillosamente. ¿Ya debes irte amor? - - Si cariño, ya debo irme a la compañía -Lo veo fijamente a los ojos, tratando de enternecerlo, mientras aflojóun poco su corbata.- ¿Qué te parece si faltas a trabajar esté día? Y nos dedicamos adarnos muchísimo amor. ¿Sí? ¡Por favor! -El me ve de arriba abajo y sonríe un poco, muerde su labio inferior.-Mi amor, me encantaría, pero sabes muy bien que no puedo faltar a laempresa, prometo que en la noche te compensare ¿Está bien? - Éltoma mis mejillas en sus manos y yo inclinó mi cabeza al piso.-Está bien amor, sé que no te gusta incumplir con tusresponsabilidades por eso es que te admiro y te amo tanto- -Gracias por comprender preciosa, yo también
Estar aquí afuera de la habitación me llena de desesperación, no sécomo se encuentran mi hija y mi esposa, me siento muy culpable contodo lo que paso.¿Ahora que voy hacer? ¿Qué dirán mis padres de todo esto? ¿Es mihijo realmente? La última vez que estuve con ella recuerdo queusamos protección, esto no puede ser posible.Puedo ver como la Doctora comienza a aproximarse a mí, mis manoscomienzan a sudar de los nervios.- ¿Es usted el esposo de Nicol Silva? –Lo veo fijamente a los ojos.- Si, soy yo, dígame ¿Cómo esta ella? ¿Cómo esta mi hija? –- ¡Descuide! Le hemos puesto un calmante y ahora mismo seencuentra sedada, la niña también esta muy bien pero todavía no estiempo de su nacimiento –Sentí un gran alivio al saber que las dos están bien, ya que no meperdonaría jamás si a mi propia hija le pasaba algo por mi culpa.- Muchas gracias Doctora, estaré aquí – Veo como la Doctora se alejade mí y tomó asiento en la sala de espera al mismo tiempo que tomómi teléfono celular para
-Por favor Alejandro, ya eres un hombre adulto, deja de recordar elpasado una y otra vez ¿Por qué te expresas de esa manera? –Lo veo de arriba abajo.-Papá aun en este momento no tienes ni idea de todo el daño que mehiciste cuando solo era un niño-- ¡YA BASTA! Por Dios, eres un hombre, te ves tan infantil hablandode esa manera como un niñito resentido ¿De qué daño hablas? Te ditodo lo mejor, una buena educación, dinero, lujos –- Siempre intentas minimizar mis sentimientos y piensas que lomaterial, es todo, pues déjame decirte que no, no quiero que algunode mis hijos se sienta como yo– Agacho mi mirada al suelo.- A los dos los amo, por qué ambos son mis hijos, no tuve ningunapreferencia por ninguno de los dos–-Papá por favor ¿A quién tratas de engañar? T&ua