Me despierto y puedo ver cómo mi esposo ya está casi listo para irseal trabajo, así que salgo de la cama lo abrazo de sorpresa por laespalda, automáticamente él gira para quedar frente a frente conmigoy me da un apasionado -Buenos días mi amor ¿Cómo dormiste? --A tu lado siempre duermo maravillosamente. ¿Ya debes irte amor? - - Si cariño, ya debo irme a la compañía -Lo veo fijamente a los ojos, tratando de enternecerlo, mientras aflojóun poco su corbata.- ¿Qué te parece si faltas a trabajar esté día? Y nos dedicamos adarnos muchísimo amor. ¿Sí? ¡Por favor! -El me ve de arriba abajo y sonríe un poco, muerde su labio inferior.-Mi amor, me encantaría, pero sabes muy bien que no puedo faltar a laempresa, prometo que en la noche te compensare ¿Está bien? - Éltoma mis mejillas en sus manos y yo inclinó mi cabeza al piso.-Está bien amor, sé que no te gusta incumplir con tusresponsabilidades por eso es que te admiro y te amo tanto- -Gracias por comprender preciosa, yo también
Estar aquí afuera de la habitación me llena de desesperación, no sécomo se encuentran mi hija y mi esposa, me siento muy culpable contodo lo que paso.¿Ahora que voy hacer? ¿Qué dirán mis padres de todo esto? ¿Es mihijo realmente? La última vez que estuve con ella recuerdo queusamos protección, esto no puede ser posible.Puedo ver como la Doctora comienza a aproximarse a mí, mis manoscomienzan a sudar de los nervios.- ¿Es usted el esposo de Nicol Silva? –Lo veo fijamente a los ojos.- Si, soy yo, dígame ¿Cómo esta ella? ¿Cómo esta mi hija? –- ¡Descuide! Le hemos puesto un calmante y ahora mismo seencuentra sedada, la niña también esta muy bien pero todavía no estiempo de su nacimiento –Sentí un gran alivio al saber que las dos están bien, ya que no meperdonaría jamás si a mi propia hija le pasaba algo por mi culpa.- Muchas gracias Doctora, estaré aquí – Veo como la Doctora se alejade mí y tomó asiento en la sala de espera al mismo tiempo que tomómi teléfono celular para
-Por favor Alejandro, ya eres un hombre adulto, deja de recordar elpasado una y otra vez ¿Por qué te expresas de esa manera? –Lo veo de arriba abajo.-Papá aun en este momento no tienes ni idea de todo el daño que mehiciste cuando solo era un niño-- ¡YA BASTA! Por Dios, eres un hombre, te ves tan infantil hablandode esa manera como un niñito resentido ¿De qué daño hablas? Te ditodo lo mejor, una buena educación, dinero, lujos –- Siempre intentas minimizar mis sentimientos y piensas que lomaterial, es todo, pues déjame decirte que no, no quiero que algunode mis hijos se sienta como yo– Agacho mi mirada al suelo.- A los dos los amo, por qué ambos son mis hijos, no tuve ningunapreferencia por ninguno de los dos–-Papá por favor ¿A quién tratas de engañar? T&ua
Veo mi reloj y puedo darme cuenta de que ya es casi la hora de unareunión importante en la oficina, así que termino aquel trago de whiskyy salgo inmediatamente hacia la entrada del bar.Subo a mi auto y comienzo a manejar hasta la compañía, veo que hayun poco de tráfico, pero para mí buena suerte fluye con rapidez asíque en unos minutos ya estaba de vuelta en la empresa, estaciono elauto y camino al elevador y entro en él presiono el botón que me llevadirecto al piso en el que trabajo.Salgo del ascensor y veo a mi secretaria en su puesto, pero apenasme ve aproximarse se pone de pie.-Señor, adentro de su oficina hay una mujer que lo espera-La miro mientras mantengo mi ceño fruncido.-Pero ¿Cómo es posible? ¿Cómo dejas entrar alguien a mi oficina así?Hay tengo muchos documentos importantes
No puedo creer que ahora mismo esté con mi bebé en los brazos, apesar de que la Doctora me dejo claro que aún no era momentoirremediablemente el parto se adelantó y la niña nació.Debo admitir que esperaba encontrar aquí afuera al menos aAlejandro, creo que era lo mínimo que podía hacer por mi después detodo ha sido el responsable de lo que ocurrió, mi hija acaba de nacer ynadie nos esta esperando acá afuera, pero no dejaré que nadaempañe este momento de felicidad por el cual estoy pasando.¿Estará con esa mujer y su hijo?Fui una tonta de pensar que podría darle una oportunidad y formar unafamilia los tres, mis padres seguramente van a enloquecer cuando seenteren de todo, pero ya soy una mujer y puedo tomar mis propiasdecisiones.Con mi niña en brazos camine hasta la entrada de
No puedo creer que ahora mismo esté con mi bebé en los brazos, apesar de que la Doctora me dejo claro que aún no era momentoirremediablemente el parto se adelantó y la niña nació. Debo admitir que esperaba encontrar aquí afuera al menos aAlejandro, creo que era lo mínimo que podía hacer por mi después detodo ha sido el responsable de lo que ocurrió, mi hija acaba de nacer ynadie nos esta esperando acá afuera, pero no dejaré que nadaempañe este momento de felicidad por el cual estoy pasando. ¿Estará con esa mujer y su hijo? Fui una tonta de pensar que podría darle una oportunidad y formar unafamilia los tres, mis padres seguramente van a enloquecer cuando seenteren de todo, pero ya soy una mujer y puedo tomar mis propiasdecisiones. Con mi niña en brazos camine hasta la entrada del hospital, tomé untaxi al cual subí en la parte trasera le indique la dirección al chofer einmediatamente comenzó su camino. Finalmente, el conductor me dejo justamente en la puerta de mi casa,
Me despierto en la mañana en cuanto entra el sol por mi ventana, meparo rápidamente de la cama para cerrarla y evitar que la bebétambién se despierte. Mientras ella continúa durmiendo, decido ir a la cocina a preparar midesayuno, pero en mi mente continúan tantas ideas rondando, laverdad es que necesito encontrar un abogado, pero yo no conozco anadie, no tengo a nadie que pueda asesorarme ¿Y si llamo al profesorEdward? Hace mucho tiempo que no se nada de él, pero voy a llamarlo quizásconserve el mismo número, entonces me dispongo a marcar y a lospocos segundos me contestan. -Aló- -Hola ¿Hablo con el profesor Edward? - Se queda en silencio unos segundos. - Nicol ¿Eres tú? – - Si, soy yo – Escucho como sonríe. -¡Que gusto me da saber de ti! ¿Cómo estás? – -Me encuentro muy bien, pero ahora mismo lo llamo porque tengo unproblema y necesito un abogado- -¿Un abogado
-Tati, claro que lo sé, por eso es que te queremos mucho, pero esto yano tiene vuelta atrás- Baje de la habitación y salí de la casa, tome untaxi al cual le indique la dirección que el abogado me dio cuandohablamos por teléfono.El chofer inicio movimiento mientras tanto yo no dejaba de ver por laventana, es un paso muy grande el que estoy a punto de dar ademáses muy doloroso para mí, pero lo tengo que hacer para mantener midignidad.Al cabo de unos minutos ya estábamos en el centro de la Ciudad y elchofer me señalo desde su asiento aquel edificio, así que pague porsus servicios y camine directo hacia la entrada del lugar.Una vez ahí adentro, con mucha facilidad ubique la oficina delabogado Jones, entonces toque al timbre y a los pocos segundos meabrió la puerta una amable chica.-Buenas tardes ¿En qué puedo ayudarla? –Sonrió amablemente.-Estoy buscando al Doctor Jones, tengo una cita con él-Ella termina de abrir la puerta y me hace pasar, indica que me sienteen la sala