Capitulo 63. Peligro. Con el viaje de Emmanuel, Rosaura se a convertido en el blanco de muchos y la atención de otros, Emmanuel no deja de llamar con constancia para saber de ella, demostrando lo preocupado que está por el proceso del embarazo. R: Solo fue un mareo, creo que fue por las náuseas, pero voy a estar bien, ya se me pasó, estoy en la cafetería con Yoel comiendo. Rosaura nota a un hombre observando a la distancia, es la quita vez que lo ve y eso la pone un poco nerviosa, no sabe si son de seguridad de Emmanuel o es lo que dijo Yoel de Vicent, que la está vigilando aún. E: Si te sientes casada regresa a la casa Rosaura, no te esfuerces. R: No lo hago, estoy bien, he estado bien estos tres días que llevas fuera, no es cansancio, solo son los síntomas del embarazo Emmanuel. E: Bien, confió en me dices la verdad Rosaura, debo irme, te llamaré más tarde. R: Está bien, cuídate. Nos cuelgan; Rosaura se mueve junto a las chicas, que también se han vuelto sú
Capitulo 64. Ansiedad. La mente de Rosaura empieza a volar, ella no puede contener la ansiedad, sobre todo al saber que Emmanuel aún no regresa, lo que la hace dudar sobre lo que dijo Santino, de que Vicent tenga que ver en su retrasó. R: Estoy bien, solo espero que tú trabajo termine pronto…que…¡Ahs! Que regreses a casa. E: ¿Qué pasa Rosaura? Solo titubeas cuando algo te pasa. Rosaura frunce el ceño con tristeza, aguantando las lágrimas. R: Solo son las hormonas creo, estoy un poco sensible. E: Descansa Rosaura, trataré de estar de vuelta en unos días. R: Está bien Emmanuel, cuídate. E: Tú también. Emmanuel toma de su trago mirando por el enorme ventanal de la habitación de su suite, dónde no puede dormir, no descansa tranquilo pensando en Rosaura, Rosaura no sale de su mente, la piensa día y noche, lo poco que duerme la pone en su sueños, no sabe que pensar, cuando se metió tan profundo Rosaura en su mente, en su corazón, lo está enloqueciendo recordar s
Capítulo 65. Escapé. Rosaura abraza a las chicas, ella se apoya de ellas, permitiendo que salgan del baño. En cuanto ambas salen, Rosaura espera algunos minutos y sale mirando a los lados para asegurarse de que nadie la vea y sale del baño cubriéndose con su nueva chaqueta color negro que cubre su cabello, lo que la mantiene ajena al ojo visual de los hombres de seguridad, lo que le permite escapar. Las chicas caminan hacia la biblioteca intentando evadir a los hombres de seguridad, cuando de repente Yoel intenta acercarse. — Señora, señorita, el señor intenta contactar con usted, dice que no responde a sus mensajes y sus llamadas, señora… la está llamando.— Susana mira a Flor cubriendo su rostro, muy nerviosa. — Señorita, ¿está bien? —Susana se inquieta al ver que Yoel la toma del brazo y la pone frente a él, quedando ambas al descubierto y Yoel en shock.— ¿Dónde está? —¿Dónde está?—pregunta angustiado. — Se ha ido, no sabemos a dónde.— Afirma Flor muy nerviosa. A
Capítulo 66. Desorientados. El doctor la mira sorprendido, al igual que las enfermeras. — Señora Shwit, no puedo hacer eso, usted…— Rosaura lo interrumpe. — Por favor, por favor, se lo suplico, se lo ruego. — Señorita, si está pasando por un mal momento o está siendo intimidada, debe decirnos.— Repite el doctor. — No, no, por favor, usted no entiende, debe ayudarme, se lo ruego, le daré dinero, tengo dinero… ¿Mi bolso? — Aquí está.— confirma la enfermera. — Tengo cinco mil, son suyos, tómelos, pero por favor, no le diga a mi esposo que el bebé vive. Yo me haré responsable, dígale que el accidente ocasionó la pérdida, se lo pido, debe ayudarme, solo dígale que fue mi culpa, yo asumiré toda la responsabilidad, dígale que aún sigo hinchada, solo ayúdeme, por favor. — Señora Shwit, ¿tiene idea de lo que me está pidiendo? — La tengo, ¿Y usted? ¿Tiene idea de quién es mi esposo? Si usted no me ayuda, quedará en su conciencia lo que me suceda al salir de aquí. Us
Capítulo 67. Vacío. Emmanuel se siente deshecho, tiene una batalla con él mismo, se refugia en casa de Vincent, ebrio, sin saber que Rosaura está pasando dificultades sola en el hospital, incluso para manejar todo sola. — ¿Señorita? —¿No llamará a un familiar?—pregunta una enfermera. — No, no se preocupe, puedo hacerlo sola, tranquila. — No puedo creer, parece que su esposo solo estaba con usted por el bebé. Saber que lo ha perdido ahora lo ha alejado. Nadie merece estar sola, usted debe ahora más que nunca ser amada, cuidada. ¿Qué piensa hacer con su embarazo? — Seguir adelante, no se preocupe, en unos días me alejaré de mi esposo, mi bebé estará bien. — Eres tan joven e inocente, esto es una maldad hacia tu persona. Después de ese fatal accidente donde casi pierde a su bebé y la vida, lo menos que pueden hacer sus familiares es acompañarla, pero no se preocupe, yo te ayudaré y hablaré con mi compañera para que te haga compañía mientras estés en la clínica y yo es
Capítulo 68. Escapé. Rosaura está intentando armar una cuerda firme cuando escucha varios autos llegar al lugar. La ansiedad la invade; ella corre escondiendo todo y busca rápidamente una bata holgada para cubrir su vientre abultado. — ¿Señora? ¿Señora Rosaura? La voz de Victor la hace aparecer. — Victor.— Al ver las bolsas con la comida, Rosaura se aproxima rápidamente ante el olor de la comida fresca y las bolsas de mercado; ella ni siquiera lo toma en cuenta, corre buscando ansiosa la comida que prueba muy desesperada. La escena ante Victor es impactante; empieza a pensar que Santino hizo esto a propósito. Con todo lo que ha hecho, aún le sorprende que él siga cerca de Emmanuel, quien no hace más que ponerlo a prueba. Entiende a su jefe, él quiere la cabeza de todo, sabe que Santino solo es un peón. Su madre no tiene cabeza para pensar en nada más que en Tamara desde que se fue; ahoga su pena en compras y salidas a juegos con sus amigas. Vanessa depende cien por ci
Capítulo 69. Nuevo comienzo. Emmanuel sostiene la nota que Rosaura ha dejado en sus manos. “Te dejo en libertad, no quiero tu dinero, no quiero nada de ti, sé feliz, Emmanuel”. Al leer esas cortas letras que golpean su alma, Emmanuel empuña la hoja y mira con frialdad la casa vacía que ella ha dejado; lo que solía llamar hogar ahora es un triste recordatorio de todos los momentos infelices que vivieron juntos. En su corazón no cabe más dolor, el dolor de imaginar que perdió a su hijo y ahora a ella. Está deshecho, pero le hace imposible reconocerlo; no puede darse por vencido, no ahora. Frente a él, está una gran cantidad de personal de seguridad, como cincuenta hombres, a su disposición para empezar con la búsqueda. — Búsquenla en el bosque, quiero que cubran cada rincón, cada espacio, desde hospitales hasta estaciones de autobuses. Se llevó joyas valiosas; si tiene la necesidad, tendrá que venderlas. Busquen en cada casa de empeño, búsquenla y tráiganla de vuelta. —Sí,
Capítulo 70. Desistir. Dos meses después. Rosaura sale feliz de la ecografía; su bebé está muy sano y ya tiene 5 meses y una semana. El doctor le mandó algunos medicamentos; solo faltan pocos meses para la llegada de su bebé, y aunque está un poco nerviosa, siente que puede hacerlo. Su vecina la ha ayudado mucho y confía en que, si logra que todo salga bien, quizás con el tiempo pueda conseguir trabajo donde ella trabaja y así poder cuidar de su bebé y comprarle lo que necesita, pagar la guardería como hacen muchos padres, hasta que se estabilice todo. Ya no le queda mucho dinero; lo poco que tiene es para pagar la renta. Por ello se dirige a la casa de cambio; está lista para vender otro reloj y poder cubrir los gastos del mes. Rosaura hace el cambio con satisfacción; parece que todo marcha muy bien. Cuando sale de la tienda, no se percata de que unos hombres la siguen; de repente la golpean, derribándola al suelo, lo que causa un gran impacto en ella, haciéndola sudar frí