- Señorita Loren, el Señor Vermont la espera en su oficina - le indicaron en cuanto aparcaron.
- Luca – se volvió hacia el chofer - ¿Me ayudas con las niñas?- Por supuesto, Señorita Loren, niñas, suban al auto hasta que mamá regrese.- No me refería a eso – rio – ¿Puedes darles la mano al subir? Yo llevaré el equipo en el maletero.- Puedo ayudarla con eso Señorita - le dijo mientras abría el maletero- ¿No que tenías experiencia con niños? Te necesito a mi lado para que me acompañes con las niñas, yo puedo manejar las cosas de mi trabajo.- Entiendo, la sigo – tomó las manos de las niñas con firmeza.Eva y Emma intercambiaron miradas y luego la miraron a ella.Lily asintió con la cabeza y cargando un maletín y dos cajas, camino detrás del empleado de Vermont Corporaciones que los recibió.- Luca, por cierto –ralentizó sus pasos para tomar algo de distancia del hombre delante de ellos y murmuró – no quiero que te refieras a mí como la madre de las niñas mientras estemos aquí.- Así será Señorita Loren.- Tomaremos el elevador Señorita- Prefiero las escaleras- Será un poco incómodo subir hasta el décimo piso por las escaleras con las cajas.Lily frunció las cejas “¿Décimo piso?” hasta donde recordaba, el salón para las conferencias estaba en el primero, en el décimo piso solo estaba la oficina de Pietro.- ¿El décimo piso? – preguntó con cautela.- El Director Vermont la espera en su oficina.- Luca, vuelve con las niñas al auto, olvidé que su madre pasará a recogerlas por aquí.- Okay – dijo de inmediato y pego la vuelta cargando a ambas niñas.Al parecer, Luca era realmente rápido en actuar, definitivamente comprendió su punto.- Tomemos el elevador – compuso su sonrisa y trató de desviar la atención del empleado de las niñas - ¿Me ayudarías con esto? Llevo toda la mañana renegando con las niñas de mi amiga, mis brazos están agotados.- Claro, por supuesto.Cuando la puerta de la oficina de Pietro se abrió, lo vio con la cabeza gacha, concentrado en una serie de papeles sobre su escritorio.- Toma asiento allí un momento – era la primera vez que escuchaba una frase tan larga de su parte.- Gracias.Mirar a Pietro la transportó delante de Pablo, años atrás.No eran muy parecidos, pero compartían ciertos rasgos.La piel de Pietro lucía más bronceada que la de Pablo, que era igual de blanca que la de ella, y su cabello era negro, a diferencia del cabello cobrizo de su ex esposo y que habían heredado sus hijas.Sin embargo, nunca se había dado cuenta de que los ojos grises de Emma y Eva, eran iguales a los de Pietro.Pablo tenía ojos marrones y ella negros.La genética de los Vermont era una conjugación de muchos orígenes, y supuso que las niñas tenían los ojos de su abuela, a quien había visto en fotos en la mansión más seguido que a Pietro.Nunca imaginó que vería en este hombre, con alguna especie de parálisis facial, algo en común con sus hijas.- ¿Quieres algo de beber?- No – dijo en una especie de trance con la mirada perdida en él – Lo siento, sí, gracias. Lily apartó la mirada hacia sus manos ¿Cómo pudo quedarse viendo el rostro de Pietro de esa manera? ¡Qué vergüenza! Pietro carraspeó - ¿Tomas café?- Lo que sea está bien – quería burlarse de sí misma.Quizás era por el simple hecho de ser mamá, pero se había acostumbrado a reír de sí misma por sobre todo. O aún no sabía cómo lidiar con algunas emociones sin sentirse estúpida.Pietro miraba el rostro sonrojado de Lily con tal seriedad que la obligaba a volver a mirar sus manos.- Café – dijo en un interlocutor y de inmediato entró un joven con una taza de café – es para ella – le indicó guardando todos los papeles sobre su escritorio en un cajón.- Señorita Loren, ya fue endulzado, espero sea de su agrado. - Si… - contestó por lo bajo.- No me di cuenta de preguntarte cómo te gusta el café – Pietro hablo cuando noto que, tras el primer sorbo, Lily arrugaba el entrecejo – prepárale otro.- Enseguida – el joven que estaba de salida volvió - ¿Podría decirme qué café le gusta?- ¿Qué café…? - ¿Qué no es solo uno el café? - Tenemos variedad de café para ofrecerle, puede pedir lo que sea – Han, el secretario de Pietro, sentía frío en la espalda, pero no se animaba a voltear para confirmar si su jefe lo culpaba por la confusión, así que intentó lucir de todo lo que podían ofrecerle para enmendarse.- Solo, café – respondió – pero sin azúcar – agregó.- Entiendo – sonrió incómodo – en realidad este café fue preparado como el Señor Vermont lo pide usualmente, fue mi error.- Puedes dármelo a mí – Pietro le señalo la taza que Lily le entregaba.Ambos se detuvieron de inmediato sin comprender. Pietro notaba las miradas confundidas de las dos personas y se sintió molesto.- La taza de café que ella no quiere - indicó- Puedo preparar otro Señor - No quiero tirar ese café – intentó explicar- Puedo tomarlo – Lily respondió sin mover ni un músculo facial, petrificada – sí, puedo tomarlo, ya bebí una parte de todos modos, jaja- Claro – el joven le devolvió la taza.- ¡Basta! – Pietro se levantó de golpe – dije que quiero ese café.- ¡Sí!- ¡Sí!Dijeron al unísono y Lily se levantó con el café de manera refleja para entregárselo a Pietro mientras el joven se retiraba diciendo que prepararía otro para ella.¿Realmente iba a tomar el café que ella ya había bebido? No podía evitar mirarlo sin pestañear.Pietro se sintió incómodo ante la mirada de ella.Con la taza entre sus manos, se acomodó delante de Lily y no tomó ni un solo sorbo hasta que ella tuvo la suya.- ¿Tengo que probar tu café para que estemos a mano y dejes de mirarme? ¿O vas a beber de tu taza de una vez por todas antes de que se enfríe?- Beberé beberé.En realidad, solo había aceptado ese café por cortesía, ella ni siquiera lo había pedido y encima la apresuraba ¿Quién lo entendía? - No sabía que trabajas para la inmobiliaria Rubens – llevó la taza a sus labios.“¡Lo bebió!” Lily miró sobre su hombro, buscando al secretario Han para compartir su asombro, pero ya se había ido.Se pasó una mano por su cabello para disimular.- No sé por qué lo sabrías – dijo con suavidadEl café calentaba las manos frías de Lily
- Señor Vermont, si quiere podemos solicitar que alguien más lleve a cabo este proyecto – toda la seguridad que había sentido antes de entrar, temblaba como un castillo de naipes ante él.- Trabajo con Rubens desde que comenzaron a aceptar trabajos internacionales, jamás me ha decepcionado.- Y por eso le extraño que me enviaran - se atrevió a suponerPietro la miraba fijamente.- Lo siento – se arrepintió de lo que dijo en cuanto las palabras terminaron de salir de su boca – ¿Estaría de acuerdo con continuar con esta negociación como si no nos conociéramos?- No sabía que serías tú quién vendría, así que en ningún momento creí que los temas a debatir hoy serían personales.- Perfecto – sacó una carpeta de una de las cajas y comenzó a acomodarlas sobre la pequeña mesa entre ellos y continuó - Estos son los requisitos a contemplar en el diseño del complejo que usted envió a Rubens la semana pasada y tengo algunas ideas ya plasmadas en papel que me gustaría que usted revisara.Pietro se limitaba a escucharla
- Con la extensión de la propiedad, el rendimiento que usted quiere tener a través de este proyecto y la zona en la que los lotes están ubicados, no creo que haya conflictos con el resto de sus requisitos.- ¿Estás de acuerdo con la idea de evitar un complejo de edificios?- Entendí que eso reduciría la privacidad que usted pretende brindar a los inquilinos, pero no voy a negar a que podríamos asegurar exclusividad y ganar más réditos si usted aceptara la idea de un edificio.Pietro se reclinó contra el respaldar del sillón.- No necesito explayarme demasiado con las ventajas de edificar en lo alto para que el terreno rinda en espacio, pero supuse que no quiere nada que afecte la vista del entorno desde ningún punto del lugar, así que intenté minimizar los metros cuadrados a utilizar, sin quitar confort a las propiedades, para poder incorporar la cantidad de unidades domésticas que usted requería.Pietro apoyó la taza sobre la esquina de la mesita, en absoluto silencio- Y … - el silencio de Pietro la hacía titubear – me animé a trazar la propuesta de estos loft minimalistas que están de moda en el extranjero y que cumplen con ciertas características a las que estamos acostumbrados aquí.Lily señaló una amplia área en un pequeño mapa - La zona se encuentra alrededor de un lago muy bello y a pocos kilómetros de un centro neurótico, lo que nos permite tener cierta desconexión del caos de la ciudad sin estar lejos de ella, y quisiera hacer enfoque en ello como uno de los elementos para lograr un aire reconfortante y cálido - a medida que hablaba iba acomodando una serie de dibujos e imágenes delante de Pietro – Estos paneles rectangulares con cortes longitudinales que simulan las tonalidades de la madera, pero de manera uniforme, son buenos para dar un toque rústico y combinadas con grandes ventanales logran una fusión perfecta con el contexto natural del lugar, además, al ocupar poco espacio, podemos distanciarlos lo suficiente para edificar varios y aun así mantenerlos lejos uno de otro.Ya impaciente, le pidió: - Si pudiera decirme algo sobre lo que le dije o sobre lo que observa, sería de gran ayuda para poder terminar esto cuanto antes y no hacerle perder más tiempo. - Anteriormente, con Rubens hemos logrado cerrar negocios empresariales en un mesLily abrió grande los ojos al escuchar esto, terminar de diseñar ese tipo de proyectos en un mes, era imposible de imaginar
–Suelo ser directo en esos proyectos porque no me gusta hablar de más, pero este es personal, y a los trabajos personales suelo dedicarles de seis meses a un año, porque necesito algo más, no solo algo funcional y que me dé rédito, para eso ya tengo un par de centro comercial, quiero algo para mí, ¿Comprende Señorita Loren?
Por eso no quería edificios.- Comprendo, entonces, con esa información creo que podemos terminar todo esta semana – era absurdo esperar que le hablara algo más de él y sus gustos, tendría que seguir a ciegas.- ¿Pretende terminar un trabajo que planeo seguir de manera minuciosa en tan solo una reunión?- No - Lily sonrio - Pero pensaba que podríamos lograr un punto medio entre sus tiempos y los míos, Señor Vermont, ¿Hay algo que quiera que mantenga de esta propuesta?Por no recibir la propuesta, se giró hacia la caja a su lado - Okay, tengo once propuestas másPietro observaba como Lily sacaba más y más imágenes y bocetos - ¿Preparaste todo esto en una semana?- Sí, Usted necesitaba una propuesta esta semana, pero no podía venir hasta aquí solo con esto.- Señorita Loren…- Un momento, estoy buscando una que creo que nos servirá para poder conversar sobre el diseño de las fachadas, pero no sé por dónde estará …-- Lilian… ¿Puedes mirarme un momento?- Sí, enseguida- Ahora – Pietro no tenía mucha paciencia y no e
- ¿Por qué volvió Señorita Loren?Eran los únicos dos en la cafetería y Lily miraba las opciones en el menú antes de acercarse al mostrador para hacer su pedido.- ¿Mm?- …- Lo siento, leía el menú y no escuche su pregunta.- Me preguntaba por qué volvió después de cinco años – hacer esa pregunta había sido inexplicablemente difícil para Pietro - ¿Está aquí solo por el proyecto o hay algo más?Pietro tenía un objetivo para ese encuentro, que definiría el resto de su vida, así que, aunque fuera imperceptible para Lily, él estaba ansioso.Sabía que la propuesta que le haría sería difícil de explicar, pero el tiempo se acababa y ahora que ella estaba allí debía aprovecharlo.Si sus fuentes estaban en lo correcto, Pablo ya se habría cansado de jugar con mujeres y huir de prestamistas por toda la costa del pacífico, y volvería cuando su abuelo definiera la fecha de su boda con Samantha.Y el abuelo Vermont estaba desesperado por esa unión después del fiasco del matrimonio de Lily y Pablo.
- Señor Vermont – el Director del hospital fisionaba sus manos, nervioso ante Pietro Vermont - ¿Podría acercarse a llenar la información de la paciente?- … - La imagen de Lily desvaneciéndose en sus brazos se repetía en su mente aún, y no escucho al director Rocher cuando se acercó a él.- Sería útil conocer su grupo sanguíneo por si es necesario - intentó nuevamente, asumiendo que Pietro no quería pasar por el proceso de admisión.- … - preocupado, sacó su teléfono y envió un mensaje a su secretario, pidiendo toda la información de Lily.- Doctor, Señor Vermont, la Señorita Loren se encuentra estable, ha sido un desmayo – una mujer madura se acercó a ellos – Pudimos encontrar algo de información útil en su celular – le entrego una bolsa transparente con la billetera y el celular de Lily - No hay heridas visibles en el cuerpo de la joven y hemos extraído sangre de la paciente para realizar estudios completos, esperamos poder dar con el origen del desmayo pronto, pero sería de mucha a
Luca, que ya podía retirar las niñas de allí, salió apresurado.- El padre de las niñas falleció, él es el tío – le explicó Rose a Matthew, que se había apresurado hacia la cama de Lily y medía su pulso.Pietro aún no podía terminar de asimilar todo lo que acababa de descubrir.¿Cómo pudo no aparecer nada de eso en las investigaciones de su secretario?No solo era padre, tenía dos hijas.Miró a Lily en la camilla.La había buscado por cinco años y al fin tenía la oportunidad de hacerla suya, ahora no había vuelta atrás, no la dejaría escapar.La idea de una familia, aunque nunca antes había cruzado por su mente, se había instalado en el centro de su pecho.“Es el tío”“Tan segur como de que mis hijas son el vivo retrato de su padre”“Ese señor es nuestro abuelo”Se levantó, ajustó su corbata y miró a Lily.En su interior, Pietro comenzó a sentir que se asfixiaba.Debía acelerar su matrimonio con Lily antes de que Pablo apareciera.Lilian comenzó a moverse, y Matthew se apresuró a su l
Para cuando Lily despertó, la luna en lo alto bañaba el cuarto del hospital.Miró el techo de la sala con un nudo en la garganta.Si su cuerpo no era capaz de manejar una discusión como esa con Pietro, ¿Cómo enfrentaría Samantha?Durante la última semana se repitió a sí misma una y otra vez que todo estaría bien. Y ciertamente, cuando estaba ocupada con su trabajo o cuando sus hijas dormían a su lado, creía que podría con todo.Pero en ese momento, estaba solo ella, y ante ella misma, no había mentiras perfectas.Limpio con sus manos la humedad a los costados de sus ojos.- No es momento de Llorar Lily – se dijo.Cinco años atrás, cuando arribó en un lugar desconocido, lejos de casa, con sus niñas revoloteando en su vientre, supo que no era momento de llorar.Se fue para huir del dolor, después de que Samantha se burlara de ella sobre la tumba del hombre que amaba, no para seguir temiendo.Ella iba a salir adelante porque debía hacerlo.Porque era madre.Así que se dispuso a levantar
En realidad, era la segunda vez que Pietro la veía así, había visto una sonrisa igual de amplia y ternura en sus ojos el día de su boda, pero era la primera vez que se dirigía a él.- Tú tenías diez, pero yo… - estaba demasiado avergonzado para admitir su edad.Ciertamente, incluso el mismo se aferraba a la idea de ignorar la diferencia de edades.- Fue hace dieciséis años, si tienes treinta y ocho ahora, tendrías unos ¿veintidós? - calculó en voz alta.- … - Pietro se sentía extremadamente incómodo al pensar en ello – Tenía veintiuno, aún no los había cumplido, pero, sí.- Así que decidí que el frente de mi casa no daría a la calle, sino a la casa de ms padres, podría desviar esa calle – continúo con orgullo Lily – Hablar sobre cómo sería mi casa se volvió un hábito igual acompañar a otros a diseñar la suya.- ¿Por qué casas? ¿Por qué no edificios o centros comerciales? Rubens tiene amplio repertorio de clientes, pero es más abierto a proyectos de esa índole.- Creo que diseñar una c
- Emma, apúrate - Eva apuraba a su hermana mientras espiaba a la sala del departamento de Rose por una fina apertura entre la puerta y el marco - ¿Qué te demora tanto?- Es que no me podía prender la campera - Emma rio por lo bajito, a diferencia de Eva que se sentía ansiosa, ella estaba entusiasmada.Eva la miró de reojo.- ¿Te trenzaste el cabello?- Sí, mamá me enseño, ¿Te gusta?- ¡Emma! - grito por lo bajito - estamos apuradas y tú te pones a trenzar tu cabello- Es para ser más eficiente - levanto las cejas - ¿Cómo vamos a escabullirnos si se nos enreda el pelo al salir? Tenemos que estar cómodas.- ¿No quieres que te lo corte? - Eva se giró hacia ella con una tijera entre las manos.- ja, ja, ja - rio nerviosa - no es necesario hermana.-¿Seguro? Será más eficiente dejarte pelada, así no se te vas a enredar el pelo ni tendrás que demorarte en trenzarlo.- ¿No estamos apuradas? ¡Vamos! Hablaremos sobre eso a la vuelta - Emma se coló entre Eva y el marco de la puerta.Caminaron e
No era quisquillosa con la comida, en el extranjero comería lo que sobrara cuando trabajaba de mesera en un restaurante, y bebería solo agua cada vez que pudiera acceder a ella gratis.Sin una buena cobertura médica y un embarazo avanzado, era eso o volver a casa.Por suerte conoció al Doctor Park o con su presupuesto, no habría sobrevivido al parto de las niñas.Miró por la ventana.A su madre le gustaba la lasaña y su padre la cocinaría el último domingo del mes, sin excepciones.Había comido un tercio de lo que había en el plato.Nunca jamás probó una lasaña como la de su padre, por eso jamás le contó a nadie que era su comida preferida.¿Cómo lo supo Pietro?Acomodó las almohadas detrás de ella, y se recostó. Demasiado cansada como para acomodar todo de inmediato.La noche se veía despejada y serena del otro lado del cristal.Notó que una de sus muñecas estaba roja.El Doctor Park ajustó bien las tiras cuando la inmovilizó en la camilla.Practicaba yoga y meditaba con frecuencia c