Estuve allí todo el día practicando con Samuel, también tuve que presenciar el romance entre Hades y Esmeralda, andaban con mi hijo para arriba y para abajo lo llevaban, lo traía, él disfrutaba saber que me estaba molestando. Si me molestaba demasiado, intentaba concentrarme para poder aprender bien la coreografía, pero parecía que no lo iba a lograr, los celos me consumía, quería correr hacia ella y agarrarla por el cabello, Pero sabía que él no lo permitiría, no estaba en la posición para hacerlo.A la hora del almuerzo le pedí que me dejara compartir con mi hijo y que en esas horas que me permitirá darle los alimentos, estar con en unos minutos, ya que no podría estar durante la noche, esa noche saldría a bailar.Estaba segura de que se estaba haciendo el indiferente ante la idea de que me tendría que ver bailar para otros hombres, que no fuera él, ya me había demostrado antes que no le gustaba que lo hiciera, me valdría de esto para ponerlo celoso y así aprovecharía para llevar a
—Te quedará experiencia así lo pensarás dos veces para la próxima y discúlpame que sea tan directo y es que solo a ti como mujer enamorada se te ocurre hacer una cosa de esas, no estoy queriendo decir que una mujer enamorada tenga que cegarse ante las maldades de un hombre —argumentó—. Pero tú más que nadie conoces a Hades, sabes que no es el tipo de hombre que va por allí ocultando lo que hace, si hubiese tenido motivos para mandar a golpear a tu amigo lo hubiera hecho y te lo hubiera hecho saber, Así que no entiendo que te llevo a pensar que había sido él.—Ya por favor. No sigamos con el tema, no tengo ninguna explicación para lo que hice, me dejé llevar, no sé qué me hizo caer en ese profundo error, estaba ciega aunque aún no comprendo por qué, pero dejemos el tema porque si no voy a llorar y no voy a poder salir a formar parte del espectáculo y arruinaría lo que tengo planeado.—Como tú quieras linda. Termina de organizarte, has los retoques que te faltan, porque en unos minutos
Esa vez me dolía mucho, pero no podía reclamar ni nada porque no tenía nada con él, no era su pareja, no era nada de su vida, de eso me había encargado yo. El día que lo metí preso le dije que no quería volver a verlo, qué hiciera cuenta que estaba muerto para mí, pero parecía que ahora la muerta era yo para él.Lo amaba demasiado, pero seguía siendo el maldito infeliz que un día conocí, sus mismas actitudes, su arrogancia porque simplemente no era capaz de entender que lo que hice no lo hice con la intención de lastimarlo, que estaba confundida, ni siquiera podía explicar por qué había llegado a esos extremos.Iba camino a la habitación de mi hijo, ya me había calmado en el camino, me encontré nuevamente a Samuel, me dijo que si tenía unos minutos para hablar y le dije que en ese momento no me sentía en los ánimos para hablar.Él lo entendió y nos despedimos, me fui a la habitación de mi hijo, me retiré el maquillaje y me metí a la cama junto a él, acariciaba su pequeño cuerpecito mi
Estaba en casa, decidí llamarlo, quería saber de mi hijo, me respondió la niñera, la había llevado con ellos, dijo que el señor había dejado el teléfono en la pañalera de Ares porque había estado todo el tiempo con él, que Ares se había dormido y el señor se había retirado con su novia.Le aclaré que ella no era su novia, le pedí qué le diera muchos besos y abrazos a mi hijo, me acosté y le dormí, me había, al levantarme tome una ducha y tuve que tocar, usando los recuerdos de Hades tuve un orgasmo, lo extrañaba tanto, lo necesitaba.Salí y estuve un minuto con las chicas, ella preparó cena y hablamos de sus vidas, evite contarles lo que pasaba con Hades, aunque era obvio que lo sabían, solo que eran prudentes, me despedí y fui a la habitación, cepille mis dientes y entré, tome mi móvil, Hades no tenía redes sociales, pero me di cuenta de las fotos que había subido Esmeralda, decía que le estaba pasando bien, me las había enviado Samuel.Me molesté tanto, le escribí a Hades y no respo
Había logrado quedarme dormida, como había ido tan tarde a dormir, me levante muy tarde, cuando revise tenía las fotos de Ares, se veía muy feliz, le agradecí a la niñera, hicimos una videollamada, vi a mi hijo, y al fondo miré pasar a Hades con Esmeralda, me sentí incómoda y me despedí.Le escribí a Max para saber si podíamos vernos y me dijo que sí, pero que debía ser en la noche, le dije que por mí estaba bien, así tendría tiempo para dormir más, deje caer mi cuerpo en la cama y me había dormido unas 4 horas más lo supe al levantarme y ver la hora.Me duché y salí a buscar que comer, estaba muy hambrienta, las chicas me ofrecieron hacer algo, pero les dije que ya lo haría yo misma, me hice unos emparedados, hable con algunos compañeros.Necesitábamos dejar algunas cosas listas, sé acerba la graduación y teníamos muchos deberes, Andrés y Sandra quedaron de venir a mi casa a dejar todo listo, por lo que no tenía que salir, me puse ropa adecuada para esperarlos.Unos minutos más tarde
Tuve que despedirme de Max y llegar al club, mientras iba en camino lo maldecía, era un infeliz, pero no quería ni podía permitir que Samuel se quedará sin empleo, sabía que él era capaz de despedirlo sin importar su tiempo de servicio o su pequeña amistad, que se reducía al saludo y explicación diaria de trabajo, por otro lado, Samuel le tenía una gran estima.En lo único que Hades era realmente bueno era en la cama y como padre, en la cama se le podía reprochar su agresividad, no eran justo que teniendo los centímetros que tenía, fuera tan agresivo, disfrutaba de hacer sentir algo que sin necesidad de ello se podía sentir, pero él disfrutaba de ver sufrir sexualmente a las mujeres.Como padre era el mejor, tan protector, tan amoroso, lo cuidaba más que a su propia vida, no tenía como quejarme, siempre estaba pensando en él, en su bienestar, en su futuro, así debería ser en todo, pero está tan dañado, que no puede ver qué lástima a los demás, no le importaba pasar por encima de quién
—Estás loco Hades, como tú me has dicho muchas veces, fui yo quién terminó lo nuestro, pero intenté muchas veces solucionarlo, hace menos de un día me restregaste en la cara como te estabas divirtiendo con otra mujer —reproché—. Te pedí que la sacarás de tu vida en muchas ocasiones y tú me ignoraste, me dijiste muchas veces que no era nadie en tu vida, que lo único que nos unía era nuestro hijo, ahora me sales con que eres mi dueño y que debo obedecerte. —No te estoy pidiendo argumentos ni explicaciones, Zia te estoy dando una orden, vete a casa ahora mismo. —No, no iré a ningún lado, soy adulta y responsable de mis actos, puedo cuidarme sola. —Escucha, no estoy jugando contigo, no te estoy preguntando que quieres y mucho menos que tan responsable eres de tu vida, no puedes simplemente hacer lo que te venga en gana, tú eres mi mujer, la madre de mi hijo y tengo derechos sobre ti, es por eso que te estoy ordenando que vayas a casa.—Lo único cierto es eso es que soy la madre de tu h
—Puedes hacer lo que te dé la gana Zia, solo asegúrate de ir a trabajar. Se acercó mucho y me miró unos minutos, me estaban poniendo nerviosa, intenté moverme y me jaló hacia él. —Tú eres mía, solo mía, espero que lo entiendas y se lo hayas explicado a ese tipo. Pensé que me iba a besar y hacerme el amor para demostrarme lo que decía, como solía hacerlo, me hubiera encantado que le hiciera el amor, así de estúpida era me dije cuando él se había marchado. Lo deseaba tanto, sentirlo besarlo quería estar en sus brazos aunque no me mereciera.Salí detrás de él, aunque no con la intención de seguirlo, sino de ver a mi hijo, él estaba jugando con su niñera, apenas me vio intento caminar para llegar a dónde estaba, pero llegué antes, lo subí a mis brazos y lo abrace fuerte diciéndole cuánto lo había extrañado y cuánto la amaba.Las chicas me preguntaron que si iba a desayunar y le dije que sí, que nos prepararán algo para comer y que por favor lo llevaran a la habitación, me lleve al niño