Lo miraba, se dio cuenta y se acercó, me dijo que pasaría el día con nosotros, lo cual me pareció demasiado tierno, se fue a duchar y yo le ordene a la empleada que nos dejara el desayuno en el jardín, fui a organizar a nuestro hijo y me organice.Una hora más tarde estábamos en el jardín tomando el desayuno y su teléfono, sonó.—¿no vas a responder?—No nena, trabaje mucho anoche como para dedicarle tiempo al trabajo en este momento.Él intentó apagar el teléfono, pero siguió sonando.—contestaré.—No tiene importancia nena, apagaré el teléfono y así ya no los molestarán, no te preocupes.—Por supuesto que tiene importancia, permíteme teléfono, contestaré yo.—Hola Betsy, te he contestado yo porque quería preguntarte algo. Mi marido dice que tú eres muy capaz y que tienes mucha experiencia, pero quiero saber cómo es posible que no puedes hacer nada sin tener que llamarlo, estás llamando a toda horas, estás interrumpiendo a cada instante, él ahora está aquí conmigo, nos está dedicando
—Es como que si yo te pidiera explicaciones cada vez que vas a ver a tu amigo Max, para ti sería molesto. Hablando de eso, voy a aceptarlo, porque quiero que las cosas vayan bien, es una amistad que para ti es conveniente, me está costando aceptarlo, pero lo hago porque quiero verte feliz, lo mío es solo trabajo, es importante, es laboral, no es un capricho, ni cuestión de amistad cómo en tu caso, así que no vamos a hablar más del tema —explico imponente—. Betsy va a seguir al frente de esas empresas en lo que tú puedas estar preparada para asumir la responsabilidad y espero que puedas llevarte lo mejor que puedas con ella.—Claro, es solo tu decisión, felicidades, señor soltero. —Puedes hacer las pataletas que desees, no tendrás que verla más que cuando sea necesario, no tienes que verla, no tienes que saber de ella, pues yo me haré cargo mientras tú asumes el control de esas empresas, por ahora procura no molestarte cuando sepas que ella está requiriendo de mi presencia en los luga
—Tú tienes razón, por eso me parece perfecto que estés a mi lado, sé que nuestros hijos serán educados y las mejores personas, así como tú lo eres.Vi como fue a confirmar que nuestro hijo estuviese bien, regreso a la cama y allí nuevamente me permitió estar en sus brazos, nos habíamos quedado dormidos, estábamos agotados, había sido un día muy divertido y lleno de actividades.Me levanté primero para cambiar a nuestro hijo y lo llevé conmigo a la cocina, le dije a la empleada qué esa que esa mañana yo haría el desayuno, quería sorprenderlo, sabía lo que le gustaba, me había dicho que Marcia le había enseñado lo que se había convertido en su comida favorita. Me había dado la receta, así que intentaría preparárselo, nunca había cocinado para él, me parecía un momento adecuado. Me di cuenta de que venía de la habitación a la cocina caminando como un zombi.—¿Necesitas un café? —pregunté—Por supuesto, nena, te lo agradecería, pero primero me tomaré una ducha, para venir a saludarte a t
Ares se había despertado de nuevo, procedí a organizarlo para poder irnos a ver a su padre, llamamos al chofer y nos llevó al lugar. Comencé a preparar todo para recibir clases mientras lo veía trabajar, caminar de un lado a otro, no tenía ni un minuto descanso.Algunas veces había tenido que salir porque no podía realizar el trabajo en el lugar que estaba, cuando termine mis clases se me dio por recorrer el lugar, recordar viejos tiempos.Entré a la que solía ser la oficina de Marcia y allí estaba Betsy, intenté salirme, pero ella me pidió que me detuviera para que pudiésemos hablar, le dije que no tenía nada que hablar con ella, pero insistió.—¿Qué haces aquí? Pensé que trabajabas en otra empresa, pero estás aquí y hasta ya tienes una habitación. ¿puedes explicarme qué es lo que estás haciendo en este lugar?—No estoy haciendo nada, solo he venido a buscar a Hades, pero al no encontrarlo decir venir a descansar aquí, estoy bastante cansada —explico Betsy —hemos tenido mucho que hac
Nos habíamos ido a la habitación y después de lograr que Ares se quedará dormido nos hicimos mimos y hablamos sobre todas las cosas que nos habían pasado últimamente.—Sabes amor había estado pensando y me gustaría volver a bailar en los shows, no siempre, pero me gustaría hacerlo de vez en cuando, eso me ayudaría a liberar un poco de estrés, además Samuel se ofreció enséñame lo que últimamente están haciendo aquí¿qué te parece? —pregunté.—Tienes que estar bromeando, tú no vas a bailar y menos ahora que eres mi mujer, no voy a permitir que ningún hombre te mire, así que es un rotundo no, no volverás a bailar, si quieres bailar, baila para mí.—Hades, no te estoy pidiendo permiso, te estoy contando algo que estoy pensando en hacer, no me lo prohíbas como que si fueses mi dueño, no lo eres, el día que yo decida ir a bailar lo voy a hacer.—Por supuesto que soy tu dueño, ordeno que no lo vas a hacer, espero que no te atrevas a desobedecerme, porque no quiero estar molesto, ya sabes lo q
—Ya lo ves, has logrado que Ares se despierte.—No lo he hecho yo, a qué te refieres, si ambos estamos hablando, tú eres el que está discutiendo por una decisión que ya he tomado, no me culpes por ello, lo haré dormir de nuevo.—Por supuesto, que es tu culpa. Si tan solo no tuvieras la idea de salir, exhibirte como una mujerzuela.—¿Entonces crees que porque quiero bailar soy una mujerzuela? ¿Crees que las chicas que trabajan en el club lo son? —pregunté alterada—. No, ¿verdad?. Cuando las miras a ellas piensas que solo es un baile, pero porque lo que quiero hacerlo crees que soy una mujerzuela. Estás loco Hades, estás muy mal.—Puedes pensar lo que quieras, pero cuando de ti se trata puedo ser loco y todo lo que sea que digas, pero no vas a bailar, no va a suceder, no voy a permitir que esos miserables te vea en tan poca ropa y moverte de la manera en que lo harás —afirmo—.¿Crees que no me doy cuenta como miran a las otras chicas? Las desvisten con sus miradas. De ninguna manera, ere
—Qué diablos pasa contigo, porque asustas a la gente de ese modo, porque has activado la alarma de incendios, sabías que eso asustaría a la gente. ¿Quieres arruinar acaso la reputación de este lugar? —¿Crees que tengo humor para hablar de lo que piense la gente? Me importa un comino, ahora lo que me importa es que me has desobedecido —siseo furioso —¿por qué lo hiciste, qué diablos pasa contigo? Pretendías bailar aun cuando te dije que no lo hicieras, pretendías salir ahí, exhibirte, mírate cómo estás vestida. —Suéltame, estás loco. —¿Por qué estás actuando así, tú no eres así? Por qué dejas a nuestro hijo al cuidado de una empleada, tú eres su madre, deberías ser tú quién lo esté cuidando. —No le va a pasar nada porque lo dejé una sola noche con alguien más que no sea yo, tú sabes que es gente confiable. No creo que alguien se atreve a sacarlo de este lugar, no cuando saben que tú eres su padre, Hades Cálmate es solo ropa, no tienes por qué ponerte tan molesto, además ya lo arruin
—Vístete y ve a ver a tu hijo.Era una infeliz, estaba tan molesta, me vestí y salí del lugar detrás del, comenzó a organizar el lío que hacía unos momentos atrás habíamos provocado. Yo fui a ver a mi hijo. Dormía profundamente.Tomé a Ares con mucho cuidado, no quería despertarlo, recogí sus cosas y salí de la habitación, estaba a punto de salir cuando me encontré a Samuel, me dijo que lo sentía mucho, que no quiso delatarme con Hades, pero que había tenido perder su trabajo cuando él se hubiera enterado de que él me había ayudado.Le dije que no se preocupara, que lo entendía y que por favor no le dijera que me había visto salir, continúe mi camino, salí del lugar y tomé un taxi, sabía que si me iba con Favio o algún conocido él lo sabría, en el camino llamé a Max y le pedí que me dejara quedar en su casa esa noche.Estuvo de acuerdo, le indiqué al taxista donde llevarnos, nos esperaba en la puerta, me ayudó con Ares lo puso en su cama y me dijo que podía dormir allí, él lo haría en