La vista desde la mesa que tenemos es hermosa, todo el lugar lo es, hay música de fondo con volumen bajo, pero que logra deleitarnos con buena voz e instrumentos tocando armónicamente. Sé que es poco, sin embargo, estoy sintiendo que somos una relación normal, que de hecho se podría llamar relación.
¡Esta es nuestra primera cita! ¡Hay vida además del sexo! Qué bueno tener la oportunidad de conocerlo. Ya sé que sabe vestirse para la ocasión y que es amante de los buenos aromas. Es tan indeciso como yo y le gusta comer prácticamente de todo. No creo que yo pueda con una relación sin enamorarme, es difícil no hacerlo.
En la mesa veo a un hombre hasta un poco asustado, no acostumbra a estar en estos ambientes. Mirando alrededor vemos personas vendadas y nos resulta fascinante. El mesero nos trae de entrada pan aparentemente tostadas, con aceite y oliva y una salsa con la que podemos aderezar.
Devoramos e
—¡Trágame tierra! ¿Qué es todo esto? — pregunto sorprendida y de mal humor. —¡Te estamos sorprendiendo hija! Mucho tiempo sin verte y llegas acompañada— contesta mi madre. Nuestros planes han sido frustrados por Marcus y mi familia. Se las han arreglado para “sorprenderme” a mi llegada al apartamento. Al mismo tiempo han interrumpido los planes que venía tejiendo con Fernando. Apuesto a que Marcus fue el del brillante plan o quizás mi mamá ¡En serio no puedo creer que me hagan esto! Mi madre es Margarita Viccini, siempre cuidando su figura y apariencia física. Las joyas caras, spas, tiendas de marca y saber los chismes de farándula son sus oficios. Mi padre le consciente todo, y también me consciente a mí. Son personas con muchos asuntos por resolver, no es el mejor matrimonio del mundo, pero han tratado de mantenernos unidos como familia y eso deja a mi herman
Las palabras de Fernando fueron contundentes, no hay que hablar de que exista algo entre nosotros en el futuro porque está más que claro que se acabó. Debo agradecer a mi familia y a Marcus por semejante ayuda, yo que ya estaba doblegando su ego y sus ínfulas de macho alfa. Derrotado regreso a mi apartamento y ahí están ellos como si la fiesta fuese a continuar. —¡Ericka, querida mía! Se ha ido tu amigo, pero la fiesta es aquí, debemos comer y beber hasta la media noche a ver si nos embriagamos— dice mi hermana, Laura. —¡Niña por amor a Dios! Podemos compartir, pero no, así como dices que no es un antro de libertinaje— dice mi madre. —Me siento cansada, no estoy de ánimos para fiestas, lo mejor es que vaya a dormir, ha sido un largo viaje— respondo en voz alta para que todos escuchen. —Hija, pero si a penas te vemos después de tanto tiempo, al menos cenem
—¿Qué haces aquí Fernando? — pregunta mi madre Eva.He llegado a medianoche, conduje hasta mi casa tan pronto fueron obvios los planes de Ericka. Creí que podría convencerla de no cometer alguna tontería en estas tierras, pero fallé. Le había comentado a mi hermano que podría convencerla de hacer lo que yo quisiera, pensé que si la enamoraba podría controlar la situación, pero no funcionó.—He venido, no tenía caso quedarme en la ciudad— respondo.—Muchacho ¿Has olvidado lo peligrosa que son las calles? Tu solo tan oscuro, si te pasaba algo ¿Quién te hubiera ayudado? Debiste pasar la noche en un hotel o donde fuera— dice mi madre.—La ira me nubló. Ericka no sólo tiene planes con estos terrenos de
Ella corre al establo como si yo le tuviera que correr detrás. Termino mi desayuno con especial calma y continuo en mis pensamientos. Mi hermano Rodrigo entra a la cocina y automáticamente se hace notorio su interés por Laura ¡Lo que faltaba! Le gusta una Viccini.—Entonces a dónde iremos Fernando, estoy emocionada— Mónica pregunta.Otro problema en el que me adelanto a lanzarme, Mónica. Tendrá la cita que ella siempre quiso, pero por las razones incorrectas.—Podemos cabalgar un poco al final de la tarde y después te llevo a cenar a la ciudad un día que planifiquemos con más tiempo, porque esta semana tengo muchos pendientes— respondo.—¡Me parece genial! Prepararé mi caballo desde ya y quizás algo para bañarnos en algún río— dice entusiasmada mient
Las miradas de dos locos enamorados lo dicen todo, Rodrigo debe estarlo para poner sus ojos en la más liberal de los Viccini, mi hermana, pero hay que dejarlo saborear sus piernas, quizás se canse de ella o más rápido ella lo desilusione a él.Se supone que nos hemos despedido y mañana regreso con el arquitecto a mostrar el proyecto a Fernando. Laura a pesar de decir adiós no deja de hablar con Rodrigo.—Ericka, Rodrigo quiere mostrarme la hacienda ¿Crees que podemos dar un paseo? — dice Laura.—Bueno, pero sean breves porque estamos lejos y debemos irnos— contesto.Entusiasmados ambos salen y nos quedamos Fernando y yo en la cocina.—Parece que nuestros hermanos están interesados en conocerse— comenta Fernando.—Si, eso parece, pero Laura no
Me dejé llevar por mis impulsos e invité a salir a Mónica. Cabalgar con ella en una cita, ¡Sólo a mí se me ocurre! Hay cosas que no fueron y no serán, como el hecho de que nunca le he visto con otros ojos que no sean de amigos.Me deje llevar por el impulso, honestamente si lo de Ericka hubiera sido más que sexo con ella si quisiera estar, pero no podremos nunca estar juntos, esa mujer es una malcriada que sólo ha conocido dinero.Sumergido en mis pensamientos mi madre entra a mi dormitorio.—Hijo, estoy muy a gusto de que invitaras a salir a Mónica. Sé cómo miras a Ericka y espero que tus ojos también logren mirar así a Mónica que es quien te conviene y mejor nos hace— dice mi madre.—Madre, pareciera que Mónica te ha enviado a hablarme&mdash
Por impulsivo me puse en esta posición tan incomoda. Mónica desnuda en frente mío, no entiendo que señales ella habrá visto, pero nunca le he considerado con esas intenciones, para colmo tiene a mi mamá comprada y ahora ¿Cómo le rechazo sin ofenderla? Su amistad es muy apreciada por mi familia y por mí.—¿Qué pasó? ¿No has visto a una mujer desnuda que sabe lo que quiere? — pregunta mordiendo sus labios.—Por favor, vístete. A penas salimos en una cita por primera vez. Siempre te he visto como a una hermana, deberíamos ir despacio, a lo mejor no te gusto tanto como crees— comento.—Estoy muy segura de mis sentimientos hacia ti. Estoy convencida de que me gustas y quiero estar contigo ¿Por qué te niegas a probar? ¿Tienes miedo de que te g
Mientras caminamos noto como el arquitecto mira a Ericka, parece que todos los hombres a su alrededor están interesados en ella. Este señor ya está avanzado en edad, debe rondar los cincuenta años, pero es de esos hombres que quieren aparentar estar jóvenes y actualizados. Viste ropa muy fina, se ejercita y deja ver un poco de su pecho para alardear de ello ¡Qué patético!He pensado en portarme bien, de todos modos, ella hará lo que desee con sus cosas y me guste o no así será, le guste a ella o no me tendrá de socio y vecino, aunque mis intereses están alejados de los suyos.—Fernando, quiero hacer algo precioso, construir aquí un lugar soñado para las parejas pasar su luna de miel, aniversarios, eventos importantes con la idea de que nos posicionemos muy bien en el mercado, quiz&aacut