Necesitaba respirar y tranquilizarme, no es que la vaya a ver desnuda de todas formas.
Me di la vuelta para comenzar a vestirme. Estaba muy nerviosa, así que me puse el pijama lo más rápido que pude y en cuanto volví a darme la vuelta, ella ya estaba dentro de mis sábanas.
-¿Me prestas una remera para dormir? El brassier es muy incómodo -dice mientras rascaba su brazo.
Tomé la primera que encontré y me di la vuelta para que pudiera cambiarse tranquila. Escuché una pequeña risa y cuando la miré, ella estaba mordiendo su labio inferior.
-¿Te avergüenza mirarme?
-No... Yo.. es que
-Ven -dijo con una sonrisa
Levantó su mano y me acerqué hacia ella, hizo lugar en la cama para que me acostara a su lado y así lo hice luego de apagar la luz, intentando caminar por la oscuridad.
-¿Quieres que me ponga otro pantalón?
-No, es solo que...eres l
Quizás era una exageración ir a la escuela en auto, quedaba muy cerca pero la verdad es que no tenía ni una mierda de ganas de caminar por las mañanas. Quizás si al mediodía o en otro momento, pero cuando recién despertaba no quería mover ni un dedo, no entendía como había personas que se despertaban específicamente para ir a correr.Ella estacionó el auto y me dio las llaves apenas bajamos, regalándome una hermosa sonrisa mientras tomaba mi mano para comenzar a caminar hacia la entrada.Me tranquilizó la idea de que había algunos alumnos afuera todavía, eso significaba de que algún profesor venía tarde, por lo que si tenía suerte esta mañana, ese sería el profesor de matemáticas.-¿Nos vemos más tarde? -pregunta al dejarme en el pasillo-Si, después de clases -sonrío-Que tengas una linda mañana, adiós -dice después de dejarme un beso en los labios.Comienza a correr po
Previamente...Narrador omnisciente.El cuerpo de Abi chocó contra la vieja puerta de madera mientras que Alison la arrinconaba contra su cuerpo con besos desesperados. Sus lenguas se entrelazaban entre sí, sus manos recorrían el cuerpo de la otra mientras que los botones del pantalón de la morena eran desabrochados.—¿Crees que sea una buena idea? —pregunta Abi con una pequeña risa mientras permite que Alison le baje el cierre.—Este aula está abandonada desde hace tiempo, nadie viene por acá —murmura contra sus labios.Su relación no había ido más allá de salir un par de veces, sino que era la primera vez que tenían un acercamiento más íntimo por así decirlo. Alison la invitó a su casa durante las vacaciones, pero nada más que eso, solo besos. Sinceramente Abi a veces se sentía un poco culpable por estar jugando a un juego muy peligroso con Lucrecia. Porque aunque no se habían vuelto a ver desde e
Mierda, el día había terminado ser una completa sorpresa. No me esperaba ni la noticia de mi madre, ni que mi tío me ofreciera un trabajo mejor, estaba muy feliz. Aún no podía creer que las cosas se estén acomodando en mi vida, que todo comience a ser más sencillo y sentía que de alguna manera me lo merecía.Luego de seguir hablando sobre el proyecto del taller me despedí de ellos para darme una ducha y comenzar a hacer mis trabajos. Me había atrasado toda la última semana de clases y tenía que recuperarla con algunos trabajos prácticos que me dieron los profesores.Le pedí el celular prestado a mi madre para llamar a Damián y preguntarle si me prestaba su computadora, no me gustaba tomar las cosas sin permiso por más de que tuviera confianza con mi primo. Luego de que él aseguraba que no había problema y que traería unas cervezas para tomar a la noche cuando saliera de trabajar comencé con el duro trabajo de historia hasta que unos toques en la puerta me inte
—Hola preciosa —sonreí— ¿Como te fue con Alex?—Me fue bien — arrugué la frente cuando noté que no había nada de gracia en su rostro—¿Pasa algo? —pregunté al ver como se sentó seria sobre mi cama.—Pasan muchas cosas, muchas cosas —suspira y se queda unos segundos observándome—. Te haré unas preguntas y realmente espero que me lo digas con sinceridad, Selene.—Si —respondo sin entender— ¿De que se trata?—¿Tienes idea de lo que está diciendo Lucrecia? —ella levanta una ceja y no despega sus ojos de mi.—¿Lucrecia? No, ni idea —levanté los hombros sin darle importancia y suspiré.Ella sonrió cínicamente.—¿No? ¿Estas segura de eso?—Estoy segura. Si quieres preguntar algo puedes hacerlo directamente —sugiero mientras nos observamos.—No sabía que ella y tú se llevaban bien¿Ahora son amigas?—¿Nosotras? —dije frunciendo el ceño— ¿Que dices?—Estuve mucho tiempo preocupada en pensar que eran e
—Bueno, tampoco soy un fantasma para que me mires así —una pequeña sonrisa salió de sus labios.—Creo que es hora de irme —murmura Damián—. Compraré unas pizzas para más tarde ¿Te quedas? —pregunta mirando a Milena.—Si, acabo de decirle a mis padres —sonríe—Perfecto. Ahora me voy a ver a Chris un rato—¿Vas ahora porque mi tío comienza su turno? —ella levanta una ceja divertida.—Exacto, eres inteligente —responde con una carcajada—. Primita, nos vemos luego —me mira
—¿Para tener una vagina? —ella está avergonzada. Asiento mientras acomoda un mechón de mi cabello—Si. En mi caso el ovario y el testículo se desarrollaron juntos, por lo que podía ser fértil. Pero la operación es más estética que para la salud así que todavía no decidí que es lo que quiero hacer.—¿Puedo preguntar algo?—Si, dime.—¿Tu pene se desarrollo normalmente o cual es la diferencia?—Uhm, la única diferencia es que tengo un ovario, nada más. Mi pene es normal, supon
—¿Y si ellos se burlan?—Demuestran lo patéticos que son ¿O nosotras vamos por ahí preguntando si tienen pelotas o una vagina? —tuerzo la boca—. No, nadie le pregunta porque a nadie le interesa.—¿Y tú? ¿Que piensas sobre mi? —me atrevo a sostener la mirada, necesito confirmarlo.—Tengo que admitir de que tengo muchas dudas porque no tenía idea sobre el tema, pero mis sentimientos por ti no cambian en nada, Sel —acaricia mi mejilla—. A mi no me importa si tienes pene, si tienes vagina o si eliges una cosa u otra. Bebé te quiero por como eres, el resto es algo tuyo y amaré cada cosa de ti, sea lo que sea que elijas.—¿Lo dices en serio?—Muy en serio —sonríe— ¿Que creíste?—Creí que te daría asco —bajo la mirada y la vuelve a tomar mi barbilla.—¿Como va a darme asco una persona tan buena y valiente? —me mira y apenas puedo mirarla por todas las lágrimas de mis ojos—
Narrador omnisciente.Lucrecia entraba al pequeño vestuario golpeando las taquillas, llena de ira y frustración por lo que acaba de pasar. Milena se había atrevido a humillarla frente a sus amigos como si nada, ella se había vuelto una zorra desde que salió con Selene.¿Cómo se atrevió a decir frente a todos que se había acostado con Selene? ¿Dónde quedó la chica que se sonrojaba cada vez que la saludaba?—Deberías irte, pronto vendrán las chicas a practicar —Tatiana está sobre el umbral de la puerta, mirando como su amiga se descarga contra la pared.—Es mejor que te vayas, Tati. Quiero estar sola.—Es mejor que dejes de llorar por una idiota que no vale la pena y vengas a pensar en algo conmigo —Lucrecia levanta la mirada con furia y se encuentra con su amiga— ¿Que? ¿Ahora te la agarras conmigo?—Quizás si....—No, no. No vengas a decir que tuve la culpa de alguna