¿Esperaban que el testamento fuera de esta manera? ¿ que trata de ocultar Victoria?
Victoria había comenzado a llorar y a tirar cada cosa que se le atravesaba frente a ella, o estaba al alcance de sus manos pero Mauricio continuaba conteniéndola lo mejor que podía.— ¡Detente madre! Deja de hacerme quedar en vergüenza.— No lo entiendes Mauricio, yo…. Yo… —Decía entre sollozos después de haber terminado con ese arranque de ira— Entregue todo lo que tenía, juventud, libertad, y tiempo para que el estuviera bien, que fuera feliz y ahora resulta que me quiere pedir una prueba de adn, dudando de mi fidelidad, no puedo, no puedo con tanto dolor.En ese momento comenzó a sollozar y sus piernas fallaron, aunque Mauricio estaba sosteniéndola, aun no conseguía suficiente fuerza en las piernas para sostener tanto peso extra así que la colocó de inmediato en su silla.Victoria estaba limpiándose de nuevo las lágrimas pero en esta ocasión éstas si eran reales, envuelta en sollozos silenciosos y constantes.— Continúe licenciado — Dijo Mauricio — Lamento mucho todo esto.El abo
Erick había estado buscando a Luciana, aunque sin éxito, en ese momento se encontraba en medio del patio trasero de la casa. Pero su teléfono sueña, era Mauricio.— Hermanito, finalmente puedo hablar contigo.— Dame a mis hijos maldito bastardo— Dijo lleno de rabia Erick, y sin saberlo había tocado una fibra muy sensible de Mauricio, acababa de enterarse que esa m*****a palabra era la más apropiada para describirlo.— No digas estupideces, — Replicó con las quijadas apretadas el rubio— Solo te llamo para decirte que dejes las cosas así, ¿no tienes suficiente con todo el daño que le estás haciendo al legado de nuestro padre? Si sigues obsesionado solo conseguirás hundirnos a todos incluso a tu hijos a los cuales quiero darles todo, pero tú te interpones, ¿ qué clase de padre eres?— Uno que recuperara todo lo que le robaste.— No robe nada hermano, solo tengo lo que me coreresponde.— Sabes que esos documentos son falsos, eres una rata.— Yo no sé nada, incluso me siento devastado por
—— MESES DESPUES——En la villa de los Contreras en la habitación del matrimonio de Miranda y Mauricio los gritos se escuchan hasta por fuera de las paredes.— Te lo digo Miranda ya estoy cansado de esa actitud que tienes.Miranda jadea impresionada ante lo que su esposo le dice.— ¡¿Mi actitud?! Siempre he sido igual, tú eres el que ha cambiado por ese mocoso.— ¡Es tu hijo maldición! — La interrumpió Mauricio— Eres su madre, se suponía que debías amarlo, dejé a la pequeña por eso, para garantizar que estuvieras mínimo para uno de ellos, y no lo haces.— ¡¡ Lo hago!! — Gritó Miranda al mismo tiempo que se giraba y arrojaba en contra de la pared un jarrón fino que se encontraba cerca, haciéndolo añicos en el impacto.— Siempre que me necesitas para tus estúpidas reuniones familiares ahí estoy. ¿De que serviría tener dinero si no me va a evitar las cosas que me desagradan? Soy su madre a todo el mundo se lo digo.— Solo de imagen Miranda siempre tienes a alguien que cuida de Mauricio jr.
La oficina de Mauricio era un lugar que exudaba poder y tensión, en ese momento todos los que estaban presentes estaban con el cuerpo envarado ante lo que se les venía encima.— Por lo visto sigue con la idea de aceptar un socio comercial— El abogado Zurita, quien estaba notablemente en contra de esa asociación.Mauricio puso los ojos en blanco estaba cansado de toda la negativa de ese hombre.— Ya te lo dije Zurita el contrato es un salvavidas en el que necesito subirme, las acciones de mi hermano siguen congeladas y en proceso de sucesión ya que están intestadas, no puedo darme el lujo de continuar con las perdidas.— Comprendo esa parte señor Contreras— Dijo con un tono controlado— Pero también sé que los condicionamientos en el contrato que enviaron son armas de doble filo, como abogado no te recomiendo aceptar.En ese momento Mauricio se dirigió a Lorena Cuevas quien en todo este tiempo había sido su águila protectora.— Tengo gente que está encargada de revisar cada uno de los mo
El tiempo estaba en contra y Mauricio estaba ansioso, desde que había firmado ese contrato estaba con el sentimiento de tener el cielo en la punta de los dedos.Se mantiene preparando cada uno de los detalles él mismo, todo debía ser perfecto.. — ¡Josefina! — Llamó al ama de llaves.— La pobre mujer corrió al escuchar el grito desesperado.— Si señor— Se inclinó justo frente a él, así como el señor lo exigía, desde que el se había hecho el hombre de la villa, todos tenían que cumplir varias exigencias excéntricas.Entre ellas inclinarse al llegar frente a el, no darle la espalda o incluso no hacer ruido cuando él no los necesite, todos los trabajadores se habían vuelto fantasmas en ese lugar.— ¿Ya tienes el caviar almas preparado? — Estaba nervioso ante todo lo que estaba invirtiendo en esta fiesta, pero este tipo de excentricidades eran las que la gente acostumbrada a tener el mundo a sus pies estaba acostumbrada.— Si señor.— ¿Y el bourbon? Solo quiero que nos sirvan ese licor a é
Momentos antes de la impactante presentación, Luciana estaba ansiosa en el interior del helicóptero, necesitaba hacerlo pero no sabía si sería capaz.—Tranquila pelirroja— Susurraba Erick por el micrófono y los audífonos insonorizadores, al mismo tiempo que la tomaba de la mano como un intento por tranquilizarla. — Todo saldrá bien, ha hecho todo lo que queríamos, esta presentación es solo un pequeño gusto que te estás dando antes de destrozar todo lo que tiene.El pequeño tic nervioso que había desarrollado Erick desde el momento en que todo esto había comenzado no pasó desapercibido para Luciana, su ceja se hizo para arriba de manera inconsciente solo un instante, pero lo delató, todo esto le dolía.Y como no lo iba a hacer, el resultado del trabajo completo de la vida de su padre y gran parte de la de él mismo, estaba a punto de volverse cenizas. Luciana recordó cómo inicio todo.Erick estaba al teléfono y grita de manera sorpresiva:— No te preocupes Omar y ¡tranquilízate! no per
En medio de una oficina Luciana estaba a la expectativa de lo que estaba a punto de descubrir.El silencio era abrumador, pero Amelia se encontraba sentada a un lado de ella, buscando una proximidad que podría ser su único consuelo de no recibir el perdón de parte de Luciana.Había cerrado los ojos para organizar sus ideas hasta que finalmente decidió decirlo como le llegara a la mente.— Ya estoy vieja…— Comenzó— Y no es un chantaje, solo espero que me tengas paciencia, primero debo decirte que lamento mucho que mis decisiones te hayan hecho pasar por el infierno que has vivido en toda tu vida.— ¿A qué se refiere?— Preguntó Luciana, se sentía confundida y desubicada como si estuviera en una especie de sueño extraño de cual no pudiera despertar, sin saber si estaba haciendo un buen trabajo en ocultar sus sentimientos.— Tu padre Malcolm —Al ver la cara de sorpresa de Luciana, Amelia sonrió y asintió comprendiendo su estado— Si, no eres la única en la familia que se ha cambiado el nomb
En ese momento llega Erick y al ver a Luciana con la pequeña bebé en brazos tan llena de energía y con el rostro ilusionado, combinado con una emoción más que no lograba descifrar, se le rompe el corazón, y decidido a recuperar a su pequeño que estaba pendiente comienza algo que había estado rondando su mente desde que las circunstancias habían cambiado para mejor.Aunque eso solo dependería de Luciana.— Te ves hermosa— Susurró al mismo tiempo que colocaba su mano en la espalda de Luciana.Ambos estaban tan concentrados en la pequeña bebé que ninguno notó la mirada furtiva llena de rencor que Amelia le daba a Erick.Si las miradas mataran, él ya hubiera dado su último respiro.La mujer sabía de todo lo que había hecho sufrir a su nieta, así como el maldito del hermano, pero ya estaba ella a su lado y nadie se atrevería siquiera a verla feo, ni a ella o a sus bisnietos porque también iba a recuperar a su otro retoño.— Es nuestra pequeña Erick, finalmente pude conocerla— Un soll