— ¡Erick despierta! ¡Erick!— Parecía estar alucinando Luciana lo llamaba aunque su voz en lugar de estar llena de amor y anticipación estaba plagada de miedo… Terror completo— ¡Erick!.

Él comenzó a abrir los ojos, pero no conseguía enfocar lo suficiente como para identificar el lugar.

— Erick… finalmente despiertas — Susurra Luciana a su lado.

El instinto del moreno es tocarla pero sus manos están amarradas en la parte de atrás de una silla.

Poco a poco su mirada se fue aclarando e identifica las paredes grises el amplio lugar desolado y sin ventanas además del olor a humedad, se da cuenta que se encuentran en un sótano.

La risa macabra de Luisa inunda el lugar haciendo eco. Y eso llama la atención de Erick.

El hace un pequeño gruñido pero lo suficientemente alto como para que Jonas lo escuche por el pinganillo.

— Tranquilo jefe, ya vamos por ti solo necesitamos algo de tiempo… Cómpranos tiempo.

— Erick, finalmente despiertas— Dijo Luisa— Que bueno que me ahorraste el esfuerzo de busc