Samantha.
Esta mañana hice todo lo que me pidió el señor Wilson con rapidez y le comente que necesitaría un poco de tiempo libre ya que saldría al pueblo, me dijo que si y me presto la camioneta pata que fuera, después de bañarme busco entre la ropa quebtengo pero no hay nada de mujer solo tengo rapo de hombre termino escogiendo una camisa color azul cielo y unos pantalones color beich, intento hacer algo con mi cabello pero no hay mucho que pueda lograr mi cabello sigue siendo corto y disparejo, no me maquilló ya que no tengo nada de eso ni siquiera tengo perfume para disimular el aroma a caballo, por fin me subo a la camioneta y conduzco al pueblo pero me siento muy nerviosa nunca e tenido una cita en mi vida si salí en grupo con compañeros de la escuela pero nunca un cita de verdad, siempre me aísle del romance y todos los lobos que me invitaban siempre decía que no, siempre quise qué mi primera cita fuera con mi pareja pero no pense qué me estrenará tanto, pienso varias veces en regresar y ocultarme pero no deseo ser una cobarde y creo qué si lo hago Omar ira por mi a la granja, llego al lugar que acordamos y las manos me sudan mucho me limpio las manos con un pañuelo y me doy cuenta que las manos me tiemblan un poco. -llegaste. Doy un grito por el susto que me provocó Omar que llega sin hacer ruido alguno y me habla por la ventanilla del auto, Omar me da una sonrisa apenada. -lo siento no fue mi intención. -descuida. -te traje esto. Omar me enseña un hermosos ramo de girasoles y rosas de color rosa, una sonrisa desaparece mi susto las tomo y las admiro durante un rato. -gracias no te hubieras molestado. -claro que si tu vales la pena ahora vamos. Omar me abre la puerta de la camioneta pata que baje, dejo el romo en la camioneta y lo acompaño asta una cafetería donde nos sentamos afuera y cada quien pide lo que más le gusta, me esta dando más vergüenza al ver como viene vestido Omar con un pantalón negro de vestir y una camisa de color azul oscuro y ni contar con su colonia qué vuele deliciosa. -y dime Sam ese es tu nombre verdadero. -si de hecho es un diminutivo mi nombre es Samantha. -es mucho más bonito que el otro pero quisiera saber por que te vistes de hombre si eres tan hermosa. -ya te lo dije que es por mi seguridad. -te están buscando. -tal vez pero no me quiero arriesgar si descubren donde estoy tal vez mi vida corra peligro. -en ese caso con más razón acompañame a mi manada allí te podre proteger. -y poner en riesgo a inocentes y tal vez provocar una guerra no lo creo. -pero si tu vida. -no importa. Omar guarda silencio cuando dos chicas jóvenes se sienta a nuestro lado, escucho la voz de Omar en mi mente y se escucha molesto. *como qué no importa para mi si eres lo único que importa. *Omar el qué esta hablando es tu lobo no tu lado cuerente solo analizalo no me conoces, no sabes nada de donde salí y mucho menos si soy buena para ti, solo mírame parezco un hombre. -ya miraste el esperpento qué esta con ese hombre tan guapo. -si parece que es su amigo el que trabaja como mecánico. -y apesta a caballo. Escucho con claridas los comentarios de las dos chicas a mis espaldas y tiene razón aunque me duela admitirlo, me lleno de impotencia y rabia por sus comentarios, Omar se mira más que molesto me doy cuenta de que uñas se han convertido en garras y que sus ojos ya no son humanos tengo que hacer algo y rápido e visto lo que pasó cuando in Alfa tiene un aranque de irá. -me tengo que ir. Me levanto de la mesa empujando a la mesera que estaba pasando detrás de mi y tirando la charola que traiga con nuestros pedidos sobre las chicas que estaban hablando mal de mi, no pensé que esto saldría tan bien. -te cuidado mesera tonta. -lo siento señoritas no fue mi intención, fue un acidente. -tenga con esto pago los daños. Le doy dinero a la mesera para que no le cobren nada de lo que tiro por mi culpa, Omar se levanta de la silla pero antes de que me tomé de la mano comienzo a caminar así la camioneta. -espera no te tienes que ir. -lo siento recordé que tengo algo que hacer. Le respondo sin dejar de caminar y me apresuró a llegar a la camioneta para encenderla e irme, sabía que esto no era buena idea. *espera Sam a dónde vas no le hagas caso a esas humanos solo son unas tontas. *dije que saldría contigo no que pasaría todo el día a tu lado. No me gusta decirle nada de eso a Omar pero no creo que sea buena idea que un Omega salga con un alfa incluso esas tontas humanas se dieron cuenta que Omar es demasiada piesa para mi pero en verdad me gustaba y sentía que en verdad era mi pareja, miro las flores que me dió y me dan ganas de llorar pero me niego hacerlo tengo que ser fuerte si quiero vivir entre los humanos se que muchos de ellos son muy cruelos, volteo de nuevp al camino y freno de golpe al ver al lobo de Omar en el camino tapándome el paso, me detengo a centimetros de él, mi respuracion es ajitada al igual qur mi pulso. *que te pasa, te pude aver arrollado. *sabía que no me arias daño. *eso es una tontería. Omar se transforma quedando desnudo frente a mí, me da vergüenza que lo primero que veo no es su cara sino su entrepierna, maldición no tengo desencia alguna, Omar camina asía la camioneta y mi cuerpo reacciona por si solo y un olor a exitacion llega a mi nariz, maldición, bajo la ventanilla para dispersar el aroma pero se que será inútil Omar lo detectará él cual llega y abre para puerta para subirse. -¿por que me dejaste? -por favor tápate con algo quieres. -¿con que aquí no hay nada? Le doy el ramo de flores para que se lo coloque en el regalo y poder manejar sin tener esa distracción que incluso me a hecho dusar. -¿por qué me dejaste? -no las escucharás además no me siento cómoda. -¿es por mi? -¿que? no es por como me veo si no te has percatado todo mundo piensa que soy lesbiana por como me visto, lo e escuchado. -eso a mi no me importa. -pero a mí sí. Se que a los hombres no se les juega tanto por como van vestidos pero a las mujeres si y a mi siempre me gustó verme bien no me obseciona pero es algo que extraño. -regresemos. -no podemos. -no les hagas caso a los comentarios de humanos que no valen la pena. -no me refiero a eso es que estás desnudos y así llamaras mucho la atención y ¿como diablos me alcanzaste? -use el bosque, estaciona aquí llamare para que me traigan ropa. Hago lo que me pide y me bajo del auto para poder dejar de ver su cuerpo que ya me estoy dando vergüenza a mi misma, a los pocos minutos miro llegar un auto que se estaciona cerca de nosotros con rapidez tomo un sombrero que está en la cajuela del auto y me lo pongo para que no me reconozca, veo que de reojo se baja Omar y se encamina al auto de dónde se baja un hombre moreno y un copo más bajo que él que le da ropa, no se por que le hago caso a Omar en vez de regresar a la granja y seguir escondiendome.Samantha. Creo que Omar me ase perder la cabeza y la razón por que diablos accedí a volver con él al pueblo, no me quiso decir a donde íbamos y tiene el atrevimiento de quitarme el volante de la camioneta, no tenemos compensación alguna y solo miro por la ventanilla del auto los arboles pasar pué poco a poco se combierten en casas, llegamos a la tienda que vende suministros de agricultura, para que diablos me trajo aquí.-¿que aremos aquí?-iremos de compras. -que compraremos semillas y más abonó.-no iremos de compras aquí sino allí.Omar me señala la tienda de ropa que está junto a un lado donde mire ese vestido colo azul cielo que tanto me gustó pero me siento un poco insegura de andar de compras con un lobo que apenas conozco, Omar se baja y me abre la puerta para después extenderme la mano con una sonrisa en el rostro.-mi leidy.No puedo evitar que una sonrisa aperesca en mi rostro para después tomar su mano que al tocarla cualquiera sentimiento de inseguridad desaparece y sol
Samantha. Después de la cita qué tuve con Omar me siento más relajada y feliz, la ropa que me compro Omar se lavtuve qué dar a Renata para que me las guardará en su habitación así evito qué se apeste a caballo. Esta noche me estoy debatiendo por ir al bosque, Omar me volvió hacer la oferta de entrenarme y la verdad me encantaría saber defenderme pero si lo hago alguien nos podría ver pero mis deseos de volver a verlo me ganan y me dirijo al qué acordamos, cuando llegó no hay nadie, pensé que ya estaría aquí supongo que tuvo mejores cosas qué hacer, me doy la vuelta para irme pero siento que alguien me está viendo y pongo atención a los sonidos qué me rodean, no perdido nada con el oído pero aislando a los sonidos del bosque puedo persivir el latido de un animal grande pero no lo veo, me encaminó pero eschuco como los arbustos a mis espaldas se mueven y por instinto comienzo a correr pero me derriban y escucho un fuerte gruñido en mi oído izquierdo. *te atrape. Escucho la voz de
Samantha. Pasan cuatro días en los que trabajo por el día en la granja y por las noches entrene con Omar en el bosque pero no sirve de mucho siempre me vence, esta tarde me siento muy cansada y decido recostarme en mi cama por un momento antes de ir a entrenar con Omar pero mi cansancio es tanto qué no puedo mantener los ojos abiertos. Tengo un sueño muy extraño donde estoy recostada en la hierva del bosque pero siento que la hierva se mueve debajo de mi principalmente en mi trasero, me despierto del golpe y alarmada cuando siento un fuerte apretón en mi trasero, rápidamente me doy la vuelta para ver de que se trata y miro con sorpresa a Omar qué esta congelado con una mano extendida, no entiendo que ase aquí asta que procesó todo un poco. -tu maldito pervertido. -no fue mi intención solo que vine a ver por que tardabas tanto y te mire profundamente dormida y no pude evitarlo. Me molesta el sinismo de este lobo sin vergüenza y pervertido, me siento bien y lo señala con el ded
Samantha.No se a donde me lleva Omar pero solo deseo seguirlo y estar a su lado, Omar por fin se detiene frente a unas casas y me detengo a su lado sin saber en donde estamos ya que no reconozco nada.*¿donde estamos?*en mi manada.Eso me alarma un poco y comienzo a ponerme nerviosa y a mirar asía todos lados en busca de algún lobo.*¿Por que me trajiste aquí? sabias que no deseaba venir.*Samantha deseo que seas parte de mi vida de cada aspecto de ella, deseo estar contigo las veinticuatro horas del día contigo y no separarme jamás, deseo que seas mi esposa.Esas palabras me abruman, jamás pensé que Omar me propondría matrimonio de esta forma y en este lugar, no se que responder mi loba me exije qué acepte pero mi lado racional me dice que salga de aquí, un sonido llama nuestra atención y es un lobo gris que se nos acerca, mi instinto de supervivencia me ase reaccionar y comienzo a correr de regreso siendo perseguida por Omar qué me llama pero ignoro, tengo miedo que me encuentren
Samantha. Después de darme un baño voy con el señor Wilson que me confirma lo que me dijo Estela y solo acepte por qué me dará el resto del día libre y tal vez pueda salir con Omar después pero pasar la mañana con Estela será un supricio, en el caminó al pueblo tengo que escuchar a Estela como habla con su novio y es la conversación más tanto y absurda de mi vida solo me confirmó que no pasa nada importante en su cabeza, por fin llegamos al lugar que deseaba y es una callé llena de tiendas de ropa cuando se baja del auto corre a los brazos de un hombre alto, moreno y se nota que va al gimnasio, se besan de una forma un poco intensa para estar en público, se separaran y el hombre me mira fijamente. -¿que miras? -no le prestes atención es uno de los peones de mi padre, lo mando como escolta o algo así. -escolta pero de que protegería ese flacucho. -soy mujer idiota y te podría patear el trasero cuando quieras. -hay que agresiva la Travesty pero mejor por qué no te largas y n
Samantha. Después desayunar con Diana y Omar mi mente no deja de darme vueltas en la cabeza sus palablas tal vez me pueda convertir en la pareja de Omar pero eso lo veo muy difícil yo no tengo manera de Luna, una luna debe ser fuerte al igual que su lobo cosa que yo no soy pero me encantaría hacerlo poder pasar mis días con Omar estando a su lado me siento feliz, completa y no debo de preocuparme de nada, me siento agobiada por tanto pensarlo que doy un largo suspiro que no pasa desapercibido para Omar que al estacionarse me mira con un poco de preocupación.-¿qué ocurre Sam? te noto un poco extraña.-no es nada, gracias por traerme. Omar se había ofrecido para traerme al auto para esperar a Estela, mi respuesta no lo calman en lo absoluto me bajo el auto seguida por él donde vuelvo a insistir.-Samantha por favor tenme confianza, no le diré a nadie lo que tú me digas me lo llevaré a la tumba.Meditó un poco antes de tomar una decisión ya que esto es algo delicado y un poco complic
Samantha. Me siento nerviosa por ir a ver a Omar esta tarde, el tono de sus palabras hizo que un hormigueo recorriera mi cuerpo, me doy un buen baño para después colocarme un pantalón y una camiseta para salir del granero y caminar a la parte trasera de la granja pero antes de llegar me detiene Estella que está sentada en una de las sillas del jardín tomando lo que creo es soda.-espera, ven aquí.Volteo a verla con un poco de molestia no tengo el tiempo para perderlo y estar escuchando sus comentarios así que solo me quedo mirándola fijamente sin moverme de mi lugar, estela voltea los ojos con fastidio y se para de su silla.-ven necesito hablar contigo.Usa un tono más suave y su postura es menos agresiva, esto es algo nuevo, me acerco a ella.-¿qué se le ofrece señorita Estela?-¿qué no piensas hacer nada con tu cabello?Malicio, yo dándole una oportunidad y la maldita desgraciada me dice eso ya va a empezar a burlarse.-ven te lo voy a arreglar eso.Estela me toma de la mano para
Samantha. Quién diría que esta experiencia sería tan vigorizante a pesar de que fue mi primera vez Omar fue tierno conmigo suave y me daba mis pausas, me llevó a la gloria en más de una vez, al terminar me siento avergonzada Omar no deja de abrazarme y frotar su cabeza en mi cuello, sé que desea impregnar su aroma en mi para dejarles en claro a todos los demás que él es mío y que yo soy de él, Omar no tarda en percibir mi incomodidad y me mira preocupado. -¿ocurre algo Samantha? ¿te sientes mal?-no eso, es que tengo un poco de vergüenza.Al decir esa última palabra desvío la mirada ya que él está desnudo, no me molestaría verlo todo el día pero me avergüenzo todavía de esto, siempre fui un poco penosa, Omar me abraza y me pega a su pecho desnudo cubierto con una fina capa de sudor para comenzar a besarme el cuello y terminar en mi mejilla.-No tienes por qué avergonzarte de nada para mí eres perfecta, cada parde de tu persona me encanta desde tus pequeños pies hasta el lunar que ti