Isabella
Tranquilidad.
Una palabra a la cual no estoy acostumbrada a tener fuera de los territorios de mi hogar, pero que misteriosamente he podido tener durante el día.
Ayer fue la primera transformación de Christopher, Felipe me llamo para comunicarme que todo había salido bien, su lobo eran un gran e imponente lobo color negro.
Color digno de un Alpha.
Recuerdo que su padre posee el mismo color, por ende, él también lo obtuvo por ser el futuro Alpha, no muchos lobos poseen ese color, solo aquellos que están destinados a ser fuertes.
Yo tuve la intención de llamarlo para poder preguntarle como había salido todo, como se sintió, como fue su relación con Zeus, pero me mantuve mirando su contacto en la pantalla por unos largos minutos decidiendo si debía llamarlo o no y al final no lo hice.
Y tampoco lo he visto durante el d&iacu
Isabella – Suficiente ¿Qué sucede? Levanto mi vista conectando con los ojos verdes de Felipe. – ¿De qué hablas? No sucede nada. Vuelvo a mirar mi plato de comida, revolviéndolo con el tenedor. Hace dos días que sucedió lo de Liam y e evitado toparme con el en cualquier momento. Salgo primera que todos del salón y corro lo más rápido que puedo hacia mi bicicleta que decidí esconder en otro sitio para evitar ser emboscada nuevamente. – Algo sucedió, te conozco. Haz estado rara estos días. – Estoy bien tranquilo...es solo...– suelto un suspiro volviendo a mirarlo – el estrés del instituto, estamos en época de parciales. Su expresión de preocupación no cambia en ningún momento y su vista se fija en mí tan intensamente como si quisiera adentrarse en mi mente y averiguar todos mis secretos. – Sabes que siempre te apoyare en todo lo que te suceda ¿cierto? Agarra mi mano
Christopher.Gris.Ese es el color que he visto desde la mañana.El color del techo de mi habitación.No tengo intenciones de ir a clases y la verdad no quiero hacerlo.No quiero estar cerca de ellaDe su olor.Ese exquisito olor a lavanda que será capaz de volverme loco en segundos.– Vamos, quiero verla.Vuelve a decir Zeus como por millonésima vez desde que desperté, no me ha dado tregua. Suelto un suspiro pasando mis manos por mi cara y me siento en el borde de mi cama.– No quiero.– Oh vamos, quiero verla además debemos ir clases, es una responsabilidad.Ruedo los ojos.– Solo lo dices para convencerme.– Cierto ¿funciono?– No.– Pf aburrido. – responde con gruñido cerrando el link.Me levanto para caminar hacia mi baño y darme una d
Christopher.– Espero que tengas una buena explicación de por qué no has ido al instituto estos últimos días.Escucho la voz de Felipe entrando en mi habitación como si fuera la suya.– ¿No te enseñaron a tocar? – inquiero molesto sin mover un solo musculo desde mi posición acostada en la cama mirando el techo.– Oh vamos, ni que estuvieras haciendo algo importante.Bufo por su comentario, pero la verdad tiene razón.– ¿Me dirás que sucede contigo? ¿Crees que no me he dado cuenta? Desde tu transformación que estas así. – habla mientras se sienta en los pies de mi cama.Mi pulso se acelera y volteo a mirarlo rápidamente, ¿sabrá que la encontré? ¿Qué es ella?– No sé de qué hablas. – respondo rápida
Isabella.Me aferro lo más que puedo a su cuerpo, escondida en la curvatura de su cuello.Sintiéndome a salvo.Su calor me entrega una sensación de seguridad que no quiero dejar ir en estos momentos.No se que hubiera sido de mí si él no hubiera llegado, en qué situación me encontraría justo en estos momentos si no estuviera entre sus cálidos brazos, posiblemente estaría siendo violada.El llanto vuelve a salir de mi boca de solo pensar en eso y Christopher me pega más a su cuerpo.– Esta bien, ya estas bien. – susurra contra mi pelo – estas a salvo conmigo.Intento controlar las lágrimas mientras escucho como abre la puerta de mi hogar.–¿c-como abris..te la pu..puerta? – pregunto entre sollozos sin sacar mi cara de su cuello.– Eh... ¿no te enojes sí
Isabella.Pude sentir como su respiración se paro cuando mis labios impactaron contra los suyos. La corriente eléctrica que corrió por mi cuerpo derrumbo todas mis barreras, acelero mi corazón como nunca y un cálido sentimiento como nunca había sentido se instalo en mi pecho.Y eso que solo presione mis labios contra los suyos.¿Qué pasaría si lo beso bien?Estaba a punto se abrir mis labios para darle un beso cuando mis pensamientos se interrumpen al sentir que echa su cabeza hacia atrás alejándose de mi tacto.Abro mis ojos para mirarlo confundida, no retiro mi mano de su nuca y me afirmo más fuerte de él acercándome aun más como si eso fuera posible, prácticamente estoy encima de él ignorando el hecho que me encuentro completamente desnuda.Pero la necesidad de besarlo es más grande.<
Christopher Los primeros rayos de sol entran a través de las cortinas alumbrando a la hermosa chica que tengo abrazada a mi abdomen con su cabeza apoyada en mi pecho sobre mi corazón. Anoche luego de cenar y curar sus golpes nos acostamos a ver una serie llamada Teen Wolf, bastante irónico la verdad que esa serie trate sobre hombres lobos cuando acá vivimos rodeados de ello, pero la sonrisa que adorno su cara cuando se dio cuenta de mi cara de “es enserio” al momento que caí en cuenta sobre la temática me hizo darle una oportunidad y al final era bastante buena. Íbamos en la mitad del tercer episodio cuando comenzó a quedarse dormida, en ese entonces no nos encontrábamos en la misma posición que ahora, sino que cuando finalmente quedo rendida ante Morfeo acerque su cuerpo al mío para poder dormir acurrucados. – Y fue la mejor decisión. – ronronea Zeus. – La verdad sí.
Christopher – ¿Qué carajos? Exclamamarcos acercándose hacia la posición de Liam. Los guardias me miraron y con un asentimiento de cabeza lo retuvieron antes de poder llegar a él. – Christopher ¿qué carajos haces? – hablaba intentando zafarse del agarre de los muchachos. Finalmente se rindió y volvió a mi lado con el ceño fruncido y la preocupación plasmada en su rostro. – ¿No me vas a responder? Has estado sentado ahí mirando todo como idiota sin decir ni una puta palabra. Voltee mi cabeza para mirarlo con el ceño fruncido. – ¿Debo recordarte que estas acá para ver si eres digno del puesto de beta? Suelta un suspiro pasando sus manos por su cara y pelo con clara señal de frustración. – Joder, pero es Liam. – lo apunta con su mano – ¿qué hace aquí y en ese estado? – Se quien es, no debes recordarlo. – vuelvo a mirar al imbécil que mantiene la cabeza gacha – y los golp
IsabellaEl sonido del auto estacionándose fuera de la casa se hace presente al igual que mis nervios.Dije que podía ser su postre, joder, no sé porque hice eso.No tengo experiencias sexuales, él fue mi primer beso, ningún chico se ha acercado a mí desde que saben que soy hibrida y tuve la espectacular idea, notándose el sarcasmo, de seguirle el juego a él.Él que ha tenido ya sus experiencias, que me sobre pasan en cualquier tipo de conocimiento y ahora los nervios me comen viva al pensar que me cobrara la palabra y no sé si este lista.Me acerco a la puerta cuando escucho que toca y lo encuentro hablando por celular con expresión sería y con una bolsa en la mano que me tiende e inmediatamente alcanzo revisando su interior encontrándome con un helado de chocolate.Una sonrisa se forma en mi rostro y camino hacia el