En la actualidad.Ava Jones.Giro en el momento en que siento que todo mundo mira hacia un punto en específico. Busco qué es lo que está pasando, y entonces los veo…Ellos vienen caminando como si pertenecieran a la realeza. Como si fuesen los dueños del mundo y todos nosotros sus esclavos: unos simples mediocres tendidos a sus pies.Sacudo mi cabeza en negación y una pequeña sonrisa incrédula hace de las suyas en mis labios. Esto iba a ser demasiado obvio. ¿Por qué no lo vi venir? A mí me impusieron casarme con Dante. Él aceptó que nos comprometiéramos, pero todo este tiempo estuvo jugando. Se pasó el momento de casarnos y no puso el bendito anillo en mis dedos. No sé qué estaba esperando, por algún motivo no le hicieron nada o le dijeron algo por no cumplir y casarse conmigo como debería de haber pasado, ya que fue lo que designaron los siete jefes de La Asociación.Quiero avanzar y quitar las manos de esa arpía de encima de él, pero no tengo el derecho. Sé lo que ocurrió sin siquie
Hace tres años y diez meses.Snape.—Huele delicioso —exclama ella, colocando sus manos alrededor de mi cintura, abrazándome desde atrás.—Lo sé, aprendí a cocinar desde niño —confieso.—Pues, lo haces bien —besa la parte trasera de mi cuello y muerdo mi labio al sentir la humedad que deja en esa zona. Tengo que advertirle que deje de hacer eso o va a desconcentrarme —. Aunque, no me refería mucho a la comida, sino a ti —suspira en mi cuello y vuelve a besar allí antes de bajar, dejando pequeños besos en mis omoplatos.Enarco una ceja por su confesión.—¿Ah sí? —pregunto, sin dejar de hacer lo que estoy haciendo.—Por supuesto. Nunca dejes de usar el mismo shampoo o loción. Es tu marca, lo que te hace ser tú.—Oye, como que de verdad te pega eso de ser sirena. No solo por la apariencia sino por el embrujo que lanzas. Tan solo das una orden o quieres algo y ya nos tienes a tus pies.—Podré tener a muchos a mis pies, pero ahora solo me importas tú —esas palabras me hacen dar media vuelt
En la actualidad.Ava Jones.El día lunes llega, y con él se viene el primer encuentro como compañeros de trabajo y dueños del tercer escalón de la pirámide. Éramos cuatro personas, ahora con Snape seremos cinco.Entro a la finca, el cual es nuestro lugar de trabajo. Estaciono el auto y decido tomarme un tiempo conmigo misma. No salgo, prefiero quedarme y meditar mejor todo lo que ha ocurrido y lo que va a ocurrir.Estoy llegando a la conclusión de que, pase lo que sea que pase, debo mantenerme alejada de él lo más que pueda. Haré mi trabajo, como siempre, pero ahora debo ser cautelosa. Estoy por lograr eso que tanto he querido: que mi hijo sea intocable. No debo fallar ahora. Debo completar los pasos que siguen para que sea una realidad.Creo que ahora el problema más grande con el que debo lidiar es que ya mi hijo está en la etapa donde todo lo pregunta. Mi gran temor desde que nació es que me pregunte por él. ¿Qué carajos le voy a decir? Él no tiene un padre. Punto. Prefiero vivir
Hace tres años y ocho meses. Snape. Dos meses más donde he salido, huido, conseguido información que me tiene en dudas, pero al mismo tiempo afianza más el cariño que tengo por la mujer que ahora se encuentra durmiendo entre las sabanas de la pequeña habitación de esta cabaña. No puedo dejar de mirarla, adorarla. Últimamente he sido más posesivo de lo normal y ella lo está notando. No me he podido contener y en cada lamida, beso y penetración le he dejado en claro que es mía. Solo mía. Al principio se negaba y se resistía, pero ahora llega, se sienta en mi regazo y me susurra al oído que demuestre que tan suya soy, que la tome, la azote y le dé fuerte, teniéndola en mil posiciones. Ella me hace enloquecer. Me hace no querer salir de este círculo vicioso al que está sometido nuestros cuerpos. Endersson me ha ayudado mucho desde afuera. El hijo de Ava está bien. Quienes no lo están son mis superiores. Me siguen buscando por todas partes. Hace unos días me llamó Fernando, como era de
En la actualidad.Ava Jones.Llego a la oficina donde se propiciará la reunión y tomo asiento en uno de los laterales de la larga mesa que se encuentra en todo el centro del amplio espacio. Está prohibido sentarse en la cabecera de la mesa porque ese puesto es exclusivo de Sebastián.Ahora que pienso en él. ¿Qué demonios querrá de mí? Hoy quiero salir temprano, por algún motivo extraño mucho las manitas de mi hijo apapachándome y dándome todo el amor que nunca tuve. Lamentablemente debo cumplir con mis deberes y encontrarme con mi superior para así poder saber qué quiere y salir de eso rápido.Por lo menos pospuse la reunión con Flores.Abro mi carpeta y comienzo a revisar todo lo que adelanté esta mañana. Nunca entrego algo sin haberlo visto por lo menos dos veces y así comprobar que esté bien. Soy de esas personas que odian salir mal en sus trabajos o proyectos. Tengo una leve obsesión con las buenas notas y todo lo que tenga que ver con aprender. Soy curiosa, si hay una palabra que
Hace tres años y ocho meses.Snape.—No sé quién está más loca, si ella o tú.Intento seguir trabajando, pero estas dos mujeres teniendo la música a todo volumen me aturden. No solo escuchan música, sino que la están cantando, o mejor dicho gritando. Tenemos aquí un espectáculo más grande del que hubiese hecho algún artista famoso.La verdad es que estoy impresionado. Han pasado dos semanas desde que está Karine aquí, y, aunque no me gusta del todo porque he dejado un poco de lado mis encuentros sexuales con mi chica, al mismo tiempo estoy feliz…Estoy feliz porque ellas están felices.Siempre tienen algo para hablar, algo qué cantar o hacer, mil cosas con las que distraerse. Ava está muy activa, nada de esperar a que yo termine de hacer mis deberes para poder hacer cosas a mi lado. Sonríe mucho, bromea mucho, y casi no pregunta por su hijo. A veces pienso que Karine es una excusa que está usando para no pensar en lo que está pasando.Volteo a mirarlas, ambas están en trajes de baño p
En la actualidad. Ava Jones. Dos semanas más han pasado. Una boda se aproxima. Solo sé que, si quiero lo mejor para mi hijo, debo seguir como voy. Entro en el Pen-House y me encuentro con un desastre de pintura, incluso los muebles están manchados y las alfombras tienen muchos cuadros y hojas blancas con soles pintados en ellas. Suspiro profundamente, tratando de no pensar en el tapizado y lo caro que saldrá sacar su pintura, porque encima, usó la que no se puede sacar tan fácilmente. —Oh, señorita Jones… —Alma aparece por el pasillo y mira a su alrededor. Juguetes tirados por todos lados, el estante de la biblioteca desordenada, una música infantil resonando desde el pasillo por donde ella apareció y hasta un pony de inflable a medio llenar está sobre la mesa del comedor. Todo está hecho un desastre, y luego de verlo por segunda vez, vuelvo a posar mi mirada en la niñera, quien ahora me observa avergonzada. —Ya iba a comenzar a limpiar todo. —Pensaste que llegaría tarde ¿no e
Hace tres años y siete meses.Snape.—Fue un placer tenerte aquí —aseguró Ava.Creo que será mejor que hable por sí misma, porque para mí fue irritante, demasiado irritante. Ya siento la emoción del poder presenciar, finalmente, cuando tome el pomo de la puerta, lo gire y salga de mi cabaña.—El placer fue todo mío. Espero de verdad que no se olviden de mí, así como yo no me olvidaré de ustedes jamás.Ella y Ava se abrazan y yo ruedo mis ojos, sin querer acercarme más de la cuenta. No veo el momento en el que esto acabe, en el que todo acabe.Ella era mi mejor amiga, sí. Aún sigo considerándola como una persona muy importante en mi mundo, aunque piense que enloqueció un poco. Es verdad que, desde que llegó, ha ayudado a mi chica a mantenerse distraída, y que ha demostrado que se puede cambiar. Ha madurado, se ha convertido en una persona que piensa más, que vive más, y que deja ir.Tuvimos una buena conversación esta mañana. Karine regresará a casa y le hablará a mi padre sobre mí. No