-¿Le gustó la entrevista a su amiga?- preguntó Bale después de que le trajeran el pedido.
-Aún no le he preguntado- respondió Joel mareando el café.
-Cuando le preguntes házmelo saber- sonrió éste.
-Claro, le mandaré un fax- rezongó, sarcásticamente, el joven.
Una tarjeta apareció delante de sus ojos
-¿Qué...qué es ésto?- inquirió señalando la tarjeta
-Mi tarjeta, ahí está mi número personal-
-No la quiero, gracias - rechazó tal, Joel.
-Cógela - el moreno no sonaba a petición sino más bien a orden.
A regañadientes, Joel la cogió y se la guardó en el pantalón de chándal.
La sonrisa regresó al rostro del hombre
-Está perdiendo el tiempo conmigo - dijo el castaño, completamente seguro de sus palabras.
-Eso deja que lo decida yo- repuso Bale.
-Como quiera- dibujó una mueca de desgana Joel.
Dando un sorbo a su café, Bale preguntó:
-¿Tu vida gira en torno a tu carrera y las carreras que sueles hacer por las mañanas o tienes más alicientes?-
-Lo que tengo son hobbies-
-Eso es algo- interesado, el moreno se inclinó hacia delante -¿Cuáles?-
-Los normales- forzó una sonrisa un tanto falsa Joel.
-¿Y cuáles son los normales?-
-¿Leer por ejemplo?-
-¿Cómo qué?- siguió cuestionando Bale
-¿Libros?-
-¿Qué clase de libros?- sonrió divertido el mayor
-Puf, pues...no sé, intriga, suspense ¿Qué quiere que le diga?-
-¿Algún autor o autora en especial?-
-Pufff, no sé, tengo varios...- contestó el universitario.
-Di uno al azar- pidió el mayor.
-Dan Brown- respondió Joel.
-No está mal- dijo Bale -¿Te gustan los secretos ocultos?-
-No, no me gustan- negó el chico -Detesto que me oculten algo-
-Todos ocultamos algo – rezumó con cierto aire misterioso Bale.
-Yo no- el chico se llevó la taza a la boca y declaró -Así me ve, así soy-
luego dio un sorbo a su café.
Entornando los ojos, Bale inquirió:
-¿Entonces nunca lo has probado con un hombre?-
El castaño casi se atraganta.
Tosiendo muy seguido, respondió:
-¿A...a qué viene esa pre-pregunta?-
-Mera curiosidad - una sonrisa traviesa asomó en la cara del mayor.
Dejando la taza en la mesa, Joel apretó los labios.
-Ni lo he probado ni creo que lo pruebe- aclaró seriamente.
Levantándose anunció:
-Y tengo que irme-
Dándose media vuelta, Joel ya iba a irse cuando Bale le detuvo:
-No serías el primero al que le abro los ojos...y algo más-
Joel se giró para mirarle directamente:
-Buenos días señor Bale- se despidió el joven algo seco.
Rápidamente abandonó la cafetería.
Inmóvil mientras lo veía a través de la cristalera, el moreno pensaba la manera en la que podía atraerlo hacia él.
Terminándose su café alzó una mano y llamó a la camarera para que le cobrara y también salió de la cafetería.
-Aunque no lo creas te salió perfecta- alabó Holly tecleando en su portátil.
Desde la pequeña cocina, su amigo, se preparaba un tentempié
-Yo que me alegro- espetó éste.
Estrellando una loncha de jamón contra la lechuga dijo:
-Adivina quién me ha "asaltado" esta mañana mientras corría-
Holly dejó de escribir.
Volviéndose a él respondió:
-No soy adivina-
-Bale- colocando la rebanada de pan encima del jamón lo puso en un plato y caminó hacia ella.
-¡No jodas! - reía su amiga -Lo que yo decía, le has gustado-
Dando un mordisco a su sándwich, Joel refunfuñó:
-Pues que se olvide-
-El montón de tías que suspiran por él y vas y le haces tilín tú- seguía riendo su amiga mientras proseguía escribiendo.
-Ese es gilipollas- gruñó Joel y volvió a dar un bocado a su sándwich.
-Huumm, será lo que quieras pero está bien bueno- repuso Holly.
-Es solo un tío rico y joven, eso es lo que es- desdeñó el castaño.
Holly agarró el portátil y lo giró hacia su amigo.
-¿Eso crees?- rezumó traviesa ella.
Joel miró la pantalla.
Desencajando los ojos se echó hacia atrás con silla y todo
-¡A mí para qué me enseñas fotos de él!-
-Aunque seas tío puedes opinar- rió ella
-¿Qué quieres que opine?- se encogió de hombros éste.
-¿Tiene o no tiene un polvazo?- sonrió ella picaronamente.
Joel miró las imágenes del moreno que salían en el portátil.
Tragando saliva se sorprendió de sí mismo dándole la razón a su amiga
-Humm, sí, es...es follable-
-¿Follable? ¿Solo follable?- espetó ella
-¡No sé qué más quieres que diga!- tensó los músculos de la cara él.
-Yo me lo comía enterito- suspiró la chica.
-Tampoco es para exagerar, está bien pero ya está - quitó importancia el joven.
Holly entornó los ojos, sonrió con cara de pilla y canturreó:
-Estás celoso-
-¡Qué! ¡No! - contestó él, nervioso
-Yo creo que sí- siguió en sus trece la pelirroja.
-Holly esa es la tontería más grande que dices- frunciendo el ceño, Joel aclaró -Yo no estoy celoso de él-
-Yo no he dicho que estés celoso de él - repuso la chica.
Seguidamente se acercó a su amigo y dijo:
-Digo que estás celoso por él -
-¿Per-perdona?- dibujó una mueca de no entender el chico.
-Digo que a ti también te atrae- sonreía Holly -¿Me equivoco?-
Tragando saliva, Joel agachó la cabeza pero rápidamente volvió a mirar a su amiga:
-No...no sé lo que es si...si atracción o yo qué sé y, la verdad, no...no me entiendo...yo...yo no soy...ya sabes y nunca...¡Jamás! Me he fijado en...otros tíos y...no-no sé porqué me pasa...con él- explicó él.
-A lo mejor es que te parece tan increíblemente...atractivo que tu lado curioso se ha despertado- tranquilizó ella.
Posándole una mano en una de las suyas, prosiguió diciendo:
-Quizás solo te atraiga físicamente y sientes esa cosilla de saber que es...follar con otro tío-
-Me encanta cuando eres tan clara - repuso Joel con retintín
-Joel, en el fondo, todos somos bisexuales -
-Ese Bale es un prepotente-
-Será lo que tú digas pero te lo follarías- rió divertida Holly.
Su amigo ya iba a decir algo cuando ella le señaló con el dedo y espetó:
-Y no me lo niegues-
Joel se mordió la lengua.
No respondió.
Tuvo que darle la razón a su amiga.
El gusanillo de probar el otro lado de la cama, le picaba y qué puñetera casualidad que le estaba pasando con ese Dominic Bale, quien también estaba emperrado en él.
-Ojalá tuviera unas fotos suyas más actuales, sería fantástico- se lamentó Holly.
En ese momento una tarjeta apareció delante de sus ojos
-¿Qué es ésto?- inquirió ella.
-Su número de teléfono, llámale y pídele un par de fotos actuales - sonrió Joel moviendo la tarjeta entre sus dedos.
Apoyando el mentón en el dorso de una de las suyas, Holly rió traviesamente y dijo:
-Mejor si le llamas y se lo pides tú -
-¿Ehm?- Joel se quedó mudo y dejó de mover la tarjeta
-Estoy segura que si eres tú quien le llama y le pide un par de fotos no se negará- repuso la chica.
Su amigo soltó la tarjeta en la mesa y de un salto se levantó
-No pienso llamarle- respondió bastante nervioso.
La chica miró el móvil del castaño.
Luego a él.
Joel, arrugando el entrecejo, no imaginó la idea que pululaba en la cabeza de su amiga cuando, súbitamente, la vio coger su móvil y la tarjeta al mismo tiempo.
-Si tú no lo haces...yo lo haré por ti-
Y ni corta ni perezosa marcó el número.
Joel, reaccionando tarde, se abalanzó sobre la mesa decidido a detenerla pero ella, siendo más rápida, se puso en pie.
Llevándose el móvil a la oreja, oyó las pitadas.
Joel, medio tendido en la mesa la observaba fijamente y sin pestañear
-Ho-Holly, cuelga ahora mismo - ordenó.
-Sssshh, está dando señal-
-¡Holly, cuelga!-
Su amiga no le hacía ni el más mínimo caso y...
La conexión se hizo.
Una voz respondió desde el otro lado:
-"Dígame"-
Quitándoselo de la oreja, ella exclamó por lo bajo:
-¡Dios mío, es...es él!-
Joel, con el corazón en un puño, se apresuró a quitarle el móvil.
Olvidando tapar el altavoz, habló en voz alta:
-¡¡Eres idiota?? ¿¿¿Cómo te atreves a...-
-"¿Joel?"-
El chico oyó su nombre.
Tragando saliva quemó con los ojos a su amiga pero se dio prisa en contestar:
-S-sí, soy...soy yo, dis...disculpe si le molesto pero...- se disculpaba sintiéndose la mar de avergonzado.
-"No me molestas"-
A Joel le dio la sensación de que el hombre se reía.
-"¿Necesitas algo?"- preguntó Bale.
Joel miraba a Holly, la cuál no cesaba de suplicarle en silencio y con las manos entrelazadas, que le pidiera unas fotos.
-Aarr...real-realmente no le he llamado yo...mi...mi amiga Holly...ha sido ella quien ha marcado su número y...-
-"¿Y para qué? Si es que me lo quieres decir"- indagó Bale.
Joel, tomando una bocanada de aire, contestó:
-Ella...quería...saber si...podría conseguir unas fotos suyas más...actuales-
-"¿Para?"-
-Pa-para la entrevista que le hice y que...será publicada en el periódico de la facultad -
Se hizo un corto silencio para segundos después, Bale responder:
-"No, no me importa"-
-¿A...no?-
-"No, pero hoy ya no puede ser"-
-O-oh, n-no tiene que ser pre-precisamente hoy mismo, mi-mientras sea antes del...viernes...-
-"¿Mañana por la tarde está bien?"-
Joel se quitó el auricular de la oreja.
Volviéndose a Holly repitió la pregunta:
-¿Mañana por la tarde?-
-¡Perfecto!- asintió ella.
-Dice que perfecto- devolvió la respuesta el castaño a Bale.
-"En tal caso, ¿Dónde y a qué hora?"-
Otra vez, Joel la miró:
-Que...digas lugar y hora-
-Pues...no...no se me ocurre ningún sitio -
-¡Holly! Piensa alguno- masculló su amigo
-"Por si os sirve de ayuda, sobre las tres termino de una reunión en el Hilton, así que si no hay problema, allí podría ser"-
-Un buen sitio, allí estará puntual- asintió Joel.
-"¿Y tú?"-
-Yo no soy el interesado en usted, señor Bale-
-"Tú me hiciste la entrevista, que menos que también estés presente"- la voz del hombre sonaba grave, logrando poner el vello de punta a Joel.
-"Por cierto, ¿Tiene el fotógrafo buscado o me encargo yo?"-
-¡No! Ya...ya lo buscamos nosotros-
-"Como quieras, Joel"-
Escuchar la forma en que dijo su nombre, provocó en el joven que las piernas le temblaran pero manteniendo la compostura contestó:
-Gra-gracias por...aceptar, señor Bale-
-"No tienes porqué darlas"-
-Has-hasta mañana-
-"Hasta mañana...Joel"-
La conexión se cortó.
El castaño se sentía hecho un flan.
Lanzando un suspiro, fulminó con la mirada a su amiga
-Yo a ti te mato- amenazó - Ya puedes estar buscando a alguien para que le tome las fotos-
-Está más que buscado- contestó ella sonriendo.
Caminando hacia su amigo, apuntó:
-Ricky-
Puntuales como un reloj, ambos amigos junto con Ricky, esperan en el hall del hotel. Joel denota nervios mientras que Holly está totalmente relajada. Ricky, mirando al primero, siente curiosidad por su estado de nervios.-Parece como si tuvieras miedo de algo- le dijo. El castaño, dejando de dar paseos de un lado a otro, le miró fijamente.-No, estoy...estoy bien - Nada más decir tales palabras, oyeron unas voces que se acercaban hacia ellos. Holly se enderezó. Ricky se situó a su lado. Joel , tragando saliva, dirigió la mirada hacia delante. En segundos vio aparecer a Bale quien era acompañado por otros tres tipos. Charlaban distendidamente hasta que el moreno descubrió al joven. Sonriendo, dio unas palmaditas en el hombro al hombre que estaba más cerca suya. Después estrechó la mano al otro. Éstos se despidieron de Bale. Aproximándose a los tres amigos, el moreno s
-Espero que haya desistido de la idea de “tirarme los tejos”- repuso Joel mientras movía su café. Uniendo sus manos, el moreno contestó: -No- -Pues debería – dejando la cucharita en el plato de la taza, el universitario dio un sorbo y volvió a depositar ésta en el platito. -Nunca desisto de lo que me encapricho- aclaró Bale. -Pues lamento decirle que conmigo lo tiene complicado- sonrió Joel. -O eso es lo que tú quieres que crea- los labios del hombre formaron una fina línea. Riendo con ironía, el castaño aclaró: -Oiga, no…no es solo que yo no sea gay- -¿Y entonces qué es?- -Que no le conozco – -Pues conóceme – repuso Dominic. Al joven se le disparó el corazón y rápidamente se levantó -Lo-lo siento he…he de irme-Como un vendaval cruzó dirección hacia la puerta de la cafetería. Bale, imitándole fue tras él. ¿Por qué diantres insistía? Normalmente no s
Descamisado, entre dos luces y un vaso de whisky en su mano, Bale le daba vueltas al casi beso que a punto estuvo de darle al joven. Unos milímetros. Eso había faltado para fastidiarlo todo.Soltó el vaso a un lado y dio un suspiro. ¿Por qué con éste le costaba tanto controlarse? ¿Por qué no lo olvidaba y buscaba a otro? Así lo había hecho cuando se les resistían pero con Joel no quería desistir. Dirigiendo la otra mano hasta su móvil, buscó un número. Tras marcar dio al manos libres y esperó. Una voz, al otro lado, le contestó: -“Buenas noches, señor Bale”- -Buenas noches – dijo éste -¿Algo más que hayas averiguado del chico?- -“De momento que estudia en la facultad del estado y que es soltero, nada Más, lo siento pero en tres días es complicado”- -De momento esa información es suficiente, sigue investigándole y no le pierdas de vista – -“Como di
"I'm pagin' Aroma, pagin' Sada Had lil' poom-poom, she called me dadaKiss the poom-poom, so oochie-walla Praise the fatha, praise the fatha, praise!..." Entre risas y la mente en blanco, los tres se lo pasaban en grande. Bailaban completamente entregados a la música. Entre bailoteos y diversión, el alcohol iba y venía. Joel empezaba a notarse mareado. Holly y Ricky estaban más acostumbrados a beber como cosacos y solo habían alcanzado el puntito justo. La vejiga del castaño le avisó que o iba al aseo o reventaría de tanto líquido como había ingerido. De un trago se acabó su whisky y acercándose a Holly anunció: -Voy al...al aseo, hips- -Madre mía pero ¡Si estás borracho!- rió ella -Yo no soy un...hips...alclohico como tú y...hips...éste - habló Joel trabándosele la lengua. -Se dice alcohólico - reía Holly. Su amigo hizo un gesto de no int
Ian estacionó en el parking subterráneo del edificio donde Bale vive. Parando el motor, giró la mirada al moreno, quien con la cabeza de Joel descansando en su regazo, lo observaba detenidamente. -¿Necesita algo más, señor?- preguntó el chófer. -No, hasta mañana no necesito nada más - saliendo del coche, Bale cogió nuevamente en brazos al joven y se dirigió hacia el ascensor. Ian les vio alejarse para perderlos de vista una vez entraron al ascensor. Como si no le supusiera esfuerzo alguno, Bale atravesó la puerta de su dormitorio. Acercándose a su cama, depositó en ella a Joel y comenzó a desnudarle. Primero le quitó los zapatos, luego los pantalones, los cuáles tiró hacia el pasillo. Siguió con la camiseta, que también tuvo la misma suerte. Dejándolo en ropa interior, lo incorporó un poco y apartó la colcha y sábana. Seguidamente volvió a tumbarlo. Igual que un padre arropa a
Como nuevo, Joel bajaba las escaleras apresuradamente llegando al salón.Allí, Bale, con el aspecto con el que Joel lo había conocido, le esperaba.El joven caminó despacio parándose a una distancia prudencial entre él y el moreno.Éste observó que Joel no se había secado bien el pelo pues lo tenía húmedo-Llevas el pelo mojado- señaló-No sé donde tiene el secador- alegó el chico.-¿Y por qué no me lo has preguntado?--Tampoco importa-Bale le indicó la mesa donde había un gran desayuno preparado-Me gustaría que desayunaras--Er...no tengo hambre- rechazó el castaño su invitación -Además tengo que irme, no quiero seguir abusando de su hospitalidad señor Bale --No estás abusando- una sonrisa pícara asomó en el ro
Dejando escapar un jadeo, se enderezó en la silla. Todo él temblaba. Lo había leído de principio a fin y a cada palabra se había sentido terriblemente alterado. El corazón le latía de forma acelerada.El vello de cada parte de su cuerpo se le había erizado. ¿Por qué Bale quería que supiera aquello? Tragando saliva miró su móvil. Le había dicho que le haría saber que se lo había leído pero ahora dudaba. Situando la mano sobre el teléfono, no estaba seguro querer llamarlo cuando, de repente se sobresaltó al oír su móvil. Lo cogió velozmente y contestó: -Dígame- -"¿Lo has leído ya?"- era Bale -Sí - -"¿Tienes alguna duda en algo?"--Muchas- Le oyó reír. -"En ese caso lo mejor es que te las aclare "- -Pues ya puedes empezar - -"Preferiría que fuera cara a cara"- -No sé si sería una buena idea - -"Yo creo que es una muy buena idea, n
Cuando despertó observó que seguía en la habitación del hombre. De un brinco se incorporó. Estaba solo y desnudo. Curiosamente no notaba dolor alguno y sabía que había pasado. Buscó con la mirada su ropa encontrándola perfectamente doblada sobre una silla que había junto a una cómoda de cinco cajones. Apartando la colcha y la sábana, echó un pie al suelo. Luego hizo lo mismo con el otro y se levantó. Dio varios pasos. Nada. Ni una miserable muestra de que había hecho el amor con Bale. Asombrado a la vez que agradecido, caminó hacia su ropa y mientras se vestía le daba vueltas al increíble momento. Una vez presentable, tomó aire, agarró el pomo de la puerta y la abrió. Le pareció oír movimiento abajo por lo que se apresuró y bajó las escaleras.Esperaba ver a Bale pero se quedó de piedra al encontrarse con una mujer en la moderna cocina. Tragando saliva, Joel caminó