Narrador Omnisciente
La lluvia seguía cayendo torrencialmente en aquel lejano paraje. El viento se había hecho más fuerte y se escuchaba de fondo al mar furioso romper contra los riscos de aquel acantilado. Los truenos eran cada vez más fuertes sentenciando su cercanía. Cientos de piedras de granizo golpeaban los techos del galpón haciendo pequeños estruendos aislados que le pondrían los pelos de punta hasta al más valiente.
El cuadro era realmente espeluznante, pero allí estaba Jack tan tranquilo como roca contemplando a su esposa encadenada retorcerse demencialmente luchando por escapar. La furia del comandante se había disipado y su semblante era tan neutro y sin expresión como de costumbre.
Narrrador OmniscienteEl miedo la invadió las manos sudorosas la delataban. Para colmo la iba a encontrar totalmente desnuda. Su temor era inmenso, no porque se tratara de un Arcángel, ella no le temería nunca a un igual. Solo el miedo de enfrentar a quien la convirtió la hacía morderse el labio inferior. Él no tenía derecho a reclamarle por su infidelidad, ni siquiera sabía si en las costumbres de los arcángeles se reconocía la infidelidad como censura, o eran libre de acostarse con quien quisieran. Ella era libre de hacer lo que quisiera, ella había pasado sola por lo peor.Jack estaba cargando una escopeta de gran calibre mientras que la protegía con su cuerpo por si el arcángel entraba por la puerta que golpeaba en cualquier momento. Pobre Jack, su vida entera matando bichos lo hacían creer que era el único capaz de pro
Narrador Omnisciente Después que se hubo marchado Egnar, Arizona recogió su ropa del piso y comenzó a vestirse. La blusa estaba rasgada y descargó su mal carácter en ese hecho, le lanzó una mirada al tal Jasciel hecha una furia. Tendría que deambular medio desnuda, y aunque había sido una de las mejores noches de su vida mientras estuvo entre los brazos de Jack, jamás lo admitiría. Sus alas por el momento estaban a salvo...o no... el estupido de Egnar sabia que ella era un arcángel, podía vengar su traición contándole a su padre Richard Bronwbear o al propio Jack Moore. Otra razón para asesinar a ese maldito con sus propias manos.Desde que se convirtió
Narrador Omnisciente Las palabras de Jack daban vueltas en su cabeza. No podía concentrarse en nada más. ¿Qué tipo de trabajo realizaba junto a su padre y el esclavo alado?. ¿ Qué podía ser peor que esos galpones llenos de criaturas sobrenaturales que eran asesinadas y sus cuerpos arrojados al mar, como si no poseyeran alma?. No podía imaginarse que podía ser peor que eso. No quería ver a Jack involucrado en semejantes atrocidades que lo dejaban mal parado ante sus ojos, y lo alejaban cada vez más de su humanidad arrancando lo poco que quedaba que valía la pena salvar de él.Algo grande manejaba su padre, cuando Jack ni siquiera sabía cuándo regresaría. El tiempo era lo d
Narrador Omnisciente Jack la llamó para sacarla del trance, ella se había paralizado totalmente.—¿Ocurre algo?— preguntó enarcando una ceja y tirando suavemente a Arizona por la mano para hacerla caminar.—Eh, no, yo solo me distraje — musitó ella sacudiendo la cabeza.—Parecía como si hubieses escuchado algo—insistió.—No, no te preocupes, solo tuve un deja vu— al escuchar esto el sonrió.—Así que mi bella esposa estuvo casada
Narrador OmniscienteLa depositó en la cama suavemente y se acomodó despacio entre sus piernas. Ansiaba besar hasta el cansancio a la única mujer que le había demostrado que él valía la pena aunque fuera un poco.Una que no lo miraba como un pedazo de carne, o como un peldaño para escalar lugares en la podrida sociedad de Delment. Tampoco reparaba en sus cicatrices, a muchas entre ellas a la propia Hænlüz le causaban repulsión las marcas en su cuerpo y había ofrecido hasta borrarlas con su magia.Arizona se entregaba a él como nunca nadie más lo había hecho. Eso hacía en su pecho algo creciera a pasos acelerados. Está vez
Jack MooreSalí de casa pasadas las 9 am. Me retrasé enredado en ciertas piernas largas y deliciosas. Por mi no hubiese salido nunca de ahí. La vida matrimonial tiene muchos más beneficios de los que imagine. El resto de la mañana tuve trabajo en la comandancia con cientos de asuntos de la logística de el ejército. Tan pronto como llegó el mediodía fui convocado.Hoy tengo que ver a Richard, más que eso, tengo que mancharme otra vez de sangre para calmar su sed. La periferia está más sola que de costumbre, conduzco mi auto a toda velocidad ya que voy tarde a mi cita con el mismo diablo. Mientras el coche avanza, estoy sospechándo qué no será un día normal. Esta lucha sin sentido aminora mis fuerzas, me hace sentir repulsión de toda la raza humana, aunque después de conocer las otras no me quedo muy ale
Narrador OmniscienteArizona voló al tiempo que sangraba de cada herida, en algunas de las cuales conservaba fragmentos de vidrio desgarrando su carne. Las palabras de Jack eran mucho más dolorosas que todas esas pequeñas astillas lacerantes. Todo había acabado entre ellos de la peor manera y el solo el saber que no volvería a verlo estaba lastimando su ahora frágil cuerpo más que ninguna otra herida.Sería capaz de dejarse matar por Jack con tal de estar en sus brazos nuevamente. Era absurdo seguir pensando en él, aunque no podría arrancarlo de su m
Narrador Omnisciente — ¿Cómo demonio te atreves a entrar aquí?— gritó exasperado— ¿Como puedes jugar así con mi dolor?.Hænlüz toma su forma humana, poco a poco sus rasgos se fueron convirtiendo hasta tomar su aspecto de ninfa y usando su magia apartó los trozos de vidrio que se alejaron de su cuerpo elevándose a su alrededor suspendidos en el aire hasta caer a metros de su cuerpo en un círculo perfecto que la rodeaba. — No estoy de humor Hænlüz— dijo Jack esta vez con un tono frío y siniestro. La sorpresa de que no fuera Arizona ya se estaba