Narrador Omnisciente
Después que se hubo marchado Egnar, Arizona recogió su ropa del piso y comenzó a vestirse. La blusa estaba rasgada y descargó su mal carácter en ese hecho, le lanzó una mirada al tal Jasciel hecha una furia. Tendría que deambular medio desnuda, y aunque había sido una de las mejores noches de su vida mientras estuvo entre los brazos de Jack, jamás lo admitiría.
Sus alas por el momento estaban a salvo...o no... el estupido de Egnar sabia que ella era un arcángel, podía vengar su traición contándole a su padre Richard Bronwbear o al propio Jack Moore. Otra razón para asesinar a ese maldito con sus propias manos.
Desde que se convirtió
Narrador Omnisciente Las palabras de Jack daban vueltas en su cabeza. No podía concentrarse en nada más. ¿Qué tipo de trabajo realizaba junto a su padre y el esclavo alado?. ¿ Qué podía ser peor que esos galpones llenos de criaturas sobrenaturales que eran asesinadas y sus cuerpos arrojados al mar, como si no poseyeran alma?. No podía imaginarse que podía ser peor que eso. No quería ver a Jack involucrado en semejantes atrocidades que lo dejaban mal parado ante sus ojos, y lo alejaban cada vez más de su humanidad arrancando lo poco que quedaba que valía la pena salvar de él.Algo grande manejaba su padre, cuando Jack ni siquiera sabía cuándo regresaría. El tiempo era lo d
Narrador Omnisciente Jack la llamó para sacarla del trance, ella se había paralizado totalmente.—¿Ocurre algo?— preguntó enarcando una ceja y tirando suavemente a Arizona por la mano para hacerla caminar.—Eh, no, yo solo me distraje — musitó ella sacudiendo la cabeza.—Parecía como si hubieses escuchado algo—insistió.—No, no te preocupes, solo tuve un deja vu— al escuchar esto el sonrió.—Así que mi bella esposa estuvo casada
Narrador OmniscienteLa depositó en la cama suavemente y se acomodó despacio entre sus piernas. Ansiaba besar hasta el cansancio a la única mujer que le había demostrado que él valía la pena aunque fuera un poco.Una que no lo miraba como un pedazo de carne, o como un peldaño para escalar lugares en la podrida sociedad de Delment. Tampoco reparaba en sus cicatrices, a muchas entre ellas a la propia Hænlüz le causaban repulsión las marcas en su cuerpo y había ofrecido hasta borrarlas con su magia.Arizona se entregaba a él como nunca nadie más lo había hecho. Eso hacía en su pecho algo creciera a pasos acelerados. Está vez
Jack MooreSalí de casa pasadas las 9 am. Me retrasé enredado en ciertas piernas largas y deliciosas. Por mi no hubiese salido nunca de ahí. La vida matrimonial tiene muchos más beneficios de los que imagine. El resto de la mañana tuve trabajo en la comandancia con cientos de asuntos de la logística de el ejército. Tan pronto como llegó el mediodía fui convocado.Hoy tengo que ver a Richard, más que eso, tengo que mancharme otra vez de sangre para calmar su sed. La periferia está más sola que de costumbre, conduzco mi auto a toda velocidad ya que voy tarde a mi cita con el mismo diablo. Mientras el coche avanza, estoy sospechándo qué no será un día normal. Esta lucha sin sentido aminora mis fuerzas, me hace sentir repulsión de toda la raza humana, aunque después de conocer las otras no me quedo muy ale
Narrador OmniscienteArizona voló al tiempo que sangraba de cada herida, en algunas de las cuales conservaba fragmentos de vidrio desgarrando su carne. Las palabras de Jack eran mucho más dolorosas que todas esas pequeñas astillas lacerantes. Todo había acabado entre ellos de la peor manera y el solo el saber que no volvería a verlo estaba lastimando su ahora frágil cuerpo más que ninguna otra herida.Sería capaz de dejarse matar por Jack con tal de estar en sus brazos nuevamente. Era absurdo seguir pensando en él, aunque no podría arrancarlo de su m
Narrador Omnisciente — ¿Cómo demonio te atreves a entrar aquí?— gritó exasperado— ¿Como puedes jugar así con mi dolor?.Hænlüz toma su forma humana, poco a poco sus rasgos se fueron convirtiendo hasta tomar su aspecto de ninfa y usando su magia apartó los trozos de vidrio que se alejaron de su cuerpo elevándose a su alrededor suspendidos en el aire hasta caer a metros de su cuerpo en un círculo perfecto que la rodeaba. — No estoy de humor Hænlüz— dijo Jack esta vez con un tono frío y siniestro. La sorpresa de que no fuera Arizona ya se estaba
Narrador OmniscienteEgnar llevaba días tratando de mantener a Jack con vida. Ya ni recordaba la cantidad de veces que había matado a algún merodeador de su sobrino. Por más que se esforzará en perseguirlo y cuidarlo, a Jack sólo le interesaba encontrar el paradero de una sola persona. Convencerlo de que levantara otra vez la frontera mágica habia sido imposible. Él muy animal era más necio cuando estaba poseído por la ira. Si antes era una jodida roca sin sentimientos, ahora esa roca tenía una cubierta de acero fundido. No había forma de saber si pensaba en algo más que en su deseo de destripar a Richard. La ciudad había sido invadida por toda clase de criaturas y ya no tenía
Narrador Omnisciente—Jack detente de una maldita vez, no soy tu puto niñero— gritó Egnar mientras caminaba a paso apurado tras su sobrino que estaba empecinado en derribar una por una las puertas del palacio de la Alcaldía.— Por mucho que busques no encontrarás a esa rata aquí. Richard cuenta con el apoyo de las brujas que lo esconden hasta Que la situación de la frontera se controle. No es más que un cobarde, y si llega a sospechar que vas tras él desaparecerá definitivamente. Egnar abre sus alas y de forma rápida cae al frente de sus sobrino que no oye razones y trata de quitárselo Para seguir avanzando en su cometido.
Último capítulo