Casi me atraganto con el zumo de naranja al escuchar aquella propuesta, observo a mi mejor amiga y la estudio con ojo crítico cuando de pronto la tía Jenny y mi primo Arturo rompieron el silencio con una muy notoria carcajada.
—Definitivamente no —respondo haciendo una mueca.
—¡Vamos Candice, será divertido! —Sandra me pone ojos de cachorro—. ¡Arturo nos acompañará! Es bueno que te diviertas un poco, ¡noche de chicas!
—Prima, no te haría daño un poco de diversión acorde a nuestra edad —masculla Arturo con una sonrisa de oreja a oreja.
—Hablan como si fuera una anciana —ruedo los ojos al tiempo que me cruzo de
—¿Hola? —la voz de una chica hace que me detenga en seco.—¿Dónde está Damon? —pregunto con mi corazón acelerado.—¿Quién lo busca? —interroga aquella voz femenina y chillona.—Pues su novia —respondo con molestia ignorando las miradas curiosas de mi primo y de mi mejor amiga.Una carcajada acompañada de otras más logro escuchar, eso sin contar la música a tan alto volumen que se podía apreciar con claridad.—¡Damon, cariño, te habla tu novia!Escucho como aquella chica le grita, ¿car
Comienzo a esquivar a la gente que bailaba absorta de lo que sucedía a nuestro alrededor cuando Damon logra alcanzarme tomando mi brazo con fuerza. Mi mente intenta pensar en todas las posibilidades que hay de escapar de él, incluso me preparo para salir corriendo hasta la casa de la tía Jenny pero al poco tiempo reacciono, no sería sensato recorrer a pie esa distancia de noche; ataviada con aquel vestido tan entallado y sin compañía. Me giro y le indico a Damon con la mirada que me suelte pero su gesto frío me dice que no está dispuesto a hacerlo. Volteo a mí alrededor en busca de ayuda pero nadie nos presta mucha atención, las personas no dejaban de bailar, se saludaban las unas a las otras. Todo el mundo parecía muy contento, todos menos ella. Algunos incluso gritaban escandalizados cuando una chica se quitó la ropa y bailaba completamente desnuda.
Aquel chico se pone de pie, le avienta una mirada cómplice a Damon y enseguida ambos se carcajean. Después de eso me había convertido en un manojo de nervios.—Soy Louis Madden, amigo del idiota de tu novio Damon, lamento lo que escuchaste pero era un juego que tenemos él y yo, no se ha cogido a nadie, al menos que yo sepa, el tipo sigue siendo un virgen de primera —Louis estalla en risas y me doy cuenta de que piensan que Damon sigue siendo virgen, lo que me tranquiliza ya que no me gustaría que anduvieran hablando de mí.—Un placer conocerte...Estiro la mano a modo de saludo pero por el contrario, Louis me abraza y me susurra al oído algo que hizo que mi corazón diera un vuelco y me relajara.
El ambiente que se respiraba en aquel lugar era verdaderamente inquietante.—Es la chica de Damon —finaliza Dave apagando el cigarrillo sobre el brazo de uno de los chicos que acompañaba al dichosos Gerk, quien por cierto ni se inmutó al ver el gesto de dolor de su amigo.Gerk me suelta rápidamente y me ignora como si no existiera pero puedo percatarme que aquel chico que Sandra y yo conocíamos tan bien me mira con ojos de cachorro. La chica que parecía modelo intensifica su sonrisa de víbora al escuchar que Damon es mi novio y termina clavándome sus fríos ojos.—Creo que podemos descartar este pequeño incidente lleno de confusión, las novias de mis chicos se respetan, aunque debo admitir que siento
Eran las diez de la mañana y todavía no había tenido el valor de bajar a desayunar, después de varios avisos por parte de mi primo, de mi mejor amiga y hasta de mi tía, decidí de mala gana que no tenía apetito, hasta ahora. En mi mente repaso la noche anterior y siento deseos de salir corriendo y abrazar a Edwin. O al menos eso es lo que imaginaba, nunca pensé que Damon fuera esa clase de chico, y mucho menos que mintiera con algo tan importante para mí. Cierro los ojos unos segundos más con la esperanza de quedar dormida pero al final mis suplicas mentales no surten efecto alguno sobre mi cuerpo.NOCHELos latidos de mi corazón se aceleran poco a poco y solo intentaba no pensar en lo ocurrido, mi alma estaba rota.
DÍADecido bajar sin tomar mi celular debido a que no había dejado de sonar y de vibrar todo el tiempo. Cuando por fin lo hago, no hay nadie en casa. O al menos eso es lo que pienso hasta que unos brazos rodean mi cintura estrechándome contra un cuerpo cálido.—Pensé que nunca bajarías y estaba tentado a subir a tu habitación —me susurra Damon.—¡Dios, me has pegado un buen susto, suéltame! —Exclamo alejándome de él- ¿qué haces aquí?—Jenny y Arturo me han dejado entrar temprano, estoy aquí desde que amaneció, fueron de compras y Sandra se ha marchado con Dave —me explica y
El ambiente que se respiraba en laestancia no podía ser más hostil, amenazador o todo lo que terminaba en fatalidad. Armand se había sentado a mi lado y al otro Sandra, lo que llevaba a Damon y a Dave frente a mí, Arturo divertido con aquella situación solo observaba con curiosidad mientras que mi tía Jenny no paraba de contar sus malos chistes desde que nos sentamos en la mesa. El pequeño invitado de mí amiga se había retirado afuera al recibir una llamada. Yo intento comer la ensalada pero al tocar el tenedor con un ligero movimiento termino por tirar un poco sobre mis piernas.—¡Candice, cariño, la ensalada es para comerse, no para tirarla! —exclama mi tía soltando al final si típica risa.—¡Oh, lo siento, fue un accidente y...! —Me disculpo a punto de tomar una servilleta para limpiarme pero justo en ese momento Armand la toma con mayor velo
—Digamos que tengo cierta ventaja que el resto —Armand avienta su mordaz comentario.—¡Nos morimos por saber cuál es la dichosa ventaja! —expresa Damon en tono teatral.—Pues la conozco desde hace años, sé sus manías, puedo saber que está enfadada con tan solo mirarla aunque finja una sonrisa al resto, sé que odia el invierno y que ama el helado, también que le gustan las películas de fantasía y que odia a Justin Bieber... ¿Quieres que te haga una lista detallada? —Armand abre los ojos como platos.—Creo que es mejor terminar de cenar —sugiero y todo el ambiente se llena de un silencio ensordecedor.—¡