Moscú, rusia.Drako.Desperté con tres mujeres desnudas en mi cama, la noche de ayer fue un descontrol total. Derritieron mi piel con sus caricias, moldearon de nuevo a la bestia que llevo dentro. Borraron con besos húmedos las huellas que aún conservaba del amor que predique por mucho tiempo a una mujer de cabellos negros que ahora no puedo recordar su nombre o por lo menos eso puede decir para confundir a mi mente. Hable con la luna para que no se fuera y me alcanzara la oscuridad para fundirme entre estos cuerpos esqueléticos que me dieron placer por unos cuantos billetes. Me levanté de prisa por las intensas nauseas que sentí al percibir los olores que dejo en mi cuerpo un encuentro tan carnal. Al llegar al escusado devolví lo poco que tenía en el estómago.—Carajo —enjuague mi boca antes de meterme a la ducha. Cuando salí del sanitario las chicas aun dormían plácidamente, sin intenciones de despertarlas me retire de la habitación y pague la cuenta en la recepción.—Señor —como es
—¿Todo bien? —el uniformado que bajo de uno de los vehículos es el coronel del ejército ruso, lo conozco desde hace mucho tiempo, se podría decir que hemos compartido un poco de todo en este ambiente tan hostil que se vive entre la mafia y la justicia.—Si. Solo venía a joderme la vida.—¿Es por lo que sucedió en Afganistán? —pregunto sin mirarme.—Asi es.—¿Rescataste a la chica?—Por supuesto que si —sonreí de lado —. Nadie puede escaparse de mí.—Eso ya lo sé —se alejó de mi como si nada hubiera pasado.Regrese a lo que estaba haciendo. Asuntos de política no me interesan, está claro que nunca podre pisar la tierra de Afganistán, cosa que no estoy dispuesto a hacer. Antes de anochecer termine de acomodar el motor en su lugar, mañana a primera hora del día volare esta maravilla de jet. Al volver a la residencia en la que me estoy quedando, lo primero que hice fue ducharme y cambiarme de ropa para bajar a cenar. El silencio es un perfecto cómplice para relajar mi adolorida cabeza.P
Un par de días después.Agnes.Me levante super temprano para ducharme. Tengo una cita con la ginecóloga y el señor Dorien me acompañara ya que se muere de las ganas de conocer a su nieto. Es la primera vez que me siento apoyada por alguien que no es de mi familia. Aun no le he dicho nada a mi madre, espero que después pueda perdonarme. Apenas ayer cuando hable con ella por el móvil le explique en donde me estaba quedando y le pedí de favor que no le dijera nada a Drako. Al menos me prometió que guardaría el secreto con la condición de que por lo menos le llame dos veces a la semana. En ocasiones pienso que mi madre no me quiere tanto como a su “pequeño niño indefenso”.—¿Ya estas lista? —Dorien medio abrió la puerta de mi habitación para que pudiera escucharlo.—Si, solo esperame cinco minutos.—Ok, estaré en el comedor —seguí en lo que estaba. Me termine de maquillar y acomode mi cabello antes de tomar mi bolso. Baje los pequeños escalones del pasillo e inmediatamente Dorien corrió
Con todo organizado comencé a trabajar en una de las aterrazas. Las cifras y números estaban de acuerdo con los nuevos informes de los directivos, aunque encontré varios errores pude corregirlos realizando un par de llamadas a la compañía. También me encargué de la cuenta bancaria del señor Dorien, mucho dinero había ingresado por medio de transferencias, pero aún no se veían reflejadas en la cuenta, asi que con mucha calma tuve que comunicarme con el banco para aclarar esos pequeños inconvenientes. Tarde más de cinco horas solucionando el gran desajuste de las cuentas, pero afortunadamente logre hacerlo antes de que mi suegro apareciera.Cenamos como de costumbre, pero esta vez me sorprendió mucho que mi estomago si aceptara toda la comida que decidí comer. Cante victoria mucho antes de que sintiera asco por el olor de las manzanas, una vez más, devolví todo lo que había ingerido. Es agobiante estar en esta condición ya que no puedo comer lo que más me gusta.—Descansa —Dorien me tra
—Ayer discutí con mi madre, bueno… no se si eso se considere como un conflicto —le dije.—¿Qué fue lo que sucedió? —Dorien dejo de comer para prestarme atención.—Le reclamé por todo lo que ha hecho por Drako —cubrí mi rostro con mis manos, sentía un poco de culpa por lo que le dije,—¿Por qué lo dijiste?—Resulta que mi madre no ha parado de llamarlo cuando el hombre ni siquiera quiere verla ni en pintura. Es obvio que quiere disfrutar de su soledad, aunque sea un par de meses.—Eso es cierto, lo que Drako necesita es tranquilidad para aclarar su mente.—También el dije que lo apoya más que a mí.—Bueno… no se como responder a eso, creo que ella es tu madre y sabe muy bien como es que debe tratarte.—Se supone que yo soy su hija.—Y Drako es un su hijo, aunque no lo haya parido —levanto ambas cejas — ¿Cuál es el enojo? ¿Por qué tanto reproche?—Necesite a mi madre cuando ocurrió lo de Bruno y ella prefirió ocultarse entre los brazos de Drako.—Carlotta te busco por mucho tiempo, siem
Veinte días después.Bogotá, Colombia.Edgar.—Tenemos un aumento en la productividad del 70 por ciento. Es una verdadera maravilla que la marca de café este en la cima del mercado internacional —dijo el director comercial. Está muy claro que es un hombre bastante dedicado a su trabajo.—Efectivamente, las acciones que se están llevando a cabo con el tema de la publicidad del nuevo café especial han provocado que el número de consumidores aumente —el responsable de marketing implemento un nuevo modelo de comerciales proporcionando a los clientes una mejor experiencia en donde pueden dar su crítica al producto.>—Relativamente el gran trabajo que se está realizando ha dado como fruto el vieje a Italia que próximamente haremos para promocionar el café —dijo el director de finanzas.—Estos últimos días que pasaremos en la empresa serán relativamente importantes ya que debemos dejar todos los asuntos pendi
—Aca va el asuntillo, déjeme le explico —le ofrecí un trago de whisky —. El chisme es rápido y concreto, un tal Drako Marchetti lo asesino y lo hizo pecadillo.—A ver, todo con calma porque me has dejado loco y sin ideas —tome asiento frente a él.—No sé qué fue lo que sucedió porque su primo no me lo explico solo me dijo que el Drako asesino al persa porque según tenían asuntos que debían resolver y la única manera que encontraron fue en un duelo a muerte.—Vaya, eso sí que es novedad —comencé a pensar en todas las posibilidades —¿Qué más te dijo mi primo?—Aca va lo bueno. El detective que contrato para vigilar a su hembra lo asesinaron cruelmente en Italia, justo cuando hubo un enfrentamiento entre hombres armados. Precisamente personal del italiano ese que le acabo de mencionar.—Por eso ya no apareció —fruncí el ceño. Todo encaja a la perfección, algo anda mal con Agnes.—Asi es, pero afortunadamente su primo tiene más personas vigilando a la chica y averiguaron más cosas.—Habla
Roma, Italia.Agnes.—¿Estas bien? —cuando desperté lo primero que observe fue el rostro de Dorien y a su alrededor estaban varias personas que me miraban con desconcierto.—¿Qué…? —me dolía la cabeza cuando me incorpore en el sillón. Al instante los recuerdos sobre el paquete me quitaron el aliento, fue horrible mirar algo asi—¡Alguien envió algo a la residencia!—Calmate, ya lo revisé, no pasa nada —Dorien rodeo mi cuerpo con sus brazos —¿Debe permanecer en reposo doctor?—Claro que sí. También es necesario que la señora se alimente correctamente en estas veinticuatro horas. Eso le ayudara a relajarse —dijo el caballero de bata blanca que me miro al rostro —¿Cómo se siente?—Me duele la cabeza y tengo un poco de nauseas —dije.—Acompáñenla al baño —le dijo Dorien a una de las empleadas.—Si, señor —la jovencita sujeto mi mano y muy amablemente me ayudo a ponerme de pie. En el interior del sanitario devolví todo lo que tenía en el estómago. Al poco tiempo me sentí un poco mejor.—¿Li