—Necesito verte en modo papá, en verdad que te vas a ver tan lindo —acaricie su brazo —. Te amo tanto y de todo corazón te digo que eres el hombre más lindo que he conocido en toda mi vida.

—También te amo mi cielo —sonrió —. Asi que ya sabes, nos espera una vida llena de viajes y muchas cosas más, debes prepararte para cumplir todos los antojos de dos caballeros que te protegeremos con nuestra vida.

—Una gran familia de tres.

Ambos nos quedamos profundamente dormidos. Todas las noches que hemos pasado despiertos nos cobraron factura, debe ser normal con tanto desvelo. Solo nos levantamos de la cama para ducharnos y colocarnos el pijama para volver a la cama. Edgar bajo para cenar algo ligero ya que por la preocupación que siente por mi pues casi no le da hambre y la verdad es que me siento culpable por eso. No me gustaría que le sucediera algo solo porque se está descuidando para cuidarme a mí. Esto que si es un terrible problema si se llega a complicar más de lo debido. Pude descans