Capítulo 22.

Se encuentra enmarcada por un marco de madera de tonalidad rojo oscuro y su rostro ya se encuentra pálido, con los ojos empañados por lágrimas. Sostenía la fina hoja en la palma de la mano. Sus muñecas pintadas de rojo estaban desgarradas, Ofelia súplica.

—No me dejes… —Noah corre hacia ella y la desprende de la hojilla, ella se desploma en sus brazos.

Las horas en la clínica parecen interminables, y Noah se sentía culpable por el daño que ella se había infligido. La agonía se vuelve lenta. Finalmente, llega el médico que atiende el caso de Ofelia.

—¿Cómo se encuentra ella, doctor? ¿Dígame, el bebé está bien?

—Ella estará bien —aseguró el médico; no obstante, en su expresión hay confusión —. ¿Embarazo me dijo? —Noah, asiente, su inquietud es más tormentosa.

—Temo que su esposa no está embarazada—. Noah advierte que el tiempo se interrumpe, aquello había sido el punto de quiebre. Ofelia lo había estado manipulando.

Aquella imagen no podía borrarse de la mente de Noah, había pasado cas
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP