Después de esa primera llamada que tuvo Leonardo tras despertar de la muerte, ha sentido que todo a su alrededor ha mejorado. Puede decirse que las piezas rotas de su corazón han empezado a unirse y todos los que han estado involucrados en ese camino espinoso, han encontrado su sendero recto, iluminado por el perdón. Empezando por Amanda que lo visitó junto a sus amigos del despacho por la tarde ese día. Todos hablaron, bromearon y se tomaron fotografías. Antes de irse, le pido a Amanda quedarse unos minutos más.
—Perdóname por no amarte como merecías —le dice apenado.—No tiene que hacerlo, ya le dije antes que lo que paso entre nosotros fue una página extra escrita en nuestras vidas, de la que no me arrepiento por un solo segundo. Porque fi feliz. Por lo menos yo lo atesoraré en mi corazón.—Mereces encontrar a alguien te amé con la misma intensidNOCHE BUENACuando la época navideña llega, las emociones afloran y las ganas de aferrarse a la vida crecen. Es una época de cambios y futuros planes para que la familia al fin esté reunida, deje sus diferencias y se miren de frente al perdonarse.Y esta temporada para Leonardo es muy especial, no solo porque ha recuperado a su padre, sino también a la mujer que ama y a su hija, pero existe un motivo más para sentirse dichoso; la operación recibida en sus piernas hace unas semanas ha sido un verdadero éxito, después de las terapias volverá a caminar sin problemas.Durante estos meses la compañía de sus dos amores, sobre todo el de Fernanda que se ha convertido en su mejor amiga y confidente, no solo es la luz de sus ojos y el motivo más grande para entregarse en cuerpo y alma a sus terapias de rehabilitación. Y Daniela, el amor más grande que pu
seis meses despuésDicen que no hace falta una boda para completar la felicidad, que solo es un acto simbólico para sellar un compromiso, pero esos eternos enamorados quieren hacer realidad el sueño de su hija y el suyo propio de hace muchos años. Para eso, Leonardo y Fernanda planearon lamás romántica e inusual pedida de matrimonio.—tú sabes más de esto que yo, hija —le dice su padre—¿Crees que le guste?—El anillo está precioso y mamá es la más sensible y romántica. Le encantará el detalle.Esa noche la familia entera fue al restaurante chino, despuésde disfrutarde una rica cena, la mesa reparte unas galletitas chinas.—Descubran su suerte —les dice a cada uno antes de irse.Todos se miran y sonríen, porque ya sabe lo que vendrá luego.—Q
Dicen que tarde o temprano la vida nos lleva al camino correcto, no importa lo que demore, hay que tener presente que la felicidad está dentro de nosotros y que si dejamos ir el pasado podemos quitarnos la venda de los ojos y mirar hacia otros horizontes, donde la persona destinada aún espera por nosotros.Dicen que una simple mirada puede decirnos que el amor volvió a tocar nuestra puerta. Que no te sorprenda si un choque accidental te hace dar cuenta que esa persona estuvo cerca de ti toda la vida.Dicen que las heridas del corazón sanan rápidamente y las cicatricen se borran cuando decides volver a empezar.Y Paola estaba por liberar su alma de las culpas y el destino a punto de recordarle que la felicidad nunca se apartó de su camino, porque todos merecen ser felices si así lo desean.—Felicidades por obtener el ramillete— Se escucha una dulce voz a sus espaldas.Al darse la v
El camino a la felicidad no ha sido fácil. Sin embargo, en esa fiesta, tanto Paola, como Cindy han sabido levantarse de las caídas, recuperarse de los tropiezos y seguir persiguiendo un sueño. El amor verdadero. Ese amor que estuvo siempre presente y no vieron con anticipación, pero ahora recobraran.Para Leonardo y Daniela su camino no ha sido precisamente uno lleno de rosa, pero tampoco lleno de espinas. Es verdad, se perdieron en el camino y buscaron otro sendero para recuperar el suyo propio. Pero a medida que avanzaron encontraron la luz que volvió a unirlos, porque nunca estuvieron solos marchando en la oscuridad.Y precisamente ahora, podían ver que ese gran faro que los guiaba era su amor, ese amor puro que traspaso barreras.—¿Puedo saber a donde irán de luna de miel? —Pregunta Fernanda.—Hay un lugar que siempre quisimos conocer juntos—responde Leonardo— es
Daniela y yo cumplíamos exactamente dos años de novios esa tarde de primavera. Para ser sincero, creí que nuestro amor perduraría por siempre, que me casaría con ella al llegar a ser adulto y tendríamos muchos hijos; tan hermoso como ella, con esos ojos almendrados color marrón que tanto amaba. Recuerdo que reía cuando le contaba mis planes futuros, creo que la parte que más le causaba risa, era el saber las locuras que harían nuestros hijos, porque en ese entonces éramos un par de locos.Aquella tarde nos hicimos una promesa de amor mientras colocábamos nuestros nombres en el árbol de sauce junto al río.—Algunas parejas prometen amarse toda la vida, en cambio, yo quiero hacerte una promesa muy especial que solamente tenga significado para nosotros. Porque sabemos que nuestro amor es verdadero y porque creo que existe la vida m&aacu
Después de una larga noche de copas en el club de su amigo Richard, Leonardo se despierta con un terrible dolor de cabeza. No tenía idea de la hora que era, apenas pudo mover la mano para tomar con dificultad el teléfono de su velador.—¡Carajo! —Gruño con malestar al ver las llamadas perdidas de mi novia.Se da la media vuelta y siente que la cabeza le explota, lleva sus manos a la cara y maldice al recordar queAmberllegará al medio día.—¡Ay! Espero que no empiece con su histeria porque en estos momentos juro que no tengo ganas de soportarla.El reloj marcaba las once, piensa en quedarme en cama unas horas más, hasta que recuerda que tiene una reunión con el ingeniero Ramírez a las dos de la tarde. “¡Maldición!” Respira profundo y se pone de pie con toda la pereza del mundo.—¡Maldito seas Richard! —Se queja con las manos en la cabeza caminando con dificultad. Todo le sigue dando vuelvas—Si no tuvieses las mejores mujer
En definitiva, Leonardoteníaun gran problema, sus sentimientos estaban revueltos, hace tres años estaba seguro de lo que quería, ahora noentendíalo quesucedíacon su corazón,Amberhabíasalido del departamento, muy molestay él seguía pensando en lo quedebíahacer. Se suponía que era la mujer que amaba.“¡Maldición!” se dice colocándose la chaqueta y tomando las llaves del auto y va tras ella antes de que llegue al ascensor, mientras Dani lo observa sorprendida, cruzada de brazos,causándoleun dolor en su pecho.—¡Amber! ¡Porfavor, detente! —Grita, haciendo que se detenga justo en la puerta del ascensor.Lo mira un poco molesta, pero con esa media sonrisa
Cuando regresaron a casa ya eran más de las seis de la tarde. Leonardo quiso pedir una pizza, peroAmberinsistió en cocinar algo y la culpa por haber cortado su tarde de descanso lo consumió. También me colocó un delantal y le ayudo con la preparación, aunque no estaba cien por ciento concentrado, Hablan y sonríen, como si todo estuviese normal.—Me encanta compartir contigo estos momentos. Te amo. —Dice ellaacercándosepara besarlo.Élcorresponde el gesto, pero sintiéndosevacío, algo pasaba en su interior que lo dejaba muy insatisfecho, sus besos no sabían a nada y hasta esta sonrisa que brota de sus labios se sentía falsa.Una hora después estaban mirándose frente a frente a punto de empezar la cena, felices, olvidando aparentemente el incidente de la mañana, Leonardo seguía temeroso, callado y fue ella la que terminara rompiendo el hielo preguntándole por su contrato de ayer, aunque el recordarlo, la llenara de coraje.